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INFOKRISIS, el blog de Ernest Milà

DOCTRINA ZAPATERO

La doctrina excéntrica (IV de VI). El nexo NNUU-ocultismo (Parte C)

Infokrisis.- La existencia de la Sala de la Meditación no relaciona directamente Buena Voluntad Mundial ni el resto d grupos fundador por Alice Ann Bailey con la Sala de la Meditación. Es cierto que, inicialmente, se respira un aroma muy similar, pero no parece existir una relación directa. La cosa varía cuando se examina de cerca la documentación de buena Voluntad Mundial y cuando se leen algunos textos de la propia Alice Ann Bailey. Por otra parte, B.V.M. es una de las pocas organizaciones reconocidas oficialmente por NNUU. Vamos ahora a ver por qué Alice Ann Bailey estaba tan interesada en el desarrollo de un embrión de gobierno mundial, por qué sus discípulos siguen tan de cerca las vicisitudes de NNUU y por qué esta organización internacional ha reconocido a B.V.M. El objetivo de este capítulo es pues establecer los nexos de unión entre el pensamiento universalista de Alice Ann Bailey y los objetivos de NNUU. Esto nos permitirá, posteriormente, recalcar que el interés que Zapatero tiene por NNUU es mucho más deudor de las ideas expuestas por Ann Bailey que de la misma función del organismo internacional.

1. Entrando en la edad planetaria

Lamentablemente los folletos distribuidos por Lucis Trust no tienen ni pie de imprenta ni depósito legal, ni, por supuesto, fecha de edición. Hace falta leerlos con detenimiento para advertir algún dato que permita instalarlos en una franja de tiempo con relativa seguridad. El folleto firmado por Buena Voluntad Mundial, número 15 de la colección y titulado Las Naciones Unidas entrando en la edad planetaria, debió escribirse entre 1975 y 1985 y, en sí mismo, es suficientemente elocuente para demostrar el interés que este grupo tiene en el organismo internacional.

El título del folleto es, en realidad, un paradigma del contenido: alude a una “edad planetaria” (Nueva Era para unos, New Age para los snobs y Era de Acuario para los ocultistas) en la que NNUU jugará un papel relevante. El folleto trata de explicarnos cuál será ese papel. Nos equivocaríamos si pensáramos que en sus 40 páginas (una extensión desusada para una colección en la que la mayoría de folletos apenas pasan de 18 páginas) vamos a encontrar las habituales locuras ocultistas. En absoluto, se trata de un folleto que traspira un pensamiento “blando” y “light”, lo que Gustavo Bueno llamó el “pensamiento de Alicia” refiriéndose a la protagonista del cuento infantil y que encarno en José Luis Rodríguez Zapatero. Por pura casualidad, ese pensamiento corresponde exactamente con los puntos de vista “exotéricos” de otra Alicia, Alice Ann Bailey.

El folleto empieza explicándonos la historia de las NNUU y de la idea que acompañó su fundación desde la Sociedad de Naciones. Los hitos que señala son significativos: “Las NNUU no brotaron repentinamente y de golpe en la Conferencia de San Francisco. Hubo muchos años de trabajo en preparación de esta histórica ocasión. Los ocho puntos de la Carta Atlántica, presentada al mundo por el Presidente Roosevelt y el Primer ministro Británico Winston Churchill el 14 de agosto de 1941, delineaba los principios para un nuevo orden mundial”.  La alusión al Nuevo Orden Mundial no puede tomarse a la ligera, especialmente en un momento en el que los EEUU eran oficialmente neutrales y se estaban preparando para provocar al Japón y entrar en la guerra. En ese momento la “neutralidad” americana era cualquier cosa menos neutralidad. Roosevelt estaba apoyando el esfuerzo bélico de Inglaterra que dependía exclusivamente de los suministros llegados del otro lado del Atlántico y en menos medida de la rústica resistencia de los rusos ante las puertas de Moscú.

El pueblo americano ha sido habitualmente aislacionista. No le ha gustado intervenir en conflictos exteriores que siempre, a fin de cuentas, suponían una sangría para la juventud norteamericana. Esto no ha sido óbice para que, desde la entrada de los EEUU en la Primera Guerra Mundial a través del hundimiento de un buque de pasajeros que trasportaba armamento hasta el extraño atentado de las Torres Gemelas y del Pentágono, la administración siempre se las haya arreglado para condicionar a la opinión pública y obligarle a rectificar su punto de vista pacifista y aislacionista mediante una acción traumática que, inevitablemente, “merecía respuesta”: fue el hundimiento trasatlántico Lusitania en la I Guerra Mundial, fue la provocación al Japón que desencadenó el ataque a Peral Harbour y la entrada en guerra de EEUU, no solo con Japón sino también con Alemania; fue el “incidente de Tonkin” que permitió iniciar al guerra del Vietnam y los bombardeos de Hanoi; y fue, finalmente, lo que se ha calificado como “la gran mentira” de los ataques del 11 de septiembre de 2001 que permitió justificar ante la opinión pública norteamericana las invasiones de Afganistán y de Irak. No es nada raro si tenemos en cuenta que el primer episodio de la independencia norteamericana, el Motín del Té de Bostón, tuvo como protagonistas a los miembros de la logia masónica de esa ciudad, dirigidos por su Venerable Maestre, Joseph Warren, que asaltaron un mercante inglés arrojando todas las cajas de té al mar… disfrazados de indios. Desde entonces la historia de los EEUU ha sido una pura provocación: cuando la población es renuente a entrar en un conflicto, simplemente se asesina a algunos ciudadanos y se señala al “enemigo” como “autor”. La población –nacionalista y poco dada a dejarse avasallar- reclama entonces venganza. A este esquema respondió, por supuesto, la voladura del Maine que justificó la entrada en guerra contra España que, hasta ese momento, solamente propagaba Randolph Hearst y su grupo mediático. ¿Hay que recordar que el yate de Hearst atracó en la rada de La Habana, justo al lado del Maine, sólo unos días antes de su voladura?[1].

Todo esto no es óbice para que B.V.M. parte de la fundación de la Sociedad de Naciones para identificar el origen del proyecto de gobierno mundial: “(…) la planificación y el idealismo condujeron a formar la Sociedad de Naciones. Incluso, aunque la Sociedad fracasase, sus principios estaban profundamente incrustados en la conciencia de aquellos cuya visión era la de un mundo de paz y unidad (…) Estaban convencidos de la necesidad de una organización universal de gobiernos cuyo propósito debería ser la paz mundial.  

Ya en 1921, Émile Flourens, ministro de Asuntos Exteriores de Francia, escribió una copiosa obra denunciando que la creación de la Sociedad de Naciones responde a los intereses de la masonería internacional[2]. Flourens partía de la idea de que el derecho internacional estaba reemplazando al derecho a la libre determinación de los pueblos, gracias al trabajo de la masonería. Así mismo, Flourens fue el primero en advertir que determinadas influencias que él identificaba como masónicas aspiraban a crear una gobierno mundial, una justicia mundial (basada en el dercho internacional) y una religión mundial. Su teoría implicaba que los organismos internacionales de justicia deberían permanecen de forma arbitral y no judicial, pues de ocurrir así –como de hecho así ha ocurrido- imperaría la “ley del más fuerte” y se reemplazaría el derecho por la fuerza. Desde Nuremberg solamente quienes son vencidos se sientan el banquillo de los acusados… Los “crímenes de guerra” solamente, al parecer, los cometen los derrotados: Hitler, Milosevich, Noriega, etc.

B.V.M. ignorando el peso de las sociedades secretas y de los poderes ocultos en la formación de la Sociedad de Naciones, establece un hilo conductor entre este organismo frustrado y el siguiente intento, Naciones Unidas. Lo menos que se puede decir es que B.V.M. apoya entusiásticamente a este organismo: “La Carta de las Naciones Unidas es uno de los mayores logros de la Humanidad. Permanecerá como un faro para todas las futuras generaciones el que a mitad del siglo XX las naciones del mundo resolvieran poner fin al “azote de la guerra” y asegurar un mundo de justicia, paz y progreso para todos”[3].

2. Las dos vías del mundialismo

Más adelante especifican en qué consiste el objetivo final de NNUU: “Las grandes potencias deben aprender que el status quo no puede ser mantenido y que ya no pueden controlar la situación internacional. El verdadero propósito de NNUU y sus Agencias especializadas, es edificar un nuevo orden internacional, y para hacer esto, las naciones deben abandonar voluntariamente algo de su querida soberanía nacional”[4]. Todo esto se presta a alguna confusión. El “nuevo orden internacional” del que habla B.V.M., no es exactamente lo mismo que el “nuevo orden internacional” edificado con la globalización a partir de la caída del Muro de Berlín y de la Segunda Guerra del Golfo (invasión de Kuwait por Iraq). Las palabras no deben dejar pie a la confusión. Cuando B.V.M. recupera los textos de NNUU nos habla de la construcción de un “nuevo orden” en base a unos principios universalistas y a la aplicación de un derecho internacional implícito en la Carta de las Naciones Unidas. Se trata de un planteamiento “idealista” Pero este planteamiento tiene poco que ver con lo que podemos llamar el “nuevo orden mundial”, en absoluto idealista, sino mucho más radical y duro: el nuevo orden querido por las multinacionales y vinculado a la hegemonía mundial de los EEUU. Y no es lo mismo. Quizás el objetivo final se parezca hasta cierto punto (la idea de que es precisa una unificación mundial, restando soberanía a los Estados Nacionales), pero el trasfondo doctrinal y anímico es completamente diferente. Es cierto, además, que en ambos proyectos aparecen los mismos nombres: la dinastía Rockefeller, por ejemplo, financió parte de la construcción del edificio de NNUU y apoyo la construcción de la Sala de la Meditación y de los círculos creados en torno suyo, pero también ha sido uno de los beneficiarios del “nuevo orden mundial” promovido por las multinacionales. Universalismo “idealista” y universalismo “duro”, tales son las dos actitudes vitales: en la primera opción se sitúan NNUU, sus agencias periféricas y grupos de apoyo como B.V.M., en el otro, la alta finanza internacional, las multinacionales y los neo-con que han gobernado EEUU entre 2000 y 2008. Las fricciones entre ambos grupos son frecuentes. No es cierto que ambos respondan a la misma estrategia. Lo vimos cuando los observadores de NNUU negaban la existencia de armas de destrucción masiva en Iraq y cuando el Pentágono y la Casa Blanca afirmaban la realidad de estos medios bélicos. Pero B.M.V. también nos da algunas precisiones al respecto.

En el folleto titulado “La Unidad Internacional”, publicado por Lucis Trust[5] se contienen algunas reflexiones interesantes. Incluso para los más idealistas era evidente que NNUU apenas cumplía con la finalidad para la que había sido creada. Así pues era preciso dar una explicación de por qué se producían reiterados fracasos en la acción internacional de este organismo. En este folleto la dan:

“Con el cese de la guerra (1945), llegó la oportunidad de inaugurar una nueva y mejor forma de vida, estableciendo la paz y la seguridad que todo el mundo anhela. Tres grupos negativos aparecieron inmediatamente en el mundo: 1) Grupos poderosos, reaccionarios y conservadores que deseaban mantener las estructuras del pasado. Aunque carecen de visión, tienen mucho poder, 2) Los ideólogos fanáticos de todos los países: comunistas, demócratas y socialistas, 3) Las masas inmovilistas en todas las naciones, las cuales, ignorantes o indiferentes en su mayor parte, deseaban sólo la paz después de la tormenta y la seguridad en vez del desastre económico”[6]. Y más adelante añaden: “Todos estos factores producen los desequilibrios actuales y condicionan las decisiones de las NNUU”, concluyendo: “Es esencial para la futura felicidad y progreso humano que se encuentren nuevas maneras de manejar los asuntos políticos, religiosos y económicos”[7].

Dicho de otra manera: para los partidarios del “nuevo orden mundial” existen dos días. Una de ellas es NNUU, la vía idealista, otra la vía dura vinculada a grupos económicos y a sectores “ideológicos”. Cuando B.V.M. escribía las líneas que hemos citado aludía a “comunistas”, hoy cabría aludir a grupos neoconservadores norteamericanos. No hace falta realizar un análisis pormenorizado de la política española para advertir que, en su jerga, en sus idas, en sus filias y en sus fobias, Zapatero ha optado por la primera vía. Aznar, por el contrario, hubo, en su momento, optado por la segunda… pero ¿realmente es necesario un nuevo orden mundial? ¿es viable en un mundo en permanente cambio? ¿Son el mundialismo y la globalización, inevitablemente, nuestro destino?

3. B.V.M. y NNUU: Robert Muller, nexo de unión

En varios de sus folletos, B.V.M. explica cómo funcionan NNUU, su estructura interna y su sistema de trabajo, enumeran sus organismos periféricos y las agencias auxiliares y sus principios rectores[8] y lo hacen sin alterar una coma, lo que implica el reconocimiento de que B.V.M. se identifica en un 100% con los objetivos de NNUU. Esta identificación llega hasta glosar incluso la actividad de instituciones cuestionables y de dudosa eficacia como el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional[9]. De hecho, el empobrecimiento y el endeudamiento creciente del Tercer Mundo se ha debido, en buena medida, a la acción de estos organismos que han concedido créditos a Estados que luego no han tenido posibilidades de devolver. Sin embargo, B.V.M. elude formular la más mínima crítica a estos organismos que, a fin de cuentas, no son más que el nexo de unión entre los dos sectores del mundialismo, el “idealista” y el “duro”: principios idealistas, gestores duros.

Robert Muller

Robert Muller, Secretario General Adjunto de NNUU, durante 40 años

Robert Muller es uno de esos cerebros grises que habitualmente son desconocidos en la política internacional y que, sin embargo, tienen un peso y una influencia que ejercen entre bastidores. Muller es superviviente de la primera generación de funcionarios de NNUU. No era un cualquiera: fue durante mucho tiempo secretario general adjunto de NNUU. Los Ban Ki-Moon, los U’thant, los López de Cuellas, los Kurt Waldheim, etc., pasaron, pero Robert Muller ha permanecido siempre en NNUU, al menos ha estado durante 40 años en la dirección del organismo desde 1948, “para trabajar por la paz, para que sus hijos y sus nietos no conocieran los horrores vividos durante la segunda guerra mundial”. Los años en los que Muller estuvo al frente de NNUU como adjunto al Secretario General y verdadero hombre fuerte “interior” de la organización, se crearon 32 agencias especializadas y participando directamente en la creación 11. Se retiró en 1986 pasando a Canciller Emérito de la Universidad de la Paz que NNUU tiene en Costa Rica, en donde todavía sigue. En 1989 fue premiado por la UNESCO –que él mismo había impulsado y contribuido a fundar- con el Premio de la Paz. Redacto un “Programa de Educación para la Juventud” y, por eso se le conoce como “padre de la educación global”. Ha recibido el premio Albert Schewitzer a las humanidades (1993) y el premio Eleanor Roosevelt al “Hombre de Visión” (1994). Actualmente dedica su tiempo a las NNUU en Nueva York y a la Universidad de la Paz.

 

Las ideas de Muller han sido siempre muy simples: gobierno mundial, paz mundial y espiritualidad. A él se ha debido que NNUU diera más importancia a las regiones. Se le ha conocido como “el filósofo de NNUU”. Desde muy joven se interesó por todos estos temas[10]. Tras la II Guerra Mundial realizó su doctorado en Derecho en la Universidad de Estrasburgo sobre “La forma de gobernar el mundo”.

Pero las ideas de Robert Muller, ni en educación, ni en gobernabilidad mundial son propias. Todas ellas –sin excepción- se basan en las enseñanzas de Alice Ann Bailey y de su presunto inspirador Djwahl Khul, “El Tibetano”[11]. Muller es, en definitiva, el eslabón de enlace entre la escuela de pensamiento de A.A.B., su Lucis Trust y las organizaciones anexas y NNUU. Ahora ya podemos entender por qué en NNUU existen lugares anómalos como la Sala de la Meditación que conducen directamente a A.A.B. y por qué los partidarios de ésta consideran a NNUU como una parte de su estrategia. Por eso cuando exponíamos en un capítulo anterior las ideas de A.A.B. y afirmábamos que tenían una influencia internacional cierta, nos preguntábamos si existían bases objetivas para esta demostración. Y la respuesta era Sí. Muller, de hecho, el eterno funcionario de NNUU, el “filósofo” de NNU, es la respuesta.

Muller expresó siempre sus ideas con mucha prudencia, de la misma forma que la obra de A.A.B. tiene una doble vertiente, ocultista para teósofos impenitentes y siempre en la misma línea excéntrica del seudo-espiritualismo de finales del XIX y otra vertiente esotérica, fácilmente asumible y comprensible que es la que ha dado origen a toda esta corriente mundialista. En muy escasas ocasiones estas dos vertientes se entremezclan. En uno de sus libros A.A.B. escribe: “"La prueba del desarrollo del intelecto humano de acuerdo con las líneas receptivas necesarias [para la preparación de la nueva era] se puede ver en el ’planeamiento’ multi-nacional y en los esfuerzos de las Naciones Unidas para formular un plan mundial. En las Naciones Unidas se encuentra el germen y la semilla de un gran grupo de reflexión y meditación internacional, un grupo de hombres y mujeres pensadores en cuyas manos reposa el destino de la humanidad. Esto está en gran medida bajo el control de varios discípulos del cuarto rayo -si tan sólo pudieran percatarse de esto- y el lugar de su foco meditativo está en el plano intuicional o búdico, el plano sobre el cual se encuentra hoy en día toda la actividad de la jerarquía.” La mezcla entre conceptos ocultistas (el “cuarto rayo”, el “plano búdico”, la “actividad de la jerarquía [planetaria]”, etc. Y conceptos sociológicos o políticos (“planteamiento multinacional”, “esfuerzos de NNUU”) es inextricable. Hace falta estar iniciado en la Escuela Arcana para entender exactamente a qué se está refiriendo. Parece increíble que este pensamiento abstruso, difuso y confuso pudiera permeabilizar a un alto funcionario de NNUU (del que no cuesta mucho trabajo inferir que si ha permanecido desde su juventud hasta nuestros días en el límite de su vida biológica en el mismo cargo o en puestos de dirección del organismo internacional, se debe, tanto a su prestigio como a que ha sabido colocar a otros miembros –“tapados”- de su corriente dentro de la jerarquía funcionarial de NNUU), pero así ha ocurrido.

Por otra parte, tanto Daj Hammarksjold (secretario general de NNUU entre 1953-1961) como U’Thant (secretario general de NNUU entre 1961-1973) pertenecieron a la masonería y, por tanto, se situaban en un clima espiritual similar. No hemos podido averiguar ni las logias ni las obediencias a las que pertenecieron ambos secretarios generales de NNUU, pero es evidente que respiraban con Muller un aroma similar. En un libro de recopilación de textos sobre Teilhard de Chardin dirigido por Robert Muller, éste explica que "Dag Hammarskjold, el economista nórdico racional, sostuvo al final de su vida que la espiritualidad era la clave última para nuestro destino terrenal en el tiempo y en el espacio". No en vano Hammarshjold fue, con Trygve Lye (primer secretario general de NNUU, 1948-1953),  el gran promotor de la Sala de la Meditación. Pero hablar de “espiritualidad” es algo muy vago. A fin de cuentas todos somos, más o menos, “espirituales”. ¿A qué tipo de espiritualidad se refiere Muller? Sabemos lo que él entendía por “espiritualidad”: la corriente teosófica encabezada por Alice Ann Bailey que canalizaba mensajes por clariaudiencia de entidades que componían la “jerarquía planetaria” o los “mahatmas” de la Blavatsky. Para Muller que, a fin de cuentas es quien nos habla de las concepciones de Hammarshjold a quien conoció bien y del que fue su primer y más estrecho colaborador, esta es la “espiritualidad” que cuenta.

A.A.B. desea –y pronostica- el advenimiento del anti-Cristo, pero no se trata, en su criterio, de ninguna opción satánica, sino del advenimiento de la era de la humandidad. El anti-Cristo sería el “ante Cristo”, es decir lo que precede a la segunda venida de Cristo, la Humanidad. Dice A.A.B.: "El actual orden mundial (que es en gran medida un desorden) puede ser modificado y cambiado de tal manera que gradualmente aparezca un nuevo orden mundial y una nueva raza de hombres. Dentro de la Asamblea de las Naciones Unidas, aunque no dentro del Consejo de Seguridad, Él [el anti-Cristo] está generando un deseo de unidad que va creciendo lentamente". Como puede percibirse, éste orden de ideas no se aleja mucho del pensamiento de Teilhard de Chardin para el que la especie humana sigue evolucionando. El “plan divino” no termina con la transformación del primate en homínido, sino que va más allá. Teilhard nos dice que el objetivo final de la evolución es la aparición del “Cristo Cósmico” que sería la “humanidad espiritualizada”. Este proceso se operaría mediante la abolición progresiva de las fronteras y los rasgos diferenciales y “materiales” que “dividen” a los seres humanos. Se entiende que Robert Muller se interesara extraordinariamente por la obra de Teilhard hasta el punto de incluir referencias suyas en varios de sus obras[12].

4. La Nueva Era es la Era de Acuario, la Era del Gobierno Mundial

Cuando Hammarskhjold se estrelló en el Congo en un extraño accidente le sustituyó U’Thant, del que también se dijo que era masón, pero sin especificar ni obediencia ni rito. U’Thant impulsó la creación de la organización Planetary Citizen (Ciudadanos Planetarios), en la misma línea de que B.V.M. en el año 1973.

Muller llegó a rescribir el primer capítulo del libro bíblico del Génesis para insertar una referencia a NNUU. El primer versículo de su Nuevo Génesis dice textualmente: "Y vio Dios que todas las naciones de la Tierra, negras y blancas, pobres y ricas, del Norte y del Sur, del Oriente y del Occidente, de todos los credos, enviaban sus emisarios a un gran edificio de cristal [es decir, la sede central de las Naciones Unidas] a orillas del río del Sol Naciente, en la isla de Manhattan, para estar juntos, pensar juntos y juntos cuidar del mundo y de todos sus pueblos. Y dijo Dios: "Eso es bueno". Y fue el primer día de la Nueva Era de la Tierra". Muller reconoce que lo único que le quedó pendiente en su gestión al frente de NNUU fue la proclamación de una “carta de leyes espirituales”. Habitualmente, cuando se comenta la vida de Muller y sus ideas se suele aludir al “sincretismo religioso” y se establecen paralelismos con las opiniones de Daj Hammarskhjold que sostendría análogos criterios sincréticos y cuya cristalización sería la Sala de la Meditación. Pero esto es decir poco. Ambos lo que aspiraban era conseguir no un sincretismo absoluto sino la fundación de una nueva religión mundial. En Decide to Be [Decídete a Ser], Muller escribía: "Decídete a abrirte a Dios, al Universo, a todos tus hermanos y hermanas, a tu ser interno, al potencial de la raza humana, a la infinitud de tu ser interno, y te convertirás en el universo, te volverás infinito, y será en último término tu ser real, divino, estupendo". No se trata del panteísmo conocido hasta ese momento, sino de una forma de panteísmo extremo en que el ser humano evoluciona hasta la divinidad. Casi parece que fuera Teilhard de Chardin que nos estuviera hablando de su “Cristo Cósmico”.

Todas estas ideas no se han quedado en mera palabrería. NNUU se ha convertido en uno de los núcleos difusores del pensamiento New Age y sí es reconocido por todos los grupos que se reclaman de esta tendencia. La página web de Planetary Citizens[13], la asociación que contribuyó a fundar U’Thant es, propiamente un director de grupos newagers. Por lo demás, en toda la obra de A.A.B., la nueva era y las NNUU ocupan un lugar destacado y correlativo: la NNUU es el embrión de gobierno mundial para la “nueva era” (no concebida como una red terapéutica y una tendencia intelectual, sino como un ciclo de tiempo, la Nueva Era de Acuario que sustituye a la era de Piscis, la cual sustituyó a la era de Aries.

Desde los años 80, NNUU ha promovido la creación de días de “Meditación sobre la Paz” liderados por celebridades mundiles vinculadas a la new age. Estos dos días de Meditación sobre la Paz se diseñaron para servir de marco a la ’Primera Carrera Mundial’ de las Naciones Unidas que empezó el 16 de setiembre de 1986 con una antorcha flameante que se pasó de mano en mano alrededor del mundo, culminando el 31 de diciembre de 1986, cuando la antorcha prendió una ’llama eterna’ en la sede central de las Naciones Unidas en Nueva York. La primera meditación sobre la paz se denominó ’el Millón de Minutos del Llamado a la Paz’, mientras que la segunda se llamó ’el Instante Mundial de la Cooperación’[14]. Entre los muchos auspiciadotes y patrocinadores de estos actos estuvieron el Dalai Lama, James Callaghan, Yehudi Menuhin, Richard Leakey, Terry Waite, el Dr. Linus Pauling, la Madre Teresa, el Dr. Robert Muller, el compositor Philip Glass, el comediante Dudley Moore, el actor Ben Kingsley (la estrella de la película Gandhi), Paul McCartney, el fabricante de papel Bowater Scott, la Universidad Espiritual Mundial Brama Kumaris, el Instituto de la Unidad Humana, Ciudadanos Planetarios, la Fundación Gandhi, UNA y Oxfam.

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Así pues, esta excursión nos ha permitido establecer un vínculo entre B.V.M. y NNUU especialmente a través de Robert Muller y de la documentación emanada de los grupos vinculados a Lucis Trust. Finalmente hemos establecido que un sector de funcionarios de NNUU aspiran a convertir la organización en un embrión de gobierno mundial y que a ese gobierno mundial debería corresponder una “nueva religión mundial” tal como ha sido definido en el entorno de la New Age por ideólogos como Theilard de Chardin y la propia A.A.B.

Así mismo hemos concluido que existen dos vías para alcanzar el “nuevo orden mundial”: la “idealista” (quizás se le podría decir también “neo-espiritualista”) y la línea “dura” vinculada a la hegemonía de un país concreto (los EEUU) y de la constelación de multinacionales y alta finanza internacional.

Tal es pues el panorama que hemos descrito. A nadie que siga las declaraciones del presidente Zapatero se le escapa que el “nuevo orden mundial”, en su vertiente idealista se parece extraordinariamente a las ideas que profesa: alusiones constantes a la “paz mundial”, a la “cooperación internacional”, a la “tolerancia”, a un nuevo sistema educativo y de valores finalistas, a la primacía de NNUU en política internacional, a la igualación –nivelación- absoluta de pueblos, razas, personas, sexos, todo esto que constituyen los tópicos comunes del zapaterismo, que hoy no comparte ningún dirigente relevante del “primer mundo”, forman parte del escuálido patrimonio  doctrinal zapaterista. No hay mas ideas fuera de estas. En su vertiente exotérica, todas estas ideas están presentes en el patrimonio ideológico de Alice Ann Bailey y del sector mundialista en el que formaron sus partidarios tras su muerte: la mundialización “espiritualista”.

No hemos logrado identificar un nexo de unión personal y tangible entre Zapatero y estas corrientes mundialistas, pero sí eran demostrado la existencia de una identidad total entre ambos criterios doctrinales. Es evidente que el zapaterismo habría tomado prestados de estas corrientes, más antiguas, las fuentes de su inspiración. De ahí y no de otro lugar en la medida en que todo lo que afirma Zapatero está implícito en el pensamiento de A.A.B. y de Muller. Pensamiento soft, pensamiento de Alicia, pensamiento débil…

¡Claro que es débil! Ese tipo de pensamiento solamente adquiere cuerpo y encuentra su razón final de ser en el entramado esotérico-ocultista que maneja el círculo interior de Lucis Trust y que difunde a través de sus grupos (Escuela Arcana, Buena Voluntad Mundial, Grupos de Meditación, Triángulos, etc.). Ese pensamiento es complejo, abstruso, confuso y difuso. No es un pensamiento para irlo proclamando. Ni siquiera Muller en sus intervenciones públicas aludió jamás a él, a pesar de lo identificado que estaba con el pensamiento de su mentora A.A.B.

La New Age sería otra forma de exoterismo no comprometido con las disquisiciones esotérico-ocultistas de la Bailey o de la Blavatsky. Sin embargo, en contenido de la mayoría de conceptos de esta tendencia tienen que ver con el pensamiento mágico. La Nuez Age es la Nueva Era de Acuario que debería iniciarse en 1945 y que durará 21.125 años, un ciclo en el que los temas que dominarán serán los propios que caracterizan a este signo astrológico: humanidad, juventud, ambigüedad, fluidez. Al menos tal como lo presentan los ideólogos de este movimiento.

Se ha dicho que Zapatero era la quintaesencia del político de la globalización, ya que no creía fronteras, no le importaba que los nacionalistas generaran fronteras interiores (total, las fronteras estaban a punto de desaparecer…). Pero es algo más que eso. Decir “globalización” es aludir a algo extremadamente ambiguo. La globalización es sobre todo económica. Y Zapatero quiere algo más. Mientras que la globalización se queda en el terreno de los intercambios comerciales y supone un liberalismo económico a escala planetaria, la mundialización es un concepto más amplio: no se trata sólo de globalizar la economía, sino la cultura, la religión, el mismo gobierno, etc. Zapatero se inscribe en esta corriente. No en otra.

En la próxima entrega intentaremos seguir las líneas de evolución y las iniciativas de esta corriente.

© Ernesto Milà – Infokrisis – Infokrisis@yahoo.es – http://infokrisis.blogia.com



[1] Todos estos episodios historicos fueron tocados en mi libro “11-S: la Gran Mentira”, firmado con el seudónimo de “León Klein”. Editorial PYRE, Barcelona 2002. El libro contiene un capítulo exclusivamente dedicado a estos precedentes.

[2] Un fiasco maçonnique à l’aurore du vingtième siècle de l’ère chrétienne, (1912). El libro puede leerse on line en la página de Wikipedia dedicada al autor : http://es.wikipedia.org/wiki/%C3%89mile_Flourens

[3] Folleto “Las NNUU entrando en la nueva era planetaria”, op. cit., pág. 1-2.

[4] op. cit., pág. 2.

[5] La Unidad Internacional – Asociación Lucis Trust – Ginebra, sin indicación de fecha de impresión. 12 páginas. Por el contenido del texto se deduce que debió ser escrito en la segunda mitad de los años 70.

[6] Op. cit., pág. 3.

[7] Op. cit., pág. 4.

[8] Estos principios serían: “particar la tolerancia y convivir en paz como buenos vecinos; unir nuestras fuerzas para el mantenimiento de la paz y la seguridad internaciones, asegurar, mediante la aceptación de principios y la adopción de métodos, que no se usará la fuerza armada sino en servicio del interés común; y emplear un mecanismo internacional para promover el progreso económico y social de todos los pueblos” (folleto Las Naciones Unidad: entrando en la edad planetaria, op. cit., pág. 10)

[9] Cf. Op. cit., pág. 26-27

[10] En el folleto “NNUU: entrando en la edad planetaria”, se incluye un artículo de Roberto Muller titulado “Mi profesión de fe en las Naciones Unidas, escrito cuando era Secretario del Consejo Económico y Social. (Op. cit., pág. 29-33). Es significativo que el artículo vaya precedido a modo de introducción por el fragmento de Alice A. Beiley, extraída de su obra Discipulado de la  Nueva Era, v. II: “Por primera vez en la historia humana, las líneas de demarcación entre lo que es justo desde el punto de vista de los valores espirituales (la libertad esencial del espíritu humano) y o que es falso (el encarcelamiento del espíritu humano por las condiciones materialistas) son claramente percibidos pro la mayoría de naciones del planeta. Las NNUU contienen el germen y la semilla de un gran grupo internacional de meditación y reflexión –un grupo compuesto de hombres y mujeres que reflexionan y son informados y en cuyas manos se encuentra el destino de la humanidad”. En cuanto al texto de Muller define en el texto de su artículo a NNUU como “el primer instrumento universal que la humanidad ha tenido”, “el lugar donde se están desarrollando los nuevos valores éticos para las naciones y la raza humana”, “el templo de la información mundial”, “un mecanismo internacinal listo para ser utilizado en el preciso momento en que la humanidad está llegando a ser una unidad compleja e interdependiente desde todos los puntos de vista. Tal será su mayor oportunidad histórica de éxito y utilidad para la raza humana” (op. cit., pág 30-31),. Luego afirma que los “pueblos deberían (…) ayudar a la cración de grupos de voluntarios o asociaciones para la ONU a fin de obtener una mejor información sobre los esfuerzos hechos por las NNUU” (op. cit., pág. 32). El artículo termina afirmando que en los últimos 100 años, el episodio histórico más importante ha sido la firma de la Carta de las Naciones Unidas en San Francisco el 24 de octubre de 1945. (op. cit., pág. 33). Muller, por lo demás, se interesó por la filosofía de Teilhard de Chardin, considerado como uno de los ideólogos de la Nueva Era.

[11] Cf. http://en.wikipedia.org/wiki/Robert_Muller

[12] Muller escribió sobre Teilhard: “Teilhard [de Chardin] siempre vio a las Naciones Unidas como la progresiva encarnación institucional de su filosofía” y así era, efectivamente. Teilhard había escrito en su obra The Future of Man [El Futuro del Hombre]: "Aunque la forma aún no sea discernible, la humanidad despertará mañana a un mundo ’pan-organizado’".

[13] http://www.experiencefestival.com/a/Planetary_Citizens/id/191320

[14] Cr. http://antipachamamistasenaccion.blogspot.com/2007/10/la-poltica-del-esoterismo-las-naciones.html

 

La doctrina excéntrica (IV de VI). El pensamiento mágico en NNUU (Parte B)

Infokrisis.- Hace unos años ya reprodujimos en infokrisis un artículo que habíamos publicado previamente en la revista Año Cero. Ahora, dada la temática de la serie sobre el pensamiento excéntrico volvemos a recuperar aquel artículo ampliado con una información bastante más completa. en los próximos días iremos añadiendo los gráficos y las fotos que  son imprescindibles para un artículo de este tipo. 

Si leemos las obras de Alice Ann Bailey percibiremos inmediatamente el aroma inequívoco de la locura teosófica. Todos sus libros están al alcance de quien esté dispuesto a leerlos en Internet. Es difícil que alguien con un nivel cultural medio sea capaz de digerir una obra que, de por sí, no se diferencia mucho de los fárragos redactados por la Blavatsky. Así pues, pensar que ese pensamiento es capaz de ejercer una influencia en instancias internacionales parece ilusorio. Sin embargo, realizar esa afirmación tajante sería ignorar que el ocultismo muy frecuentemente se ha filtrado en esferas influyentes. Rasputín fue consejero del Zar de todas las Rusias que también escuchó el consejo de Papus y al “Maître” Philipe de Lyon. Se sabe, igualmente, que muchos gobiernos han requerido el consejo de astrólogos y son muchos videntes de la “alta sociedad” los que explotan la credulidad de las masas. Así mismo, en los EEUU hasta 2008 ha gobernado un presidente que cree hablar con Dios y que éste participa en las decisiones de su vida cotidiana. Durante la administración Reagan, también en EEUU, el presidente y su consejero de defensa, Casper Weinberger estaban convencidos de que el Apocalipsis se aproximaba y trataban de identificar el lugar en el que iba a librarse la batalla de Armagedon. En la otra parte, en la URSS, las cosas no iban mucho mejor. En infokrisis ya hemos dado cuenta de la secta cosmista que estuvo presente en el nacimiento de la URSS y cuyos exponentes figuraron entre los primeros revolucionarios de octubre de 1917. Esta secta tuvo también que ver en los primeros tiempos de la industria aeroespacial rusa… de la misma forma que quienes impulsaron su homólogo norteamericano se preocuparon muy mucho de que fuera un astronauta miembro de la masonería quien pisara primero el satélite. Finalmente, pocos años antes del desplome definitivo de la URSS, Leónidas Breznev, presidente del Soviet Supremo, tenía una vidente de cámara a la que consultaba las grandes decisiones… François Mitterand, quien quiso crear una prolongación de la geografía mágica de París, multiplicando en lugares “elegidos”, monumentos alegóricos (el Arco de la Dephense, la nueva Bibliotheque National, etc.) y, en el punto álgido de su gobierno se acercó a la pequeña aldea de Rennes-le-Château, escenario de las actividades del atrabiliario párroco Berenguer Sauniere a principios de siglo. En aquel tiempo, por cierto, la aldea era visitada por Luis Salvador de Habsburgo-Lorena, heredero de una de las casas reales mas influyentes de Europa. Sin olvidar a grandes figuras de la canción o del star-system que se han visto captadas por las sectas más abrakadabrantes y que han comprometido su nombre en los más insensatos proyectos.

Los ejemplos podrían multiplicarse. El hecho de que alguien ocupe un rango político y social elevado, no es garantía suficiente para negar que se trate de una personalidad supersticiosa, dada al pensamiento mágico y atraído por el mundo de lo irracional. Una secta, por insensata que sea, puede proyectar una gran influencia si su método de trabajo es sistemático y hábil. Por eso no puede extrañar que discípulos de Alice Ann Bailey hayan podido inspirar determinadas decisiones que afectan a Naciones Unidas. ¿Imposible?

1. La Sala de la Meditación como testimonio

El 1976 leí un libro que más adelante perdería titulado “¿Qué es la masonería?”. Estaba escrito por Ferrer Benimelli y era un introducción bastante sencilla –como sencilla era la colección en la que se inscribía- a esta organización a la que la muerte de Franco abría de nuevo las puertas para su legalización. El libro no me llamó la atención sino por una frase que recuerdo textualmente: “La masonería considera que la fundación de las Naciones Unidas da inicio a la era de la luz”… A pesar de que Benimelli en 1976 ya conocía suficientemente lo esencial de la masonería –aun cuando todavía no era miembro de ella- la frase me sorprendió por imposibilidad con cotejarla con cualquier otro texto masónico. Efectivamente, era cierto que la masonería –y no solamente la masonería- había acogido la fundación de las NNUU con entusiasmo y esperanza. Pero no había en ella nada especial. Es cierto también que Dah Hammarsjol había sido miembro de la masonería y lo mismo se decía de U’thank su sucesor y de Trygve Lye su predecesor… pero ni siquiera los textos sobre la masonería regular consideraban a NNUU como algo muy especial ni, por lo demás, tampoco los masones con los que hemos hablado desde entonces han confirmado la frase de Benimelli. Ahora bien…

Por tanto, cuando Ferrer Benimelli nos decía en 1976 que “La creación de NNUU supone para la masonería el advenimiento de la era de la luz” no mentía… simplemente se estaba refiriendo a que un sector de la masonería: los co-masones ingleses.

Ahora es preciso explicar que este reconocimiento de la co-masonería a NNUU no es teórico y unidireccional, sino que ha podido expresarse con claridad y nitidez dentro misma de NNUU hasta el punto de que, en determinados niveles de decisión, se asume como propio.

La prueba de la importancia de la sala de la meditación es que, cualquier invitado relevante que visita la sede de NNUU es llevado allí. El último, el Papá Benedicto XVI, después de hablar ante la asamblea general de NNUU “fue pasado” por la Sala de la Meditación durante su visita el 18 de abril de 2008[1]. El discurso del papa fue protocolario, muy en la línea de un patriarca católico. Se limito a apelar al deber de la institución a intervenir ante las crisis humanitarias y proteger a la población. Luego visitó el despacho particular de Ban Ki-moon y saludó a algunas personalidades de la institución y cantó con un coro de niños en alemán: “¿Puedes contar las estrellas?”. La nota de EFE añadía: “También se detuvo unos momentos para rezar en la sala de meditación de la institución y después abandonó el edificio, entre gritos de los funcionarios, algunos en español, de "Viva el Papa"”. Ni en esta ni ninguna otra información especificaba qué diablos era la “sala de la meditación”. Sin embargo, no era la primera vez que un Papa católica visitaba esa institución.

El 4 de octubre de 1965 en el primer desplazamiento de un Papa a Nueva York, Paulo VI , fue conducido a esta sala que apenas tenía en aquel momento quince años. En aquella ocasión, al menos en EEUU, los fundamentalistas cristianos atacaron al Papa resaltando que en su alocución ante la Asamblea General había evitado toda alusión al catolicismo y se refirió solamente a vagas cuestiones sociales y humanitarias. Por otra parte, esos mismos medios fundamentalistas, en pleno debate sobre el Vaticano II, denunciaron que el Papa “se había rendido ante los Illuminati”. Para colmo denunciaron que en el interior de la sala de la meditación había realizado "un ritual ocultista de iniciación" cuya validez quedó rubricada por la posterior construcción en Washington del llamado Templo del Entendimiento, provisto también de un triángulo con el ojo correspondiente, y en el que se representa a las seis creencias más extendidas del mundo: hinduísmo, budismo, confusianismo, judaísmo, cristianismo e islamismo”[2].

Catorce años después de esta visita, Juan Pablo II volvía a la misma tribuna y realizaba el mismo discurso el 2 de octubre de1979 a poco de ser consagrado Papa de la cristiandad, cuando era Secretario General de NNUU Kurt Waldenheim y repitió el 5 de octubre de 1995, cuando su salud empezaba a estar ya mermada. En ambos casos visitó la Sala de la Meditación. En todas estas visitas, resulta curioso comprobar como el Vaticano, no menciona nunca el paso del Papa por la sala y si lo hace es de soslayo y sin explícar en qué consiste ni cuál es su historia. Y se comprende a la vista de los ataques que recibió Paulo VI cuando, por primera vez visitó el lugar. ¿Por qué este encono?

Todo lo que rodea a la sala de la meditación de NNUU es puro pensamiento mágico que parece tener muy poco que ver con la racionalidad inherente al siglo XX.

En 1977 conocí a un ciudadano guatemalteco que dirigía una revista de información política independiente; se llamaba José René Barón Ferrufino; en el curso de la guerra civil que asoló a aquel desgraciado país centroamericano, perdí el contacto y supe luego que él y su publicación habían desaparecido. Me aseguraron que murió en el curso de una vendetta política. Barón le dedicó a mi mujer un libro que recogía curiosas informaciones sobre distintos aspectos de la historia contemporánea. Entre otras cosas se hablaba de un curioso "Salón de la Meditación", un espacio situado en el edificio de las Naciones Unidas de Manhatan que sería el centro de una "nueva religión mundial". A una organización con vocación mundialista correspondía una espiritualidad, igualmente, mundialista. Nunca había oído nada parecido y, mi reacción fue de escepticismo. Leí algunas obras sobre la fundación del organismo internacional y especialmente de su primera época y no había absolutamente ninguna referencia a aquella misteriosa "sala". Pero lo cierto es que Barón Ferrufino añadía un par de fotos que demostraban a las claras que el lugar existía y aportaba datos muy concretos. No fue sino hasta 1991 cuando confeccionando la base de datos de nuestra biblioteca familiar, volví a encontrarme el libro en cuestión y decidí informarme sobre el tema.

Yo, por entonces, si bien había oído hablar de A.A.B., no sabía gran cosa de las organizaciones por ella creadas. Y sin embargo el libro de Barón Ferrufino mencionaba una serie de instituciones, entre ellas la editorial "Lucis Trust". Me procuré la dirección en Ginebra y escribí. Así mismo envié un fax a la Secretaría General de las NN.UU. para que me enviaran documentación sobre el tema. Campoy, el director de "Más Allá" quería publicar un artículo sobre el asunto y necesitaba material gráfico. Solo al cabo de diez meses recibí de la Delegación de las NN.UU. en Madrid un pobre folleto ciclostilado que contenía una mínima parte de la información que recogía Barón Ferrufino[3]. Las ONGs colaboradoras de las NN.UU. y de sus agencias no sabían nada sobre la "sala" en cuestión; ni tampoco había rastro del lugar en las bibliotecas que consulté.

Pero en 1995, desde el 120 de Wall Street, me llegó un sobre de "World Goodwill" (Buena Voluntad mundial) con un par de diapositivas que demostraban la realidad de aquella misteriosa "sala". A partir de ahí empecé a ordenar mi documentación y me llevé un buen número de sorpresas.

2. La desconocida historia de la Sala de la Meditación

La "Sala de la Meditación", en efecto, está abierta al público desde 1952, oficialmente “para que gentes de distintos pueblos y razas, procedentes de horizontes culturales y geográficos, en ocasiones antípodas, puedan hacer votos por la paz y la fraternidad humana”, es decir, unas nobles intenciones en cuya plasmación las Naciones Unidas han cosechado ya múltiples y dolorosos fracasos.
Para mantener vivos y perpetuamente estos principios se construyó el "Salón de la Meditación" en el edificio central de las NN.UU. en Nueva York. Se trata de una planta trapezoidal de 9 metros de largo y cuyas paredes paralelas desiguales miden 3 y 6 metros respectivamente. El eje está orientado hacia el noreste y en su centro se encuentra una mesa metálica de 1 x 2 metros, construida en magnetita (piedra imán). Dicho bloque, debe pesar varias toneladas y está sostenido por una columna cuadrangular de cemento armado que se hunde más allá de los sótanos y los cimientos del edificio, hasta llegar a la capa de roca sobre la que se asienta éste. En la pared más pequeña -la de 3 metros- se exhibe un fresco del pintor sueco Bo Beskow[4], de estilo abstracto; sus dimensiones son 2,60 m. de alto por 1,80 de anchura. Tales son las proporciones de este verdadero primer templo de la Nueva Era. Y a unos pasos de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Altar de Magnetita

La visita a este "Salón" es libre; dos policías custodian la puerta acristalada que da acceso a un corredor oscuro que conduce hacia la izquierda. Este pasillo supone un fuerte contraste con la iluminación a base de fluorescentes que le ha precedido. En efecto, el corredor se encuentra prácticamente en penumbra. A su término, tras seis metros de recorrido casi tenebroso, a la derecha, el visitante encontrará la puerta de esta extraña sala. Verá el altar magnético iluminado de forma particular: desde el techo una lámpara desprende un haz de luz sobre el altar, el cual, por efecto lumínico, emite reflejos azulados de refracción. Completamente insonorizada, está "cámara de aislamiento sensorial", contrasta con el bullicio exterior; según quienes la han visitado, el silencio de la estancia consigue aturdir. El suelo está recubierto de moqueta azul y el fresco se encuentra iluminado de tal forma que se consigue ver la superficie pero no el marco que lo contiene. Tras el altar y entre él y la pared de 6 metros se encuentran algunos bancos para que el público pueda cumplimentar la función para la que ha sido creado el salón: la meditación.

Tal es la morfología de la Sala. Queda ahora examinar su esoterismo y éste es todavía más sorprendente.

3. El simbolismo del lugar

Lo primero que se advierte es que las proporciones de la misma están en relación 1 - 2 - 3: un lado superior de 6 metros, una base de 3 y una altura de 9 metros. Estas medidas, proporcionadas, así como la presencia de un altar en el centro, nos indican que nos encontramos en un lugar "mágico". Si proseguimos nuestro análisis geométrico de la sala advertiremos que dispone de cualidades sorprendentes.

Me dí cuenta hace más de quince años, mientras jugaba con una regla y un compás. Dibujé la planta del salón respetando escrupulosamente las proporciones. Primeramente advertí que si trazamos un línea recta desde cada ángulo de la sala hasta su opuesto advertiremos que el altar de magnetita se encuentra situado en el centro geométrico.

Trazando a partir de ese centro una circunferencia tal que su perímetro toque los cuatro vértices del trapecio, la base del mismo será, a su vez, la base que nos servirá para trazar una estrella de cinco puntas.

el misterio del trazado geométrico

Explicación al trazado geométrico del Salón de la Meditación
La proporción 3-6-9 nos da un trapecio que tiene la propiedad de que su base permitirá trazar una estrella de cinco puntos inscrita en la
circunferencia que pase por cada uno de sus vértices. En el centro de las diagonales del trapecio se encuentra el altar de magnetita

Esta estrella en la simbología masónica y, en general, en todos los esoterismos, es el símbolo del hombre cósmico, a la Humanidad que la Bailey consideraba protagonista de la Nueva Era de Acuario.

Prolongando sobre el plano la longitud de las dos paredes convergentes, más allá del fresco, irán a converger en un punto situado a 18 metros de la pared base del trapecio. No podía ser de otra manera, si tenemos en cuenta que los lados paralelos tienen unas dimensiones de 3 y 6 metros, es decir, en proporción 1 a 2, y que la distancia que lo separa son 9 metros (9 x 2 = 18 m.). Si en este punto de convergencia de las prolongaciones de ambos lados apoyamos el compás y lo abrimos con cualquier ángulo, trazaremos un círculo que tendrá una propiedad sorprendente: el ángulo formado por esas prolongaciones de los dos lados, marcará sobre el círculo un ángulo tal que estará en condiciones de dividir la circunferencia en 19 partes iguales. Hay que señalar que desde el punto de vista matemático esta división es imposible ya que la división no nos da un número exacto, sino un período constante. Ahora bien, el problema de dividir un círculo en 19 ángulos iguales si tiene una resolución geométrica: la que acabamos de apuntar.

Los números clave de este enigma son el 5 (número del pentáculo inscrito en el círculo trazado tomando como base el altar y los cuatro ángulos de la sala) y el 10 (1 + 9, derivado de las 19 partes en las que se puede dividir el círculo trazado tomando como centro el punto de confluencia de los dos lados convergentes).

Geometría del Salón de la Meditación

Geometría del salón de la meditación: cómo se pasa del microcosmos del Salón al
macrocosmos de la dinividad (19 = 1+9 = 10) simbolizada en lo que está "más allá" del fresco de Bo Beskow.
La proporción 3-6-9 permite dividir el círculo en 19 partes, operación matemáticamente imposible

Existe entre estos dos números, el 5 y el 10, la misma relación existente entre el macrocosmos y el microcosmos. Si el 5 es el número del Hombre, el 10 es el número del Todo, de la Unidad infinita y del origen de todas las cosas. La kábbala judía atribuye al número 10 la letra Yod, inicial de Israel, de Yavhé y del gran patriarca Jacob. El color que la kábbala le relaciona es el color azul celeste, que es el mismo que encontramos en la bandera de las Naciones Unidas y en la moqueta que cubre el suelo del "Salón de la Meditación". El significado simbólico del conjunto está, en este punto, completamente elucidado: el Salón de la Meditación es un espacio "humano" (marcado con el número 5) a través del cual se puede acceder al espacio trascendente (señalado por el 10).

Esta explicación está acorde con la que el autor del fresco, el pintor Bo Beskow, dió del mismo y que recojía Barón Ferrufino en su libro: "Todo lo que he intentado hacer al pintar el cuadro fue abrir la pared, dejar que el ojo viaje más lejos, abrir la menta, provocando una meditación". El folleto publicitario del "Salón" que me enviaron desde la Delegación de las NN.UU. en Madrid, corroboraba este orden de ideas: "cuando sus ojos viajen desde estos símbolos a la pared frontal [la del fresco] encuentran un camino sencillo abriendo el salón a la armonía, solidez, libertad y equilibrio del espacio". Mas allá del cuadro, sobre el plano, la convergencia de las paredes resuelve la imposibilidad matemática de dividir 360º en 19 partes iguales.

El altar situado en el centro del Salón fue donado por el gobierno sueco y es el mayor bloque de este mineral encontrado hasta la fecha. Fue desbastado y se le dio forma de ara. Llama particularmente la atención la innecesaria prolongación de la columna que lo sostiene hasta más allá de los fundamentos del edificio.

En el folleto que entregan a la entrada del Salón, escrito bajo la supervisión del propio Dag Hammarskjold[5] (segundo secretario general de las Naciones Unidas) no encontramos una explicación válida para tanto esfuerzo: "[el altar] nos recuerda también lo que es firme y permanente en un mundo de movimiento y cambio. El bloque de mineral de hierro tiene un peso y una solidez de lo que dura siempre. Es un recuerdo de la piedra angular de perseverancia y fe sobre la cual todo esfuerzo humano debe basarse". Pero ninguna palabra se dice en relación a la costosa columna que sostiene el altar, ninguna explicación de por qué se optó por hacerla así y no limitada en profundidad por el suelo del Salón. Tampoco existe dato conocido que contribuya a explicar este misterio.

Si hemos de interpretar los hechos objetivos, está claro que nos encontramos ante un intento de aprovechar las corrientes telúricas que fluyen bajo nuestros pies, a través de la columna que sostiene el altar y de la que éste sería un condensador. Tal condensador de energía telúrica (en zonas campesinas en Francia y en otras tradiciones se habla de la "Wouivre", serpiente que corre bajo la tierra; tradiciones corroboradas por la ciencia moderna con el nombre de "líneas geodésicas", aquellas que marcan zonas en donde el magnetismo terrestre es más acusado) sería un elemento que ayudaría a la concentración y meditación del visitante.

4. El fresco del pintor sueco

Queda por examinar el misterioso fresco de Bo Beskow. Que no se trata de un cuadro abstracto realizado al azar está claro tras una ojeada somera. Está compuesto por 72 figuras geométricas, de las que 22 son triángulos; en la parte superior izquierda, esquematizada, está una media luna, cuya circunferencia interior es equidistante del centro de la otra circunferencia, completa esta, pero partida en dos colores, que se encuentra en la mitad superior derecha.

Sala de la Meditación

Cortando el cuadro de arriba a bajo, una diagonal inclinada se ve recorrida por una línea curva que, yendo y viniendo, la atraviesa en nueve ocasiones. Los colores dominantes son grises y los tonos azules claros, pero también hay franjas blancas y amarillas. Destaca sobre todo, la media esfera negra. En el comentario publicado al ser inaugurada la sala en la Revista de las Naciones Unidas, se podía leer: "Como un punto de descanso para quien mira, el autor pintó una mancha negra en medio de los colores pálidos, un medio círculo en el cual todas las líneas del fresco convergen".

Bo Beskow

¿Cuál es el significado -si lo tiene- de todo esto? El cuadro fue encargado directamente por Dag Hammarsjold y exhibido por vez primera en noviembre de 1957; "no tiene título, vd. puede interpretarlo como quiera". Pero tras la aparente anarquía de colores y formas, se percibe un ritmo y una síntesis simbólica no desdeñable.

Las 72 figuras geométricas que lo componen tienen un significado preciso. En la tradición egipcia, 72 es el número de “compañeros de Seth” que le ayudan en su venganza contra la pareja Isis-Osiris. Aquí vuelve a aparecer. Las 72 figuras geométricas son el resultado de dividir los 360º de la circunferencia, por 5. Esta cifra es, según la Kabbala, la que indica los 72 nombres de Dios, derivados de permutar las cuatro letras del Tetragramaton (JHVH = Jehová) todas las veces posibles. El número de triángulos es igualmente significativos: 22 son, ciertamente los Arcanos Mayores del Tarot y el Loco (el comodín de las barajas modernas). "Triángulos", dicho sea de paso, es el nombre de una de las tres organizaciones inspiradas en los escritos de A.A.B.

El origen del número 72 se remonta a la parte más problemática de la tradición egipcia. Steh, dios de la cabeza de asno, estaba rodeado de 72 compañeros que le secundaron en el asesinato de Osiris y en la persecución de Isis. Seth y sus compañeros constituían en la leyenda un "colegio iniciático" opuesto a Osiris-Isis. Si Osiris encarna el orden y la naturaleza uránica y solar, estable o, por decirlo en términos clásicos, apolínea y olímpica, Seth, el Tifón griego, era el símbolo del caos. Es significativa esta inclusión de 72 figuras poligonales. Y es así mismo significativo que, como estamos viendo, sea posible vincularlo a una obra de inspiración masónica y ocultista. En cuanto a la diagonal, por ejemplo, situada transversalmente en el cuadro de arriba a abajo, es, a su vez, atravesada por una curva serpentina que en nueve ocasiones. El 9 corresponde a la letra hebrea Teth que simboliza a la Serpiente de la Sabiduría; las nueve interferencias de la curva sobre la recta determinan en ésta diez secciones, equivalentes a las diez sephiras de la kábala hebrea.

El cuadro es una representación abstracta del "hombre primordial" representado en el Cosmos, el Adam Kadmon de la Khábala y cuya columna vertebral es la línea diagonal es atravesada por la Serpiente de la Sabiduría. Este hombre primordial debe atravesar todas las situaciones posibles de la vida (los 22 arcanos del Tarot), para poder vivir realizarse plenamente: tal es lo que se pretende lograr con la "Sala de la Meditación".

La creación de la Sala de la Meditación no constituyó un hecho aislado. Los diez años que siguieron al final de la II Guerra Mundial fueron de gran efervescencia místico-ocultista. El Consejo Mundial de las Iglesias ejerció presión sobre la ONU para instalar la Sala en cuestión, hasta que el 18 de abril de 1949, Trygve Lie, primer secretario general de la ONU, anunció que se instalaría en el edificio central de la organización, entonces todavía en construcción. Este Consejo fundado en 1948, agrupa hoy a 332 iglesias de un centenar de países. En 1992 surgieron fricciones en el interior. En efecto, durante la Asamblea de la organización celebrada en Camberra, los delegados atravesaron una doble hilera de hojas ardiendo, que despedían una densa humareda; se trataba de un rito de "purificación". Algunos delegados protestaron por lo que consideraban una práctica "pagana y animista". Y de hecho suponía, en la práctica, un retorno al pensamiento mágico.

El Movimiento de los Laicos Cristianos había realizado la misma propuesta en 1946. Su secretario Weyman C. Huckaber, pastor metodista, recibió donativos durante 5 años del Fondo Davison, gerenciado por John Rockefeller, para estimular un proyecto paralelo. En efecto, el Movimiento de los Laicos Cristianos, instaló en el segundo piso de su propio local otro "Salón de la Medítación". Este grupo dispone de una biblioteca excepcionalmente bien dotada en temática religiosa y ocultista. El fondo originario de dicha biblioteca fue legada por Thomas Sugre y en su lomo presenta una curiosa e inequívoca señal: una T y una S (dibujada con forma de serpiente) superpuestas con una flor de loto encima. Es evidente que dicho símbolo es una esquematización del Ankh egipcio o "lleva de la vida", un símbolo muy apreciado por la teosofía y algunas corrientes masónicas.

En la Sala de la Meditación de las O.N.U., se colocó, poco después de su apertura, en 1955, un fragmento de un árbol del África francesa, contaba con 300 años de antigüedad y pesaba cerca de 400 kg. La idea partió de Wallace Harrison, director del equipo de arquitectos que planearon el edificio de la ONU y co-arquitecto y director del Rockefeller Center. Al colocarse luego el altar de magnetita, el árbol (verosímilmente una rememoración del "árbol de la vida"), el fragmento del árbol fue trasladado precisamente a la Sala de la Meditación del Movimiento de Laicos Cristianos.

Dag Hammarskjold

Dag Hammarskjold ante el edicificio de NNUU cuando se estaba construyendo

A partir de 1953 se organizaron los "Amigos del Salón de la Meditación", organización que pronto contó con 1500 miembros que obsequiaron libros en blanco para que los visitantes dejaran su firma, datos personales y confesión religiosa. Warren R. Austin, ex-delegado permanente de los EE.UU. en la ONU, encabezaba este grupo de amigos y, por lo demás, pertenecía al Movimiento de Laicos Cristianos. En los años 50, esto revestía un auténtico culto religioso autónomo y sincrético. A mediados de la década se habían repartido 300 tarjetas de identificación a personas que iban regularmente a orar a la Sala de la Meditación. En los años 1953 y 54 se celebraron "Jornadas de Oración". También aquí la familia Rockefeller donó a esta asociación de "Amigos del Salón" cuantiosas sumas, siendo el otro benefactor, el propio secretario general Dag Hammarsjold.

Otra rama disidente de la teosofía norteamericana, pero similar en todo a la matriz común, la "Escuela Arcana" apoyó entusiásticamente todas estas iniciativas a través del "Boletín Buena Voluntad Mundial". En el número especial de julio de 1957, se aludía ampliamente a la sala de la Meditación con particular referencia al altar de magnetita.: "uno siente como si estuviera en presencia de algún talismán de natural noble y significativa importancia", habían escrito los discípulos de Alice Ann Bailey. De esta "influencia" debía partir el "nuevo punto de arranque en el pensamiento religioso".

(c) Ernesto Mila - infokrisis - infokrisis@yahoo.es - http://infokrisis.blogia.com

[1] EFE. 18-04-2008 21:00 CET

[2] La mentalidad conspiranoica del fundamentalismo cristiano puede advertirse perfectamente en soldadoluz.multiply.com/journal/item/93?&item_id=93&view:replies=reverse, cuando comenta la visita de Paulo VI a NNUU.

[3] El texto del folleto en cuestión se puede leer actualmente en la web de NNUU, en la página de “Dependencia dedicada a información al pública” (http://www.un.org/spanish/geninfo/faq/index.html) Se titula ¿Qué es la Sala de Meditación?, y su contenido es el siguiente:

“La Sala de Meditación, ubicada en el ala oeste del vestíbulo del público del edificio de la Asamblea General de las Naciones Unidas, es un espacio de recogimiento dedicado a la paz mundial y a disposición de las gentes de todos los credos y religiones. Cientos de personas, que han dejado constancia de su apoyo a la paz mundial en un libro de visitas, han pasado por esta sala, abierta en octubre de 1952 y remodelada y ampliada durante el invierno de 1956.

Concibió la idea de esta Sala Dag Hammarskjöld, Secretario General de las Naciones Unidas, que creía que, en vista de su entrega a la labor y el debate en pro de la paz, las Naciones Unidas “debían contar con una sala dedicada al silencio, en sentido externo, y a la calma, en sentido interno”. El Sr. Hammarskjöld planificó y supervisó personalmente la creación de la Sala de Meditación.

La sala tiene forma de V, es de un blanco desvaído y en su parte más estrecha hay un panel saliente que está cubierto por un fresco del artista sueco Bo Beskow. Este fresco, que mide 2,74 x 2 metros, consta de formas geográficas azules, blancas, grises y amarillas cuyos colores claros y puros se entrecruzan formando sombras más oscuras. En el centro de la sala se encuentra una gran losa de mineral de oro sin trabajar y en estado de máxima pureza que tiene millones de años. La losa se eligió como símbolo de intemporalidad y fortaleza. Esta roca de forma rectangular, regalo de Suecia, tiene cerca de 1,2 metros de alto y pesa seis toneladas. Un rayo de luz baña la roca en una sala de extrema sencillez en la que no hay más símbolos.

El Sr. Hammarskjöld, también él oriundo de Suecia, comentó sobre la roca de mineral de oro: “Su material nos hace pensar en la necesidad de elegir entre la destrucción y la construcción, entre la guerra y la paz. Con hierro ha forjado espadas el hombre, con hierro ha hecho rejas de arado. Con hierro ha construido tanques, pero también con hierro ha levantado viviendas. El bloque de mineral de hierro forma parte de la riqueza que hemos heredado en esta tierra nuestra. ¿Qué uso le vamos a dar?”

El Secretario General sabía exactamente cuál sería el uso que tendría esta sala de recogimiento en el futuro: “Un antiguo dicho afirma que el sentido de una vasija no está en el recipiente, sino en el vacío. Lo mismo ocurre con esta sala. Es para quienes acuden a ella para llenar el vacío con lo que encuentran en su centro de calma”. El Sr. Hammarskjöld falleció en Zambia en accidente de aviación el 18 de septiembre de 1961 mientras viajaba por África en misión de paz.

Esta hoja de datos ha sido publicada por la Dependencia de Información al Público, Departamento de Información Pública, Naciones Unidas

Tel.: 212-963-4475;  Fax: 212-963-0071 Correo electrónico: inquiries@un.org

[4] El 4 de abril de 1989, el diario El País publicaba una escueta nota sin apenas comentarios: “Bo Beskow, pintor y escritor sueco, falleció el pasado fin de semana, a la edad de 83 años. Considerado como un renovador de las concepciones del arte del vitral, dejó como testimonio de este aspecto de su personalidad artística 37 vitrales en la catedral de Skara, al suroeste del país, una de las más antiguas de Suecia. Éste fue considerado el trabajo cumbre del pintor desaparecido. Beskow realizó también dos trabajos de pintura abstracta en el edificio general de las Naciones Unidas en Nueva York. Colaboró con el director Alf Sjoberg en la puesta en escena de obras famosas del teatro universal. Sus estudios de arte los realizó durante los años veinte en Roma, París y Portugal. De su estancia en este país resultó su primer libro, llamado precisamente Fuga hacia Portugal. Escribió también una autobiografía”.

Había nacido el 13 de febrero de 1906 en Djursholm, Estocolmo. Estudió en la Facultad de Bellas Artes y luego en Roma y Portugal. Decoró varias iglesias suecas restauradas Amigo del Secretario General de NNUU, sueco como él, le encargó el célebre fresco de la Sala de la Meditacion. Él y Beskow eran miembros de la Iglesia Estatal Luterana de Suecia y estaban influidos por las ideas ecuménicas del obispo Nathan Söderblom, un amigo de la familia, defensor de una forma de ecumenismo que basado en la meditación y en función de ella en la creación de una religión mundial.

[5] En la Web de NNUU dedicada a Dag Hammarskjold se encuentra este significativo texto que va seguido de unas líneas escritas por el propio secretario general de la organización cuando se reabrió la Sala en 1957. Lo traducimos del inglés:

"Una Sala de Silencio". La sala de meditación, Sede de las Naciones Unidas.- En el proyecto original para la nueva sede de NNUU, una pequeña habitación era el lugar dedicado a guardar silencio, donde la gente podía retirarse en sí mismos, independientemente de su fe, credo o religión, Dag Hammarskjöld, quería algo que fuera digno. En sus gestiones fue apoyado por un grupo, integrado por cristianos, Judios y musulmanes, los "Amigos de la ONU Sala de Meditación", que combinaron sus esfuerzos y siempre que el dinero para una habitación digna de una organización mundial. El trabajo en la sala comenzó, y el Sr Hammarskjöld personalmente planificó y supervisó en cada detalle la creación de la "Sala de Meditación". Un ejemplo de su interés se refleja en este intercambio de correspondencia en sueco en relación con el diseño de la tela que se utilizará para la moqueta. La periodista Pauline Frederick escribió sobre esto. "Él fue el instrumento para la creación de lo que se llamó la Sala de Meditación. Dijo: - Esta casa debe tener una sala dedicada a guardar silencio ... Recuerdo muy claramente una noche, cuando me enteré de que había estado trabajando la mayor parte de la noche, y cerca de dos de la mañana, llamó a algunos de sus ayudantes. Se suponía que había habido  malas noticias de uno de los frentes donde se encontraban las fuerzas de emergencia de NNUU, pero él dijo: "Quiero ir a la Sala de Meditación." Allí fueron a las dos de la mañana, y allí dedicó mucho tiempo a dirigir la actividad de los pintores para que la Sala de Meditación se acabara como él quería. Consideró que debería ser el centro de las Naciones Unidas y dijo, "Deseo traer de regreso a esta sala, la quietud que hemos perdido en nuestras calles, y en nuestras salas de conferencias, en un entorno en el que ningún ruido que afectan a nuestra imaginación. "

Se prohibió sillas que se reemplazaron con los bancos; en el centro de la habitación le colocaron una de seis y medio de toneladas rectangular bloque de mineral de hierro, pulido en la parte superior e iluminado desde arriba por un solo centro de atención. Este bloque, que fue un regalo del Rey de Suecia y una compañía minera sueco, fue el único símbolo en la habitación del Sr. Hammarskjöld lo describió como "... una reunión de la luz, del cielo y la tierra .. Es el altar al Dios de todos... queremos que este enorme altar para dar la impresión de algo más de temporal…".

Además, como resumen mural se colocó una composición de motivos geométricos entrelazados que se supone que evocan un sentimiento de la unidad esencial de Dios, fue ordenado por Dag Hammarskjöld de su amigo artista Bo Beskow.

La habitación se volvió a abrir sus puertas en 1957. Dag Hammarskjöld escribió el siguiente texto que se distribuirá a los visitantes de la habitación:

"En este edificio, dedicado al trabajo y debate en el servicio de la paz, debería haber una sala dedicada a guardar un silencio que sugiriera quietud interior. Tal ha sido el objetivo al crear en esta pequeña habitación  un lugar donde las puertas pueden estar abiertas a las formas infinitas de pensamiento y la oración.

Gente de muchas religiones se reunirán aquí, y por esa razón ninguno de los símbolos a la que estamos acostumbrados en nuestra meditación puede ser utilizado. Sin embargo, hay cosas simples que nos hablan el mismo idioma a todos. Hemos tratado de reunir ese tipo de cosas y creemos que lo hemos encontrado en el eje de la luz brillante llamativa la superficie de roca sólida.

Así que, en el centro de la sala vemos un símbolo de cómo, día a día, la luz de los cielos da vida a la tierra en que nos encontramos, símbolo para muchos de nosotros de cómo la luz del espíritu da vida.

Pero la piedra en el centro de la sala tiene más que decirnos. Podemos verlo como un altar, vacío, porque no hay ningún Dios, porque no se trata de un altar a un dios desconocido, sino porque es dedicado al hombre que adora a Dios bajo muchos nombres y en muchas formas.

La piedra en el centro de la sala nos recuerda también la firmeza y permanencia en un mundo de movimiento y cambio. El bloque de mineral de hierro tiene el peso y la solidez de lo eterno. Es un recordatorio de la piedra angular de la resistencia y de la fe en que todo esfuerzo humano debe estar basado".

 

 

La doctrina excéntrica (IV de VI). Las técnicas de Buena Voluntad (Parte A)

Infokrisis.-Los dos vídeos con los que iniciamos este capítulo son elocuentes: el primero es sobre "La Gran Invocación", una especie de "Padre Nuestro de la Nueva Era", redactado por Alice Ann Bailey. Esta "oración" se repite en todos los grupos de la New Age. El segundo vídeo es una muestra de la actividad de los grupos de meditación de Buena Voluntad Mundial (concretamente del grupo valenciano). La lectura del texto ayudará a entender el por qué añadimos estos dos vídeos a modo de ilustración de que las doctrinas de las que hablamos no están muertos, sino que siguen vivas y activas.

Las sectas que tienen algún éxito son aquellos que logran dominar alguna técnica capaz de fascinar el ser humano por no ser habitual o por haberse perdido la memoria de su manejo. Son técnicas muy simples pero que generan efectos inesperados. Hay que leer Las puertas de la percepción de Aldous Huxley para situarse en el atrio de estas técnicas. En ocasiones se trata de la utilización de ciertas drogas psicodélicas, en otras de técnicas de respiración, las hay que remiten a “estados límites” (hambre, cansancio, agotamiento nervioso) y, finalmente, otras se basan en la alteración de las condiciones normales de respiración. Todas las sectas las conocen y las utilizan. De ahí aseguran la fidelidad de sus miembros que creen tener experiencias espirituales cuando se trata solamente de meros trucos de prestidigitación.

1. Los truco de la seudo-espiritualidad

¿Se han preguntado ustedes porqué gente que tiene poco de espiritual, pero que tampoco son individuos fantasiosos, declaran haber “visto a Dios”? Es simple, basta con hacerle respirar una atmósfera pobre en oxígeno y cargada de anhídrido carbónico. Una atmósfera de este tipo es fácil de generar en un pequeño templo o en un oratorio de dimensiones reducidas: basta con que no tenga apenas ventilación, con que haya flores y se quemen inciensos, si hay mucha gente mejor, consumen más oxígeno, y si las paredes están decoradas con símbolos religiosos y chapadas en oro, la visión beatífica queda garantizada. Se trata, además, de que los fieles repitan mantras o jaculatorias incesantemente, frases que, a fuerza repetirlas pierden completamente su significado o… que jamás lo han tenido. Los católicos suelen repetir determinadas oraciones acompañando el rosario y los hare-krishna repiten durante horas el estribillo: “Hare Krishna, hare, hare, Krishna, Krishna, Rama Khrisna, hare, hare, hare Rama, etc.”. Y lo hacen en un ambiente saturado de incienso y de flores, frecuentemente con una alimentación pobre en proteinas. Antoni Gaudí, proclive a los ayunos y a las maceraciones, tenía una frase  genial que resume parte de este proceso: “Contra más de debilita mi cuerpo, más se eleva mi espíritu”. Y sin embargo, no hay en todo esto nada realmente espiritual, sino la aplicación de leyes físicas y un conocimiento amplio de la fisiología humana.

Cuando el cuerpo se debilita mediante todo tipo de prácticas ascéticas y místicas (ayuno, oración, fatiga, trabajo, autocastigos físicos) y cuando se embota el cerebro mediante oraciones y jaculatorias mil veces repetidas –y no digamos si existe el estímulo de alguna droga- aparece la visión beatífica dotada de un increíble realismo y que, para colmo, se puede dramatizar en forma de los estímulos y sugestiones de la secta o de la iconografía presente en la sala donde tiene lugar la experiencia. Si se produce en un pequeño oratorio católico, por ejemplo, el sujeto afirmará que Cristo le ha hablado desde la cruz y si tiene lugar en un templo budista, será el Gran Buda el que se dirija a él.

No hay en todo esto nada de sorprendente por más que a quienes no están avisados y atraviesan por una experiencia de este tipo, les parezca que se han elevado hasta la morada de los dioses. Y para ello solamente les habrá bastado respirar una atmósfera rica en anhídrido carbónico. Lo mismo ocurriría si lo respirásemos directamente de una bombona. No es raro, por ejemplo, que, de tanto en tanto, algunos prácticamente del buceo con escafandra autónoma pasen por experiencias de este tipo. O que determinados sujetos que sufren por algún motivo un ahogamiento, tengan este tipo de visiones, hasta el punto de para algunos raros especimenes, solamente les es posible alcanzar el orgasmo cuando sufren un breve y controlado estrangulamiento.

2. Técnicas fragmentarias y/o perdidas

Pero existen muchas más técnicas de este tipo. Y algunas son más extrañas y todavía ninguna ciencia ha logrado dar ninguna explicación satisfactoria. El único hecho es que tales experiencias existen. En 1973 conocí a uno de los alumnos de Julius Evola, uno de los pocos esoteristas que en el siglo XX estuvieron en condiciones de estudiar primero y enseñar después de manera desinteresada y sin formas grupos orgánicos, las técnicas de ascesis tradicional. Evola –que ha dejado una abundante obra escrita que figura entre las páginas más brillantes del esoterismo europeo del siglo XX- postrado en su silla de ruedas, a partir de mayo de 1945, era un buen conversador y un maestro didáctico y excepcional. Formaba pequeños grupos con los que llamaban a su puerta para aprender las técnicas de ascesis tradicional. Sus clases no eran solamente teóricas, sino los alumnos podían percibir efectos prácticas tan inexorables como una fórmula química en la que si se dan las condiciones requeridas de presión y temperatura, se produce el efecto esperado.

La persona que conocí me explicó en qué consistían las prácticas de Evola. Por ejemplo, Evola sostenía que el pensamiento era capaz de corregir la realidad. Para demostrarlo pedía a sus alumnos que durante una semana se abstuvieran de mantener relaciones sexuales y se ejercitaran en la concentración en un solo punto. Luego, enviaba a cinco o seis de ellos a un autobús con la orden de que se concentraran a partir de determinado punto del viaje en la nuca del conductor y a una orden de uno de los miembros del grupo, “ordenaran” mentalmente al conductor frenar inopinadamente y en seco. Siempre –oígando lo bien, siempre- se producía el efecto esperado. Salvo una vez y por un buen motivo. Uno de los miembros del grupo no había respetado la semana de castidad. Y no sólo eso, sino que no lo había comunicado a sus compañeros y, para colmo, su partener quedó embarazada. Aquel hombre, que hasta ese momento había sido normal, empezó a ver crecer a su hija como la imagen del complejo de culpabilidad de no haber sido capaz de mantener la palabra dada. Aquella hija era el símbolo de su endeblez y de su debilidad. Sufrió graves depresiones en los años que siguieron. Emprender una espiritual es –lo dijo Sommerseth Maughan- tan peligroso como caminar sobre el filo de una navaja.

Evola no daba mucha importancia a técnicas de este tipo[1]. De hecho consideraba que podían ser incluso peligrosas y desviar –por su potencial de fascinación- al aspirante a recorrer una vía metafísica hacia “logros” completamente contingentes. Si utilizada estas técnicas puntualmente era para demostrar a sus discípulos la existencia de fuerzas desconocidas muy alejadas de las registradas por las leyes de la física. Demostraba también que existían nexos entre determinadas formas de ascesis (por ejemplo la castidad) y la producción de estos fenómenos. Y, finalmente, demostraba a través de este tipo de trucos, la existencia de otra forma de pensamiento que no derivaba de las conexiones neuronales y que dada acceso a otra realidad.

3. Cuando el Opus Dei aplica la parapsicología

Julius Evola no era el único que conocía esta técnica. Los miembros del Opus Dei también la practican si hemos de creer a Javier Ropero en su obra Hijos del Opus Dei[2]. El autor escribe:

“Trataremos de otro tipo de sugestión demostrada de manera científica pero que linda casi en los umbrales de la ciencia ficción. Es la sugestión telepática, que podemos definir como el fenómeno mediante el cual una o varias personas pueden influir sobre las actitudes, creencias o comportamiento de otro sujeto a través de una vía mental-telepática. Este fenómeno, lejos de ser una mera posibilidad o una gratuita especulación del autor, es una realidad demostrada por afamadas instituciones científicas de diversos países. La sugestión telepática ha sido especialmente analizada de manera rigurosa en las universidades soviéticas de San Petersburgo[3].

El autor, Ropero, consciente de lo que va a sorprender al lector se preocupa de exorcizar los fantasmas citando testimonios de científicos europeos que consideran posible la transmisión telepática y entre ellos a Einstein, Freud, Alexis Carrel, etcétera. Luego, una vez establecido que no está hablando de locuras, ni de supersticiones, sino de fenómenos muy tangibles, explica:

Teniendo en cuenta los anteriores precedentes históricos, que confirman la posibilidad de que un individuo pueda influir en la conducta de otro a través de una vía telepática, expondremos los factores que, concurriendo en las actividades de proselitismo del Opus Dei, podrían dar lugar a que la telebulia o sugestión telepática sea un hecho cotidiano en la institución. En este sentido hemos de reseñar que, semanalmente, y durante las charlas de formación de los ya socios numerarios, también llamadas círculos breves, se dicta una lista de una media docena de muchachos por cuya vocación al Opus Dei hay que rezar y mortificarse con intensidad durante esa semana. Cada numerario toma cuidadosa nota de esta lista de "pitables" en su agenda (pitar, en la jerga opusdeísta, es hacerse de la Obra. Para más información sobre este tipo de vocablos particulares de la institución el lector puede consultar el apéndice titulado "Glosario de terminología utilizada en el Opus Dei"). El primer joven que figura en la lista es el candidato más próximo a pitar y será el objetivo principal de cada una de las oraciones y las mortificaciones que ofrezcan todos y cada uno de los socios del centro. Es llamativa la absoluta convicción de los numerarios de que si el primero en la lista no pita en un plazo breve es porque en el club no ha habido la suficiente oración y mortificación ofrecidas para que el joven accediese a la crisis vocacional. Cuando esto sucede el director regional de la Obra de San Rafael (la sección del Opus Dei dedicada por antonomasia al reclutamiento de adolescentes) visita al director del centro responsabilizándole de la falta de "vibración apostólica" del club, y éste a su vez arenga a los directores de los círculos para que conminen a todos los numerarios de ellos dependientes a que esa semana se note en el centro un auténtico estallido de oración y mortificación por los pitables. ¿Y qué es lo que sucede? Pues que entonces, de forma inexorable y como si hubiese una auténtica relación de causa a efecto, atribuida por los socios al propio Espíritu Santo, alguno de los muchachos de la lista pasa a ser el "farolillo rojo", la última y flamante adquisición del Opus Dei. Personalmente he sido testigo durante más de seis años de cómo esta situación se repetía una y otra vez, no hallando durante mucho tiempo una explicación natural plausible que excluyese la de la intervención sobrenatural. Estos hechos, aparentemente milagrosos, confirmaban la enseñanza de los directores y del propio fundador de la Obra acerca de que la oración y la mortificación eran, sin lugar a dudas, la forma más eficaz de apostolado.[4]

Mas adelante, el autor prosigue con algunos ejemplos:

Una experiencia muy interesante me fue contada por el mismo experimentador-jefe. Por razones evidentes, no me juzgo autorizado a dar nombres. El experimentador fue un jesuita argentino, un padre destacado en aquel país, especialmente en la enseñanza universitaria. Cierto profesor protestante llevaba a cabo una campaña "dudosa" entre los universitarios. El profesor actuaba con absoluta buena fe, pero era igualmente innegable su aversión por la Iglesia católica. Entonces el padre, con un grupo de universitarios y a título de experiencia, comenzó la maniobra siguiente: todos los días y a la hora en que sabía que el profesor se recogía a descansar, un grupo de veinte congregantes marianos, cada uno en su casa, pensaba con "intención telepatizante" en el profesor en cuestión, tratando de sugerirle que reconsiderase su posición frente al catolicismo. Pues bien, pocos días después, el profesor entraba en tal crisis religiosa que el padre tuvo que mandar suspender inmediatamente la experiencia, pues había peligro de que el profesor quedase afectado de los nervios. Suspendida la experiencia, el profesor consiguió equilibrar su sistema nervioso. (González Quevedo, Oscar: "El rostro oculto de la mente", Santander, Editorial Sal Terrae.)

Personalmente he sido testigo de cómo un amigo fue sometido a tanta presión psicológica, y quizá parapsicológica, durante un viaje organizado a Roma que desembocó, tras el mismo, en un estado febril y de excitación que le obligó a permanecer en cama varios días. Otro amigo mío me relataba que, mientras dormía recostado en el asiento del autobús de regreso de una de estas excursiones organizadas por el Opus Dei, apareció en su mente, durante el sueño, un martilleante estribillo en que se repetía de manera sofocante, una y otra vez: "Reza, confiésate, hazte de la Obra. Reza, confiésate, hazte de la Obra. Reza, confiésate..." Cuando despertó, sobresaltado, dicho estribillo se tomó en el cadencioso ruido que hacía el autobús al rodar sobre el asfalto”.

El efecto telepático aumenta cuando los “emisores” del mensaje se encuentran en un “estado adrenérgico”, en el que, estimulado por la adrenalina, predomina el sistema simpático, lo cual se produce ante las situaciones de urgencia y de miedo. Y esto se consigue cuando los emisores del mensaje telepático tienen tendencia a autoflagelarse, realizarse maceraciones y castigos, utilizando cilicios o cualquier otro instrumento de castigo[5].

Hasta aquí la teoría que, aparentemente, tiene poco que ver con el tema que nos ocupa. Sin embargo, su vinculación es directa. A partir de Alice Ann Bailey, aparece una forma de práctica ocultista inédita hasta ese momento: la creación de un “campo de fuerza” generado por la “escuela”. En el folleto titulado Grupo de Meditación de Buena Voluntad Mundial puede leerse:

“El grupo fue instituido por Buena Voluntad Mundial hace unos treinta años, en respuesta a la urgente necesidad de movilizar la potente energía de la buena voluntad en un momento de crisis mundial. Está compuesto de una amplia variación de gente de diversas razas y nacionalidades. Muchos de los miembros del grupo poseen un entrenamiento superior y prominente en la meditación y han trabajado juntos durante muchos años”[6].

Básicamente, la acción de estos grupos de meditación consiste en:

“colaborar con la meditación, al menos una vez por semana. Tratan de sincronizar sus meditaciones y trabajar los miércoles a las doce del mediodía. El mediodía del miércoles –el punto medio de la semana- es el punto focal de toda la tarea grupal”[7].

4. Lucis Trust y su método de “meditación”

Antes hemos visto, gracias al texto de Ropero, el efecto que seis adolescentes del Opus Dei pueden tener sobre un candidato a “pitar” que se resiste a doblegar su voluntad al grupo. Imaginemos el efecto que puede lograr un grupo de miles de personas –decenas de miles- puesto a meditar en el mismo día, a la misma hora, en todo el mundo. Desde los años cuarenta, Lucis Trust viene realizando una portentosa labor de propaganda, paciente, reiterativa, cuidada, gratuita además, sobre gente predispuesta a ingresar en estos grupos, sensibilizada por temas como “el advenimiento de la nueva era”, “el bienestar de la humanidad”, “trasmitir la energía del Amor”, “el Amor en acción”, etc. Imaginemos el efecto que estas decenas de miles de personas puede tener si la meditación se realiza sobre tal o cual líder político. Podría ocurrir incluso que el resultado de una meditación de este tipo fuera mínimo si el sujeto en cuestión sobre el que se focaliza tiene una fuerte constitución interior: si está dotado de una ideología arraigada en la médula de su personalidad, si tiene criterios y valores bien asentados, si es una persona de un buen bagaje cultural, en una palabra, si tiene raíces culturales. A fin de cuentas es posible que tengan razón los ocultistas en este terreno y que la energía puesta en acción sea como cualquier otro fluido: que solamente es capaz de ocupar espacios vacíos, pero no volúmenes previamente ocupados.

Zapatero es un páramo cultural. Se ignora sus gustos, sus aficiones, sus lecturas, qué tipo de cine le gusta, en qué emplea su tiempo libro, de qué forma colma su odio. Se sabe sólo que le gusta el fútbol y poco más. Nunca habla de sus autores de cabecera –todos los que leemos, los tenemos, de la misma forma que todos los que vamos al cine seguimos la obra de tal o cual director- ni realiza citas prácticamente de nadie. Su discurso doctrinal es plano, sin matices, repitiendo siempre las mismas ideas implícitas en el documento redactado en León cuando presentó en sociedad su candidatura. Nunca ha sido capaz de ir más allá y ni siquiera sus asesores, ministros y miembros de la ejecutiva del PSOE, han sido capaces de aportar algo y de reconocer alguna fuente doctrinal. Se diría que están hechos a troquel a imagen y semejanza del páramo cultural que es ZP.

De Felipe se sabía que empleaba el tiempo libre en una actividad tan relajante como los bonsáis y tenia amistades sólidas en el mundo de la cultura; de Guerra que oía a Malher y leía a Gertrud Stein. Almunia tiene una formación estricta de izquierdas y otro tanto cabe decir de José Borrell. Además de dedicarse a la política leen, su base cultural es buena o inmejorable (tal era el caso, por ejemplo de Luis Boyer, cuya base cultural era muy superior a su habilidad política). Zapatero, insistimos, es un páramo hasta el punto de que cabe decir que resulta peligroso un presidente del gobierno que ignora lo esencial de las corrientes de pensamiento de su tiempo y que no tiene formación en profundidad en ningún terreno, ni siquiera una formación general sólida y con un nivel aceptable. Zapatero no habla de economía, simple y sencillamente porque es lerdo en economía y esto se sabe suficientemente desde que Jordi Sevilla le “apuntaba” sus intervenciones en el Congreso de las Diputados… Pero ¿de qué habla Zapatero? Habla de igualdad, habla de derechos humanos, habla de solidaridad, habla de pacifismo, habla de progreso y habla de tolerancia… nada más.  Y esto, para un político –y para un ser social- es poco porque implica una limitación mental casi escandalosa e intolerable para alguien que ostenta responsabilidades públicas que debe tener elementos para juzgar situaciones. Zapatero carece de tales elementos y en su imaginario individual tan sólo hay algunas “sugestiones” a partir de las cuales analiza la realidad. Pero, en todo momento, da la sensación de no entender nada de geopolítica, carecer de conocimientos históricos más allá de los dados por el bachillerato, tener muy poca visión sociológica, y no disponer absolutamente de ninguna visión antropológica. Entonces ¿de dónde ha extraído “sus” ideas?

5. El “milagro” del “pensamiento positivo”

La respuesta que estamos dando es: es posible que no las haya extraído de ningún sitio, es posible que le hayan sido injertadas desde fuera. ¿Por quién? Por los grupos de Buena Voluntad Mundial surgidos de la obra de Alice Ann Bailey? Es posible, de hecho si los hemos mencionado aquí es porque existe una similitud tal entre las obsesiones de estos grupos y los temas mil arquetípicos del presidente del gobierno que, a poco que se realizan las comparaciones, es imposible negar la similitud. La obra de Alice Ann Bailey es más antigua, por tanto hay que pensar que es la matriz que se ha trasladado a otras personas… ¿cómo Zapatero? Sí, como Zapatero.

Algunas de las reacciones de Zapatero son absolutamente elocuentes. Él, que se ha definido como un optimista antropológico, cree saber que generar optimismo respecta a una situación por caótica que sea, puede contribuir a mejorarla. Durante medio año desde principios de 2008 hasta el verano de ese año, ha estado repitiendo por activa y por pasiva que no existía crisis económica. Como ya hemos dicho, algunos, a la vista de los datos objetivos y de la situación económico-social del país, estuvimos durante un tiempo convencidos de que se trataba solamente de un ardid pre-electoral: una vez cerradas las urnas, Zapatero adoptaría medidas paliativas de la crisis… y así pasaron otros cuatro meses con un gobierno practicando el arte de Don Tancredo cuando ya no había elecciones a la vista en veinte meses. Y eso era lo más grave: que no se trataba de un ardid electoral ¡sino que realmente Zapatero estaba firmemente convencido de que no había crisis económica! Finalmente, en una de las habituales frases que se deslizaban por las ondas cuando creía tener el micrófono cerrado –y no lo estaba- puedo oírse la naturaleza de su razonamiento: “Es que hay que expandir optimismo”. El optimismo, en esta óptica, modela a la realidad: si todo un país cree en sus posibilidades y en la inexistencia de una crisis por delante… ese país no soportará crisis alguna y saldrá airoso. Son las virtudes de lo que se ha dado en llamar “pensamiento positivo”. Evita toda negatividad y vivirás plenamente el pensamiento positivo que modelará en torno tuyo una realidad no menos positiva… tal es la ensoñación zapaterista. Pero ¿realmente es exclusivamente zapaterista? En absoluto.

Puede leerse en el folleto que hemos comentado de Buena Voluntad Mundial:

“El Grupo de Meditación de buena Voluntad es una actividad de servicio para las personas que creen en el poder del pensamiento, porque su trabajo toma lugar estrictamente en el plano mental. El poder del pensamiento es ahora aceptado como una realidad y citas tales como: “la energía sigue al pensamiento” o “como un hombre piensa en su corazón, así es él”, son frecuentemente escuchadas. En verdad, la energía sigue al pensamiento y la energía de la buena voluntad no es una excepción. La mente es, de hecho, un mejor portador de la potencialidad de la buena voluntad que las emociones”.

Todo estas ideas fueron precursores del movimiento que se ha dado en llamar New Age y que, en buena medida, es un conglomerado de técnica de autoayuda, terapias psicológicas heterodoxas, que parten de la base de que el pensamiento crea la realidad y si este pensamiento es positivo la realidad será inevitablemente positiva. En los últimos veinte años miles de libros de “autoayuda” han invadido el mercado. Todos nos hablan del mismo lugar común: la energía sigue al pensamiento, el pensamiento crea la realidad, hasta el punto de hacer posible lo que en buena lógica sería imposible. Las técnicas terapéuticas y psicológicas de la Nueva Era caminan todas en la misma dirección: “tu pensamiento puede salvarte de una realidad miserable, a ti enfermo, a ti desheredado, a ti, pobre diablo”. Los cursos que constantemente se imparten sobre terapias newagers tienden todas a rectificar el hilo de lo inevitable mediante el recurso al pensamiento positivo. Los enfermos sanan porque tienen voluntad de sanar, aun cuando tengan cárceles terminales que impliquen destrucción de tejido, los mentalmente inestables alcanzan estadio de apaciguamiento de la mente, incluso los que buscan fortuna tienen a su disposición métodos para transformar su ambición y su voluntad de dominio económico en algo tangible. Los libros de Napoleón Hill le ayudarán en ese menester… La Nueva Era es, así pues, una mezcla de terapias voluntaristas que pretenden rectificar la realidad mediante el recurso de la energía generada por el pensamiento positivo.

¿Y qué es el zapaterismo? Justamente eso, no es otra cosa, es eso, tristememente eso y nada más que eso. Un intento de engañar a la realidad, forjando un pensamiento positivo “nacional” (por eso  llegó a sostener Zapatero que afirmar que estábamos ante una crisis económica era, simplemente, antipatriota) que genere fuerzas y energías suficientes… para remontar la crisis. Es infantil, ingenuo, torpe y absurdo, pero no hay otra explicación. El problema es que ese “pensamiento positivo” no está ejercido por un ama de casa cincuentona, deseosa de vivir últimas experiencias excitantes y esforzándose en generar pensamientos positivos que conduzcan en esa dirección… sino por un señor presidente del gobierno del que depende el destino de 44.000.000 de ciudadanos y residentes. Cuando se tiene la responsabilidad de mantener un hogar y educar a unos hijos, uno puede permitirse ciertas frivolidades como creer que el pensamiento crea la realidad… cuando es la realidad la que induce tal o cual forma de ver la vida, o al menos así debería de ser. Pero cuando se dirige un país, no estamos ante una frivolidad inofensiva, sino ante una incompetencia monumental que corre el riesgo de arruinar a toda una comunidad y enfangarla durante una generación.

Hay algo en el pensamiento de Zapatero que remite constantemente a los niveles más simples y a los conceptos más esquemáticos del movimiento de la New Age o Nueva Era. Se trata de un movimiento polimorfo en el que, frecuentemente, lo mejor da la mano a lo peor y donde las más altas cotas del pensamiento de finales del siglo XX se codean con las supersticiones más zafias surgidas de la fetidez teosófica de finales del XIX. Es evidente que no se pueden comparar los escritos de Rupert Sherdrake, Marilyn Ferguson, o Fritjof Capra, con las divagaciones de Carlos Castaneda y de sus discípulas, las elucubraciones de los “contactistas” (que afirman recibir mensajes de otros planetas y que no son más que espiritista reciclados), por videntes y profetas del tres al cuarto y por “terapias” de las que bastante suerte hay si se sobrevive a ellas. Pero la “nueva era” destila un aroma específico que se encuentra presente, no sólo en el pensamiento sino en los actos de Zapatero.

En nuestra opinión esa insistencia suya en el optimismo antropológico y en el pensamiento positivo, no deriva de su propia cosecha. Como tampoco “sus ideas” son verdaderamente suyas: subyacen en las cloacas de la “new age”. Ya hemos visto como han podido llegar hasta Zapatero: o bien por lecturas propias (¿quien no ha recibido alguna vez un libro de autoayuda como regalo o no ha conocido a alguien que se lo haya pasado o que comparta estos criterios?) o bien inducido por técnicas practicados por los grupos surgidos de la obra de Alice Ann Bailey. Poco importa, el caso es que si el pensamiento de Zapatero se parece a alguna forma de pensamiento hoy viva, es a la new age. Allí han ido a parar co-masones teosóficos, feministas místicas, homosexuales que aspiran a hincar su legitimidad en la idea del andrógino platónico y, ocultistas de todos los pelajes, sectarios varios que en sus actividades cotidianas practican las mismas técnicas de inducción telepática y en cuyo seno late desde los años 70 el mismo espíritu del que hizo gala Zapatero desde que emergió como diputadillo de provincias. Es difícil despreciar este vínculo inexistente alegando simplemente la palabra “imposible”: lo verdaderamente imposible es que esté gobernando nuestro país alguien con un bagaje de ideas tan miserable y con una calidad cultural propia de un páramo. Hasta ahora no hemos hecho más que interrogarnos sobre el origen y las fuentes de ese pensamiento. En este capítulo hemos dado una vuelta de tuerca. No es la última.

© Ernesto Milá – Infokrisis – Infokrisis@yahoo.es – http://infokrisis.blogia.com



[1] En la obra colectiva dirigida por Evola y firmada por el Grupo de Ur titulada Introduzione alla magia in tanto scienza del Io, pueden leerse en algunos de los ensayos en los que está dividida esta obra técnicas similares que oscilan desde la danza del vientre a la iniciación en los misterios paganos. Cf. Introduzione alla Magia, Edizioni Mediterranee, Roma 1980, tres volúmenes..

[2] El libro está agotado desde 1997, pero existe una edición en Internet que, como otras obras sobre el Opus Dei, puede “bajarse” de esta web: http://www.opusdeilibros.com

[3] Op. ciot., pág. 118

[4] Op. cit., pág. 121.

[5] (Cfr. Andrija Puharich: "Beyond Telepaty". Double Day & Company, Garden City, Nueva York, 1964.)

 

[6] Cf. Grupo de Meditación de Buena Voluntad – folleto sin fecha de aparición – figuran como direcciones: 1, rue Varembé (3è) – 1211 Ginebra 20 – Suiza. – pág. 1-2.

[7] Op. cit., pag. 2-4

 

Una reflexión sobre el universalismo masónico... (Anexo a la Docrina Excéntrica)

Infokrisis.-Los dos vídeos introductivos al tema del universalismo masónico están extraídos de la famosa (e inencontrable) película "Forces Ocultes" [fuerzas ocultas], firmada en Paris durante la ocupación alemana. Por primera vez en el cine se puede ver una ceremonia de iniciación masónica en el grado de Aprendiz. El guión y la ambientación habían sido establecidos por Marqués-Riviere, antiguo miembro de la masonería que pasó al campo opuesto tras percibir que cierta masonería había traicionado a sus orígenes [aludía al Gran Oriente de Francia]. En la actualidad la ceremonia de iniciación en la masonería es prácticamente idéntica.

Un querido amigo me ha hecho la observación de que, a lo largo del estudio sobre la doctrina Zapatero, minusvaloro el universalismo masónico. Si es un error el considerar a la masonería como universalista, también lo sería el considerar a Zapatero como no-masón, precisamente por que sostiene un universalismo de facto. Si la masonería es universalista, implica no excluir la pertenencia de Zapatero a la masonería, o bien la influencia que la masonería ejerce en el entorno de Zapatero y en la elaboración de sus concepciones doctrinales. Zapatero, como se sabe, es universalista en la medida en que para él la nacionalidad es algo superfluo que no implica nada. Por tanto, le tiene sin cuidado el que algunos puedan reivindicar “naciones” periféricas y fracturarse nacionales históricas. Dado que esta posición sobre el universalismo de Zapatero es importante –dado que si se demuestra que su universalismo y el de la masonería son de la misma matriz eso implicaría un influencia del pensamiento masónico sobre la ecuación mental de Zapatero– hemos decidido incluir las reflexiones que siguen

Dificultad de definición del concepto “universalismo”

No es fácil ponerse de acuerdo sobre lo que quiere decir “universalista”. Existen muchas concepciones de universalismo, frecuentemente, son antitéticas. El Diccionario de la Lengua Española[1] define “universalismo” como “cualidad universal, universalidad” indicando que sería una corriente reduccionista a lo “único” o a lo “uno”. Y añade como segunda acepción: “Doctrina política que propugna la creación de un estado universal”. Pero aquí pueden establecerse algunos matices.

Reforzando esta segunda acepción, Wikipedia[2] dice: “En muchas ocasiones se nombra como universalismo a la ideología que tiene como fin la unificación de todos los poderes e instituciones mundiales bajo una sola cabeza, ya sea por medios religiosos o políticos”. Lo cual es afinar un poco más pero complicar también el problema: el concepto de “Rey del Mundo”, o “Emperador del Mundo” que aparece en muchas tradiciones seculares[3] indica una idea de dominio universal y, por tanto, sería portadora de una forma de “universalismo”, al igual que cualquier concepto Imperial. Desde el momento en que se declaraba que en el Imperio Español no se ponía el Sol, se estaba aludiendo a una estructura “universal”.

Habría que especificar que “universal” no sería lo mismo que “universalista”. El catolicismo por ejemplo sería “universal”, pero ¿se le podría añadir el calificativo de “universalista”? El matiz es obligado: algo universal es algo de valor general aplicable en todo el orbe; universalista sería un concepto holístico que tendería a aplicar el criterio universal en todos los ámbitos de lo humano. Universalismo sería pues la búsqueda de un “gobierno universal”, de una “religión universal, de un “mercado universal”, de una “cultura universal” y de un pensamiento “universal”. Y aquí ya estamos alejados de la idea imperial que siempre ha constituido un polo de agregación de partes diferenciadas. Castilla siguió siendo Castilla con el Imperio de los Austria, Aragón siguió siendo Aragón y Flandes siguió siendo Flandes. Nunca se intentó un afán reduccionista y nivelados que solamente apareció en la historia con la degeneración de la idea imperial en absolutismo (tránsito que se opera en España a partir de la guerra de sucesión con la sustitución de los Austrias por los Borbones).

Así mismo, el catolicismo es “universal” en tanto que forma religiosa que aspira al reconocimiento unánime de sus dogmas y a la idea de que la “salvación” es algo universal que no depende de la raza ni de la nacionalidad, sino de la adhesión individual a sus principios.

Dentro de la doctrina antiherética de la Congregación para la Doctrina de la Fe, existe una herejía llamada “universalista” que si bien no nos dice nada sobre la relación entre masonería y universalismo, si nos dice todo sobre el concepto católico de “universalismo”. Nos dicen[4]: “La herejía del universalismo es la creencia de que al final toda la gente se salvará,  que impregna los textos de muchos escritores masones y constituye una doctrina  incompatible con las enseñanzas del Nuevo Testamento”. Atribuyendo a la palabra universalismo un significado propio, la Iglesia evita pronunciarse sobre si ella es, a su vez, universalista. A fin de cuentas es una mera guerra de palabras y un mismo concepto lanzado es arrojado contra el adversario cargado con un contenido específico que, en el lenguaje normal no tiene.

A nadie se le escapa que la concepción universalista en sentido estricto puede conducir al reduccionismo y a un empobrecimiento antropológico y cultural de las poblaciones y de los individuos. Y esto es lo que la Gran Logia de España reconoce. El Supremo Consejo de Grado 33 (estructura masónica unitaria de altos grados de Rito Escocés) escribe sobre este tema, estas precisas observaciones[5]:

Aunque el mundo profano se esfuerza en enfrentar conceptos como universalidad y diferencia, los masones escoceses podemos proclamar que sin respeto a las diferencias el universalismo puede degenerar en totalitarismo, y que, sin exigencia de valores universales (es decir sin un horizonte de universalismo) el derecho a la diferencia podría desembocar en un enfrentamiento bélico. Por eso conviene mantener pujante siempre la vocación universal de la masonería”.

Y más adelante se añade: “En el plano internacional se aboga por la libertad e independencia de las Naciones en una concepción universalista y fraternal”, de lo que se deduce que:

1) Que la masonería regular reconoce la existencia de las Naciones.

2) Que la masonería regular aspira a evitar tensiones entre las naciones apelando al “universalismo” y a la “fraternidad”.

3) Que la masonería regular entiende que el “universalismo” es una estrategia para evitar conflictos internacionales[6]

4) Que la masonería regular alude a un universalismo relativo que está muy lejos del universalismo absoluto del que harían gala los defensores del “pensamiento único” y de lo “políticamente correcto”. La masonería regular no alude a “nivelar” las diferencias antropológicas y culturales, ni a generar una nueva “religión mundial”, ni siquiera su afirmación sobre la “fraternidad” termina en un llamamiento a la creación de un gobierno mundial”, o a defender explícitamente el proceso de globalización que, a fin de cuentas, es la forma más avanzada y peligrosa de universalismo.

Universalismo, catolicismo, masonería

A pesar de que las corporaciones medievales tuvieron como antecedente inmediato los gremios romanos y que en todo el mundo antiguo el “tercer estado” (la función productiva a la que aludió Dumezil[7]) tuvo una existencia real, los gremios medievales de los que extrae su legitimidad la masonería estaban inspirados por el catolicismo y, especialmente, se sentían particularmente próximos al gibelinismo[8]. Sin embargo, hacia el siglo XV la tensión gibelina desapareció casi completamente  y, a partir de ese momento, el movimiento gremial se configuraría como una fuerza católica, especialmente conservadora en lo relativo a sus fueros. Cuando cesa el impulso medieval de construcción de las catedrales y tras el incendio de Londres, de 1666, la masonería inglesa (es decir los gremios operativos de constructores) inicia una transformación que le lleva hasta la fecha clave de 1717 cuando, la masonería operativa, tras un período de gestación de dos siglos, se convierte -en parte- en masonería especulativa. En los primeros años, esa masonería está abierta solamente a católicos y es sólo en 1723 cuando se abre a otras religiones de tronco cristiano y luego a los judíos. A partir de ese momento, el universalismo masónico es distinto al universalismo católico. Porque, a fin de cuentas, el cristianismo fue la primera religión universalista.

En efecto, a diferencia del judaísmo que reducía el ámbito de aplicación de su religión a los individuos de raza judía, y a diferencia del paganismo que ignoraba estos planteamientos y para el que la única forma de universalismo era la idea imperial romana, el cristianismo aparece con una vocación misional y, propiamente, universal. La “palabra de Dios” puede se asumida por todo el mundo y, de hecho, debe de llegar al último rincón de la tierra. Esto hace que, tras el Edicto Milán y la conversión -más o menos ficticia- de Constantino, la idea imperial romana se vea impregnada por la idea universalista católica. Aún así, las invasiones bárbaras del siglo V-VI hacen que se recupere en buena medida la pureza de la idea imperial romana (con la figura del emperador como jefe político y espiritual, portador de la doble espada, frente a la concepción católica en la que el poder espiritual y el poder temporal estaban separados correspondiendo ambos, respectivamente, al Papa y al Emperador, con lo cual estaba claro que el primera estaba por encima del segundo). Tal será el núcleo de la polémica entre guelfismo y gibelinismo. A partir de la irrupción de las Españas en la escena internacional con los Reyes Católicos y los Grandes Austrias, la idea imperial estará puesta al servicio de la difusión de la fe en todo el mundo y, por tanto, el universalismo católico cobrará un nuevo impulso.

Ahora bien, en cierto sentido, el universalismo es contrario al imperialismo. Éste cristaliza en la aspiración de una nación a expandirse y gobernar en todo el mundo, mientras que el universalismo católico no tenía una nación “privilegiada”, sino una iglesia universal encargada de la proyección y difusión de la fe. La Ilustración, fuera ya del ámbito católico dará un nuevo impulso al universalismo, pero la Revolución Francesa, al desembocar en el Primer Imperio Napoleónico, reconducirá nuevamente el universalismo al imperialismo y al predominio de una nación sobre las demás. La única novedad será la prédica sobre el predominio de la razón y sobre los derechos del ciudadano.

Los imperios del siglo XIX serán imperios construidos en base a las necesidades económicas de las naciones. No es raro que el imperio británico caminara de la mano de la Compañía de Indias, siendo los lanceros bengalíes y demás unidades coloniales, un mero acompañamiento militar de una empresa fundamentalmente económico pero que, solamente para uso emotivo y sentimental de las poblaciones, esto es a efectos de justificación, tenía un contenido de difusión de la cultura.

La época de los imperialismos y la época de las naciones general formidables acumulaciones monetarias que dan lugar a una escalada del capitalismo de su nivel artesanal al industrial, de éste al imperialista, del imperialista al multinacional para llegar, finalmente, al período de la globalización. En esta última fase el impulso universal mesiánico se ha materializado completamente, pero no dista mucho del universalismo religioso de los primeros tiempos del cristianismo en donde el mismo sistema de creencias debía servir en todo el mundo, más allá de las peculiaridades antropológicas, étnicas y culturales. Análogamente, la globalización debe llegar a todos los ámbitos, más allá de las diferencias de desarrollo económico-social de cada una de las regiones del planeta.

Así pues, se puede concluir que la globalización es una forma invertida de universalismo católico, pues no en vano el universalismo irrumpe en la historia con el catolicismo y alcanza su máxima proyección con la globalización. Sin embargo, mientras que el catolicismo difundía una idea espiritual y religiosa, la globalización se realiza en base a un criterio material y consumista. De ahí que hablemos de “inversión”.

La evolución de la sociedad y de la masonería

En este proceso la masonería tiene indudablemente una parte de responsabilidad, especialmente cuando a partir del siglo XVIII existen nexos indudables entre la “filosofía de las luces”, la ilustración, y la francmasonería francesa de ese momento. Esa vinculación prosigue durante la revolución francesa y americana cuyos motores ideológicos son la masonería. Prosigue luego en la formación de los Estados Nacionales que, inevitablemente, están impulsados por el “partido de la burguesía organizada” que no era otro que las logias masónicas. Y prosigue desde luego en todo el período de capitalismo industrial en el que la burguesía sigue siendo la clase hegemónica de la sociedad… y el partido de la burguesía inspira los valores de esa sociedad.

Pero a partir de al Segunda Guerra Mundial todo este esquema se trastoca. La burguesía va perdiendo hegemonía en relación a los gestores financieros y a las grandes acumulaciones de capital, respecto a lo que podemos llamar, en definitiva, aristocracia económica primero y luego sacerdocio económico, pues no en vano, los promotores de la globalización, a partir de Fukuyama, han considerado a este proceso con rasgos milenaristas muy similares a los implícitos en las ideas cosmogónicas del catolicismo: la globalización acarreará el fin de la historia y abrirá una época de progreso y felicidad sin límites…

Y en esta parte, la masonería regular ya está completamente ausente. La burguesía no es hegemónica. La masonería a mediados del siglo XX deja de producir ideas. La burguesía ha perdido el ritmo de la historia y las naciones ya no tienen la dimensión adecuada para responder a las necesidades de su tiempo. La masonería regular deja de tener la iniciativa respecto a su momento histórico: ya no genera ideas… se ve arrastrada por nuevas ideas fermentadas y elaboradas en otros puntos.

Incluso ocurre un fenómeno nuevo e inédito. En la periferia de la masonería, en las obediencias irregulares y en lo que alguno ha dado en llamar “paramasonería” aparecen planteamientos nuevos que intentan adaptarse a los tiempos nuevos. Personajes como Alice Ann Bailey e incluso como Charles Leadbeater e incluso Annie Besant, perciben en el marco de al Sociedad Teosófica que el mundo está cambiando. Ellos atribuyen este cambio a la creciente influencia de la “era de Acuario”. Sea como fuere, empieza a hablar de universalismo, no en sentido teórico de fraternidad universal para evitar guerras y conflictos, sino en un sentido mucho más positivo: el mundo está “guiado” por entidades sobrenaturales, una de ellas va a manifestarse de nuevo y a asumir las riendas del mundo. Es el “guía” del que hablan todas las tradiciones religiosas (el Imán perdido del Islam, la Segunda Venida de Cristo del catolicismo, el Kalki Avatara del hinduismo, el Buda de la nueva era, etc.). Durante un tiempo, presentan a Krisnhamurti como el “mesías de la nueva era”. Cuando éste da el portazo y prefiere configurarse como gurú de las clases privilegiadas norteamericanas, sólo reacciona Alice Ann Bailey. Está a la espera, ve las tensiones de la época y concluye tras la fundación de la Sociedad de Naciones: “sólo un gobierno universal dará la paz mundial”. Pero no se detiene ahí, añade algo capital: “a un gobierno universal corresponde una religión universal”. Y ella se considerará el heraldo -la Juan Bautista- de esta religión.

Paralelamente, algunas obediencias masónicas irregulares y algunos ritos exóticos, han evolucionado hacia posiciones nuevas y diferentes. En esta masonería irregular deja de tenerse abierto el Evangelio en las tenidas, las referencias al Gran Arquitecto de Universo adquieren un sentido deísta o incluso ateo, pero extremadamente vago. Sería el “principio ordenador del cosmos” (las fuerzas identificadas primero por Newton, completadas en parte por Einstein) mucho más que una entidad personal o metafísica. Estos grupos también aluden a la “nueva era de Acuario” (algo inédito y completamente ausente de la masonería tradicional que sin duda se filtra a través de la ósmosis de estas obediencias irregulares con los medios ocultistas que larvan a lo largo de la primera mitad del siglo XIX y proliferan en su segunda mitad, para universalizarse en el siglo XX) y a sus valores.

En general -esto será objeto de tratamiento en otra parte de este estudio- el error de todos estos grupos es reducir los “valores de Acuario” a tres: humanidad, juventud, tolerancia. El común denominador de todos estos valores es el universalismo y su ambición de crear un gobierno mundial, una religión mundial, etc.

El concepto y el papel del universalismo en la masonería actual

Fuentes no faltan. Además de las fuentes impresas, Internet se ha convertido en una verdadera tribuna desde la que es posible ver las tomas de posición y los distintos conceptos que manejan las múltiples obediencias masónicas. Resumimos el estado de la cuestión:

- la masonería se declara universalista en la medida en que sostiene que sus valores son adaptables a todas las rezas y pueblos. Comparte en esto la postura católica. La diferencia, según la masonería, estriba en que el universalismo masónico es tolerante y democrático (ningún masón impondría a un profano la iniciación forzosa, mientras que las conversiones forzosas al cristianismo han proliferado en todos los tiempos). Tal es el argumento.

- ese universalismo puede ser “absoluto” o “atenuado”. Es atenuado cuando se limita a los principios y a las ideas (como hemos dicho, las ideas masónicas valen para todo el mundo). Y es absoluto cuando se convierte en una obsesión práctica: los masones y paramasones deben trabajar para implantar una religión universal, un gobierno mundial, borrar activamente las diferenciaciones de nacionalidad, raza y pueblo, etc.).

- el universalismo atenuado es el que está presente en la mayor parte de las logias: en todas las vinculadas a obediencias regulares e incluso en algunas obediencias irregulares. Contra más nos alejamos de la ortodoxia masónica, más aumentan las filtraciones por ósmosis de los grupos ocultistas surgidos en el exterior de la masonería en el siglo XIX y, por tanto más aumenta el universalismo radical.

Ahora vamos a intentar demostrar estos puntos.

Un planteamiento que encaja muy bien con el de una masonería irregular desviada de los principios de la masonería tradicional la hemos encontrado en la web de la Logia Centauro 996[9], taller mexicano del Gran Oriente, en la que es frecuente vez la mezcla de textos masónicos tradicionales con textos ocultistas. Cuando esta logia intenta explicar qué es la masonería se ve obligada a despojarla de todo origen cristiano y para ello la remonta a la antigüedad “pagana” (para esta logia todo lo anterior al cristianismo, es paganismo). Se alcanzan los límites de la confusión cuando, a partir de ahí, se infiere que “Al afianzarse en las mentes de la membresía esta nueva interpretación, el cristianismo estaba siendo prácticamente erradicado del Oficio. Se volvió impensable mencionar el nombre de Cristo u orar en el nombre de Jesús. El Oficio estaba establecido firmemente sobre el terreno del “universalismo”. Para añadir unas líneas más adelante que: “La principal norma para ser miembro fue, y sigue siendo, que el candidato crea en “Dios”. Este dios podría ser Krishna, Buda, Alá, o cualquier otro dios, pero Jesucristo no debe ser considerado nada más que un igual de estos. Esta idea universalista o inclusiva de Dios ha abierto la puerta para que cada deidad falsa tenga un lugar dentro de la Logia. Hall hace que esta orientación universalista sea inconfundible al afirmar: “El verdadero discípulo de la masonería ha renunciado para siempre a la adoración de personalidades. Con esta perspectiva mayor, se da cuenta de que todas las formas (…) no tienen ninguna importancia para él en comparación con la vida que está evolucionando en su interior”. Para concluir que: “Hall realza su creencia en el universalismo al afirmar que “el verdadero masón no está atado a un credo. Se da cuenta de que, con la iluminación divina de su logia, como masón su religión debe ser universal: Cristo, Buda o Mahoma, el nombre significa poco, porque él reconoce solo la luz y no al portador”. Así que, para el masón, Dios no es un ser personal, sino una fuerza impersonal, una energía que no tiene ninguna sustancia”. Sin embargo, este universalismo no es más que una excusa… para excluir de él al cristianismo (dice Centauro 66): “El masón que es cristiano se encuentra en una posición muy difícil. Si bien su Orden Fraternal apoyó su cristianismo en sus primeros años, ahora ya no lo permite, ya que no hay ninguna duda en cuanto a la orientación pagana de la masonería en nuestro tiempo. Por lo tanto, el masón debe preguntarse si puede, de buena fe, permanecer dentro de una organización que desvaloriza al Dios del cristianismo”, afirmación que compete únicamente a determinadas obediencias irregulares, pero no al grueso de la masonería; la dificultad estriba en distinguir qué masonería es “regular” y cual “irregular”, algo que, en principio no está al alcance de cualquier observador no avezado).

Para esta concepción, la masonería no sería una “sociedad que busca el progreso y la mejora del ser humano”, sino una religión. La Logia Centauro 669 explica como se llega a esta interpretación: “Al evolucionar la masonería moderna a lo largo de varios cientos de años, continuó siendo influenciado por quienes sostenían una cosmovisión ocultista. Para ellos, el Oficio era un resurgimiento de los antiguos misterios”. ¿A qué fuente recurre la Logia Centauro 669 para justificar su posición. No, desde luego a las Constituciones de Andersin ni a los viejos landmarks, sino a… Foster Bailey, teósofo en primer lugar, esto es, ocultista, y masón miembro de la Co-Masonería, es decir, de la masonería vinculada a la Sociedad Teosófica: “Foster Bailey, un ocultista y un masón grado 32, dijo que “la masonería es el descendiente de una religión impartida divinamente” que antedata la primera fecha de la creación. Bailey sigue diciendo que “la masonería es todo lo que nos queda de la primera religión mundial” que floreció en tiempos antiguos. “Fue la primera religión mundial unificada. Hoy estamos trabajando de nuevo para lograr una religión universal mundial”. La actitud y las posiciones están claras.

En el campo opuesto figura el escocismo y la masonería regular. En un documento publicado en Internet[10] puede leerse un resumen de esta posición: “El Rito Escocés implica en su ideal una perfecta síntesis entre el humanismo espiritualista de la filosofía tradicional y el humanismo antropológico moderno. Aunque el mundo profano se esfuerza en enfrentar conceptos como universalidad y diferencia, los masones escocistas podemos proclamar que sin respeto a las diferencias el universalismo puede degenerar en totalitarismo, y que, sin exigencia de valores universales (es decir sin un horizonte de universalismo) el derecho a la diferencia podría desembocar en un enfrentamiento bélico. Por eso conviene mantener pujante siempre la vocación universal de la Masonería. La filosofía escocista (que como hemos señalado es perfecta síntesis entre espiritualismo y humanismo) pretende hacer notar su mensaje universalista de libertad y tolerancia frente a todo fanatismo”, una actitud que no puede ser censurable desde el punto de vista tradicional. Se estará o no de acuerdo con esta posición pero es evidente que relativiza el elemento universalista y lo sitúa como un simple recurso para evitar conflictos internacionales. Se alerta incluso el riesgo de que el universalismo degenere en totalitarismo y no se alude, en absoluto, a que pueda ser el embrión de una “religión mundial”, ni mucho menos se intuyen elementos que puedan hacer pensar en que la masonería tradicional intuye la proximidad de la era de Acuario.

Compárese esa posición con esta obra encontrada en una obra de carácter sincrético, muy representativa de la masonería irregular en donde se citan todos los lugares comunes del ocultismo en una mezcla inextricable[11]. En esta web publicada por islamistas mexicanos que, al mismo tiempo son masones (sic), se habla de “masonería”, pero evidente que se está aludiendo a determinada masonería irregular:

“La masonería, a diferencia de otras asociaciones, tuvo una ambición universal. Su cometido era extenderse a toda la humanidad. Lo que era válido para la hermandad de la logia fue universalizado en la Hermandad Universal o la hermandad de la humanidad. A la libertad de conciencia de la logia se le dio un estatus universal mediante el establecimiento de una universalidad de la religión, que no significó necesariamente una religión sincrética, sino la expresión universal de la libertad de conciencia en sí, lo que fue manifestado del mejor modo por la Declaración de los Derechos Humanos. Así, las ideas generales de la Religión Universal y la Hermandad Universal reflejaron el carácter universal de la masonería. ¿Qué quiere decir la masonería con Religión Universal y Hermandad Universal?”. Según este documento, el masón debe arrodillarse ante cualquier altas, porque todas las religiones son válidas cuando se comprende su sentido esotérico, pero solo una es verdadera… el Islam. Para colmo, estos masones mexicanos islamistas ni siquiera se adhieren al Islam ortodoxo y tradicional, ni al sufismo, ni al chiísmo, ni al sunismo… sino a la fe bahai: “Esta fórmula aboga por la posibilidad intrínseca de una religión mundial, mejor formulada por los bahai, que han sido la primera religión en apoyar el estado mundial”.

Se trata aquí de un universalismo, nuevamente extremo y ligado a una forma sectaria, muy minoritaria de islamismo que tiene más que ver con una secta propia de los países del primer mundo que con un subproducto de la religión islámica. La postura contrario, la ortodoxia masónica, se encuentra en otro lugar. La Gran Logia de Chile, por ejemplo, con filiación directa y regular procedente de la Gran Logia de Londres, escribe: “Aun cuando la Masonería es universalista, cada Gran Logia es independiente y soberana en su respectivo territorio jurisdiccional”. Es el viejo tema de “el masón libre en la logia libre”[12] a la que se une la prohibición de hablar de negocios, política y religión en estas logias, lo que excluye un pronunciamiento a favor de un universalismo militante y extremo. Otra web, esta vez vinculada a masones españoles, precisa todavía mucho más esta idea: la masonería no es un partido político, ni pretende serlo. Se anota, por ejemplo: Un partido es una parcialidad o coligación entre personas que siguen una misma opinión política o interés. Así pues, cada partido defiende su facción política, opinión o causa. La masonería no es una parcialidad. Podríamos afirmar que es una universalidad de ámbito y vocación universalista. Este universalismo hace que el masón adopte necesariamente una concepción planetaria para enfocar los distintos temas”[13]. Seguimos en el terreno del universalismo relativo propio de las obediencias regulares.

Como último ejemplo, contradictorio con el anterior, citaremos un texto procedente de un masón irregular, próximo a sectas y grupos seudoespiritualistas. Comentando la obra de Albert Pike, uno de los recopiladores del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, el autor -anónimo- cita un texto de este prominente masón extraído de su obra Morals and Dogma, dice lo siguiente acerca de la religión y la masonería: “Toda Logia Masónica es un templo de religión; y sus enseñanzas son instrucción en religión”, añadiendo de su propia cosecha: “Según los intérpretes contemporáneos de la masonería, ahora ha ocupado su lugar lógico como la unificadora de todas las religiones”[14].

De esta dinámica es imposible salir: para la mayoría de obediencias irregulares la masonería es “una religión” que está por encima de las religiones. Aspira a formar una “religión mundial” y todos los actos que se realizan en logia son, en esencia, actos religiosos. Es lo que podemos llamar un “universalismo de proyección” en la cual el masón irregular afirma que su objetivo es fundar una religión mundial que hoy no existe, pero que existirá en el futuro gracias al espíritu difundido desde las logias. No vale la pena seguir mostrando textos. Lo visto hasta ahora es suficiente como para considerar que hemos demostrado nuestra tesis.

Ya hemos expresado cómo se filtraron estas influencias en la masonería tradicional: por ósmosis con el ocultismo decimonónico de un lado que penetró especialmente en las obediencias irregulares, en distintos grados y dosis y luego por creación de obediencias expresas -la co-Masonería- manadas directamente de círculos ocultistas, y que por tanto portaban en sí mismas el lastre incorporado.

En cuanto a las logias regulares, su intención dista mucho de crear una nueva religión. Investigan el pensamiento esotérico y simbólico, pero en su herméutica no encontramos elementos que hubieran aparecido en el ocultismo del siglo XIX. Se interesan por la cábala tradicional, también por un estudio esotérico de la Biblia y de los Evangelios, pero en absoluto aspiran a crear una nueva forma religiosa, hasta el punto de prohibir discusiones sobre religión en el interior de las logias. Buscan cristalizar una unión fraternal entre los iniciados y evitar los conflictos entre las naciones (ya hemos explicado que como sugestión procedente del período de las grandes conflagraciones). Es un universalismo relativo, atenuado. En absoluto mesiánico que, sí lo es, sin embargo, en otras obediencias influidas por el ocultismo.

 



[1] Diccionario de la lengua española © 2005 Espasa-Calpe S.A., Madrid.

[2] http://www.wikipedia.org/es

[3] Véase sobre este tema El Rey del Mundo - René Guenon - Ediciones Alternativa - Barcelona 1988

[4] Informe sobre la masonería. Junta de Misiones Domésticas. http://www.4truth.net/atf/cf/%7BB04280C2-8E12-41EB-B937-7857F80AF61D%7D/A%20Report%20on%20Freemasonry-SP.pdf

[5] http://www.scg33esp.org/supremo/reaa.htm

[6] La masonería adquiere máxima influencia en el siglo XIX y prolonga su momento álgido durante la primera mitad del XX: esta época está marcada por una sucesión continua de guerras y conflictos internacionales especialmente en Occidente, marco privilegiado de implantación masónica: guerras napoleónicas, guerra de secesión americana, guerra franco-alemana, Primer y Segunda Guerras Mundiales, etc., por tanto no es raro que la “memoria histórica” de la masonería le induzca a conjurar el riesgo de conflictos de este tipo -que en la era nuclear serían definitivos- mediante al “universalismo” y a la “fraternidad” entre naciones

[7] Especialmente en Los dioses de los indoeuropeos (1971) Editorial Seix Barral, S.AGeorges; véase la biografía y los contenidos de su pensamiento en es.geocities.com/sucellus23/652.htm

[8] Tal como demuestra Julius Evola El misterio del Grial y la Tradición gibelina del Imperio, Plaza & Janés, Barcelona 1977, especialmente en su Tercera Parte.

[9] Logia Centauro 996 - centauro996.wordpress.com

[14] http://www.geocities.com/pasteda/mason.htm

(c) Ernesto Milà Rodríguez - infokrisis - infokrisis@yahoo.es - http://infokrisis.blogia.com

 

 

La doctrina excéntrica (III de VI). El pensamiento de Alicia... de Alice Ann Bailey (Parte D)

Infokrisis.- En 1982 Van Morrison lanzaba un álbum anómalo en su producción: Beautiful Vision que incluía un par de canciones extrañas. En general se trata de un álbum anómalo: la carátula es cósmica, muestra galaxias y constelaciones en la noche del espacio exterior, iluminada solamente por un haz con los colores del Arco Iris, la música que contiene es etérea. La canción que abre el álbum, Celtic Ray, alude a los antiguos celtas y a los mensajes que le llegan al cantante de ellos desde la antigüedad. Algunas de las letras están inspiradas en un libro, no menos extraño, de una teósofa, Alice Ann Bailey, como El morador en el umbral y Ella me da la religión… Era la forma en la que Van Morrison agradecía a A.A.B. (que prcticaba la costumbre teosófica de citar a los “maestros” mediante sus iniciales) su contribución a la New Age. Y es raro, porque para el 99’99% de la población, ni el nombre, ni las siglas de esta teósofa son conocidas. Ni siquiera en el medio ocultista la obra de Alice Ann Bailey se conocen con cierto detalle, lo cual sorprende todavía más porque su obra ha podido influir en las más altas instancias del poder mundial. Y lo vamos a demostrar.

Faltaría explicar qué pinta en un trabajo sobre las fuentes doctrinales del zapaterismo una teósofa cantada por Van Morrison y que apenas conocerán en España no más de dos o tres mil personas, la mayoría superficialmente. Pues bien, cuando acaben de leer este capítulo entenderán el motivo. La obra de Alice Ann Bailey es polimorfa. Contiene todas las locuras y lugares comunes propios de la teosofía, sin embargo, tiene otra vertiente en la que analiza los problemas de nuestro tiempo y aporta soluciones y puntos de vista… que son exactamente iguales a los empleados habitualmente por Rodríguez Zapatero. A.A.B. y su marido Foster Bailey, eran miembros de la Co-Masonería inglesa y fueron extremadamente influyentes en las primeras generaciones de funcionarios de las Naciones Unidas. Y también estamos en condiciones de demostrar esta influencia. Así pues no estamos hablando de balarrasas ocultistas, sino de individuos que supieron dar una envoltura de credibilidad y actualidad a unas concepciones, de por sí, enfermizas. Y esto les permitió alcanzar una influencia subterránea en determinados organismos internacionales. No hay absolutamente ninguna afirmación que A.A.B. vertiera sobre la actualidad de su tiempo que no tenga su paralelismo en alguna afirmación de Zapatero o en lo esencial de su pensamiento político. A decir, verdad, alguien que ignore la biografía de Zapatero pero que compare su pensamiento político con los escritos políticos de A.A.B., percibirá que ambos son hijos de la misma inspiración. La teósofa escribió sus obras en la primera mitad del siglo XX, y sus discípulos han seguido escribiendo en su línea hasta nuestros días. Las obras y folletos de este entorno son regularmente difundidas por Lucis Trust[1], empresa de nombre mucho más tranquilizador que el nombre que ostentó originariamente: Lucifer Trust. No creemos que Zapatero haya leído lo esencial de la obra de A.A.B., pero sí es muy posible que se haya nutrido en su juventud de los folletos difundidos por este círculo (que se distribuyen en lengua castellana gratuitamente desde Nueva York y Ginebra). Porque ahí si que las coincidencias alcanzan el 100%.

Había nacido en 1880 en el Manchester victoriano. Su nombre de soltera era Alice Ann la Trobe-Bateman. Su familia era extremadamente acaudalada y, a pesar de quedar huérfana muy joven, nunca conoció problemas económicos. Probablemente esa tranquilidad económica que siempre le acompañó, le permitió tener velidades ocultistas desde los catorce años. Muy joven ingresó en la Sociedad Teosófica cuando esta se encontraba en el punto más álgido. Su formación fue completamente teosófica y nunca rompió con la enseñanza teosófica a pesar de separarse de la sociedad en un momento dado de su vida.

Algo le debió ocurrir cuando tenía 15 años. Era el 30 de junio de 1895, fecha en la que según dijo, se encontró por primera vez con “el Maestro Koot Hoomi”. No era raro. Eran los años en los que la Blavatsky decía estar en contacto con los “mahatmas” o “guías del universo”, uno de los cuales era Koot Hoomi. Para la Blavatsky se trataba de entidades desencarnadas, “espirituales”, que regían los destinos de la humanidad. Koot Hoomi fue la entidad que inspiró mediante “escritura automática” las obras de la Blavatsky. Al menos si hemos de creerla. En aquel tiempo, algunos pintores y dibujantes habían realizado aproximaciones y esbozos del rostro de Koot Hoomi, tal como lo describió la Blavatsky. No es raro que entre adolescentes extremadamente sensibles, muy influidas por el ocultismo blavatskyano, cualquier crisis interior, o experiencia mística provocada por los cambios hormonales de la adolescencia o por traumatismos, imaginaran contactar con ese ser etéreo y evanescente cuyos rostro conocían por los cuadros y grabados que lucían en las paredes de la Sociedad Teosófica y en sus publicaciones. De lo que está claro es que Koot Hoomi, como máximo, era una proyección mental de la Blavatsky y que jamás tuvo existencia real, ni en el plano material, ni en el espiritual. En un momento dado de su vida –que sus seguidores se niegan a reconocer- la propia Blavatsky, en un momento de flaqueza, reconoció que toda la historia de los “mahatmas” había sido una invención forazada para que le hicieran más caso…

Pero si H.P.B. (la Blavatsky), no pudo hablar con los “mahatmas”, ni por supuesto con Koot Hoomi, es igualmente improbable que A.A.B. lo consiguiera. E igualmente improbable es que gracias a Koot Hoomi conociera a otro de los “mahatmas”, Djwahal Khul, llamado también “El Tibetano”, que sería quien le dictaría por clariaudiencia (facultad, real o supuesta, de oír voces interiores) los 40 tomos de sus obras y unos cuantos cientos de conferencias. Sea como fuere, lo importante no es la posibilidad real o no del contacto con estos “mahatmas”, sino la obra que surgió de su pluma. Desde el hombre primitivo se sabe que un pensamiento si quiere ser indiscutible e inapelable debe, necesariamente, tener una referencia superior a lo humano, y en esta trascendencia encuentra su legitimidad. Ni H.P.B., ni A.A.B., inventaron nada nuevo. De todas formas ambas mujeres eran radicalmente diferentes.

La Bailey jamás conoció problemas económicos. Su marido Foster Bailey también gozaba de una posición económica privilegiada. A diferencia de la Blavatsky, verdadera aventura, que frecuentemente se encontró en situaciones de penuria económica y que fue condenada por fraude en varias ocasiones, A.A.B. no tenía necesidad de mentir para reclutar adeptos, tampoco necesitaba engañar a sus seguidores para obtener su favor y sus donaciones. Y, sin embargo, A.A.B. durante treinta años afirmó haber estado en contacto con “El tibetano” y con Koot Hoomi. ¿Por qué lo haría? Sus seguidores nos responden: por que era cierto, hablaba con los “mahatmas” como usted y yo hablamos con el vecino del quinto… Pero esto excede los límites de la razón. Así pues tiene que haber alguna explicación. ¿Se trataba de una alucinación inducida? ¿quizás autoinducida? Es lo más probable y lo entenderán cuando describamos las prácticas de estas escuelas.

 

En la vida de Alice Ann Bailey hay un antes y un después de haber cumplido quince años. Después de esa edad ya no hay grandes sobresaltos en su vida… si no se considera sobresalto escribir algo así como 10.000 páginas al dictado de una voz interior. Antes de esa edad había sido una suicida precoz. En tres ocasiones –cuenta- intentó quitarse la vida: a los 5 años, a los 11 y poco antes de cumplir los 15. Fue a esa edad, cuando dijo haber encontrado a Koot Hoomi. Lo describe así: “… un hombre alto, vestido con ropa europea y que llevaba un turbante”. El desconocido le instó a que desarrollara el autocontrol en vistas a las pruebas que le esperaban en la vida. Tomó al desconocido por Jesús, pero más tarde lo identificó como el “Maestro Koot Hoomi”.

En esa época todavía no había descubierto su vocación teosófica. Trabajó en diferentes obras cristianas para jóvenes. Luego trabajo como voluntaria en los Hogares para Soldados que había creado la filántropa Sra. Elise Sandes. Dirigía sesiones y sermones evangélicos. Viajó a la India por cuenta de esta fundación para hacerse cargo de varios establecimientos de la misma. En esa época era una fanática propagandista evangélica.

Contrajo matrimonio en primeras nupcias con un tal Walter Evans, pastor evangélico, con el que apenas estuvo casada unos años. Declaró que él la maltrataba e incluso que la había arrojado por las escaleras. En 1915 se separaron y, pocos meses después, se unió a la Sociedad Teosófica. En 1918 ingresó en la Sección Esotérica de la Sociedad. Se instaló en Krotona (Hollywood), convirtiéndose en responsable de la revista de la sociedad en EEUU. Fue en la sede de la Sociedad Teosófica en donde reconoció en un cuadro que representaba a Koot Moomi, la imagen del desconocido que la había visitado a los 15 años. Entonces supo de quién se trataba.

Fue en 1919 cuando conoció a “El Tibetano” con quien todo contacto se desarrolló por clariaudiencia (o presunta tal). Ella cuenta que se resistió inicialmente a reconocer la veracidad de los mensajes, pero ante la insistencia, comenzó a anotar los contenidos de los mensajes y así siguió durante los siguientes treinta años que dieron como resultado en torno a cuarenta libros.

En 1919 conoció a Foster Bailey, un co-masón de grado 32º, con el que se casaría.

 

Sus partidarios prefieren pasar de soslayo que fue teósofa y que toda esta historia de los “mahatmas” es de raigambre teosófica. Gustan considerarla como algo completamente aparte de la teosofía y de cualquier otra secta religiosa. Su idea, dicen, era la unificación mundial y que a un gobierno mundial correspondiera también una religión mundial. Ella sería el heraldo de esa religión que surgiría de una especie de ecumenismo.

Los primeros capítulos de su primera obra, Iniciación humana y solar, fueron publicados en El Theosophist, pero inmediatamente surgieron las discrepancias. La Bailey iba por otros derroteros que no eran los de Annie Besant. Como se sabe la teosofía había sido puesta en marcha por la Blavatsky para “estudiar las religiones”. Con Annie Besant, la teosofía pasó a ser una religión más. Esto iba en contra del sentimiento de A.A.B. que junto a su marido y a otras teósofas norteamericanas crearon el movimiento “Volver a Blavatsky” incluido todavía dentro de la Sociedad Teosófica. Intentaron que la sociedad rectificara sus puntos de vista, pero solamente consiguieron hacerse expulsar.

El fondo de la cuestión era que para Annie Besant, Leadbeater, Weedgwood y demás dirigentes de la sociedad, resultaba extremadamente peligroso admitir que otra persona fuera de su círculo íntimo pudiera tener relaciones con los “mahatmas” y, por tanto, contar con una sanción superior para justificar sus posiciones. Hasta ese momento en la sociedad se hacía lo que Leadbeater decía que le aconsejaban los “mahatmas” que, obviamente, coincidía con sus intereses personales y sus aficiones lúbricas. A.A.B. siempre afirmó que su obra continuaba la de la blavatsky y que muchas de sus obras no eran más que precisiones, puntualizaciones y ampliaciones de Isis sin Velo y de La Doctrina Secreta.

En 1922 fundó una revista esotérica, The Beacon, de carácter trimestral publicado por Lucifer Trust que luego pasaría ser la editorial Lucis Trust. Urgida por “El tibetano” constituyó acto seguido, en 1923, su primera organización, la Escuela Arcana, a la que seguiría Buena Voluntad Mundial y luego Triángulos.

La Escuela Arcana –que todavía existe- se limita a realizar cursos por correspondencia sobre temática teosófica. La temática es ocultista hasta lo incomprensible, pero también pretende dar normas de comportamiento práctico para la vida cotidiana de los discípulos. Los objetivos de la escuela son tres: servir a la humanidad, cooperar con el Plan de la Jerarquía espiritual que dirige el planeta (los “ahatmas”) y desarrollar los poderes del alma del discípulo. Estos objetivos se alcanzan mediante tres vías: la meditación oculta, el estudio y el servicio a la humanidad. El discípulo aprendería a “conocerse a sí mismo” y conocer cuál es su lugar en el “servicio” (esta idea del servicio es completamente teosófica pero adquiere una tonalidad especial en A.A.B.).

Una característica de esta escuela es que sus miembros, separados por la distancia y sin conocerse entre sí en muchos casos, realizan prácticas de meditación grupal. El mismo día, a la misma hora solar, todos los miembros de la escuela meditan sobre determinados problemas intentando influir sobre la evolución del mundo y la emergencia de una nueva cultura. El estudiante debe aprender a evolucionar sólo, por sí mismo. La Escuela Arcana es, en definitiva, el círculo esotérica de Lucis Trust.

Buena Voluntad Mundial fue registrado como “organización sin ánimo e lucro” en los EEUU en 1922. su finalidad es “establecer correctas relaciones humanas y resolver los problemas de la humanidad por medio del poder constructor de la buena Voluntad”. Y aquí lo esotérico está completamente ausente. Se respira otro aroma. No hay ni complicadas doctrinas esotéricas, ni nexo alguno que lleve a la teosofía. Casi diríamos que la función de este grupo es puramente mundana. Se dedican a promover lo que llaman “Amor en Acción”. Los ocho puntos de B.V.M. son tan abiertos que sería difícil no compartirlos:

- Estimular y alentar a los hombres y mujeres de buena voluntad en todas las partes del mundo, a establecer relaciones justas entre las raas, las naciones y las clases sociales, por medio de la comprensión inteligente y las vinculaciones apropiedas.

- Ayudar a los hombres y mujeres de buena voluntad a estudiar los problemas mundiales y aplicar eficazmente a esos problemas la buena voluntad y la cooperación en vistas del bien común.

- Cooperar con otras organizaciones a la construcción activa de la unidad mundial, la estabilización y las relaciones humanas justas.

- Tener siempre disponibles informaciones recientes sobre las actividades constructivas en los principales campos de la actividad humana, por medio de la publicación trimestral de un boletín.

- Realizar un Comentario de buena Voluntad sobre temas de interés mundial.

- Ayudar a instaurar la buena voluntad como nota fundamental de la nueva civilización.

- Establecer una lista de direcciones de hombres y mujeres de buena voluntad del mundo entero.

- Favorecer la acción de las Naciones Unidas y de las Agencias especializadas, como síntesis de la mayor esperanza de un mundo unido y en paz.

Cuando el filósofo Gustavo Bueno calificó a la doctrina de Rodríguez Zapatero como “el pensamiento de Alicia”, sin duda ignoraba cuál era la “madre de Alicia”. En efecto, este pensamiento coincide con la doctrina Zapatero en un 100%. De hecho, el zapaterismo no va mucho más allá de estos principios. Se trata de un pensamiento voluntarista que confía ciegamente –hasta la ceguera patológica- en la bondad del ser humano, en la virtud del pensamiento positivo, en las cualidades del diálogo para solventar los problemas mundiales en un marco universalista y globalizado en el que NNUU y sus agencias constituyen un embrión de gobierno mundial. A la vista de esto, a la pregunta de qué es el zapaterismo podemos contesar: “es el pensamiento de A.A.B., amputado de su vertiente esotérica”. Efectivamente, es el “pensamiento de Alicia”, de Alice Ann Bailey…

El nacimiento de B.V.M. se vio favorecido por la aparición en EEUU y Europa de un fuerte sentimiento pacifista en las entreguerras. Pero ese pacifismo era relativo; a diferencia de la mayoría de grupos pacifistas, B.V.M., no dudó en tomar partido decidido por los Aliados al estallar la II Guerra Mundial. Esto le hizo romper con el resto del movimiento pacifista que propugnaba una neutralidad total de los EEUU en la II Guerra Mundial. La recompensa vino en 1945, tras la creación de NNUU, cuando B.V.M. fue reconocido por esta organización internacional.

Alice Ann Bailey murió en 1949, poco después de ver su sueño consumado: las Naciones Unidas representaban, por fín, el embrión de gobierno mundial que evitaría todas las guerras. Le sustituyó al frente de Lucis Trust y de sus organizaciones, su marido, Foster. Éste, a su vez, murió en 1979 cuando se había caso con Mary Bailey quien lo sustituyó al frente de la organización.

Vamos a ver como esta influencia de Lucis Trust en la escena internacional no es un mito, sino una realidad constatable y fácilmente demostrable. Algo que haremos en el próximo capítulo.

© Ernesto Milá Rodríguez – Infokrisis – Infokrisis@yahoo.es – http://infokrisis.blogia.com



[1] http://www.lucistrust.org

 

La doctrina excéntrica (III de VI). Mundo gay en el arranque de cierta masonería (Parte C)

Infokrisis.- Los viejos usos de la masonería obligan a que, como hemos dicho, solamente puedan acceder a la orden “hombres libres y de buenas costumbres”, ni esclavos, ni mujeres. Pero aún más restricciones. Las Constituciones de Anderson añaden que “El Aprendiz debe ser también un joven perfecto, sin mutilaciones, sin vicios corporales, nacido de padres honrados”. Y también se ha mantenido en algunas logias el llamado “Ostracismo de la Letra B” que prohíbe el acceso a las logias a los tartamudo (en francés bègues), bastardos, tuertos (en francés, borgne), bizcos, cojos (en francés boiteux), jorobados (en francés bussus) y bribones[1]. ¿Y en cuanto a la homosexualidad?

Robert Ambelain dice textualmente respecto a este tema: “Si el homosexual se inclina hacia el ocultismo, tendrá tendencia a caer en el satanismo o, al menos, en la magia inferior. La Organización Mundial de la Salud clasifica a la homosexualidad entre las enfermedades, con los peligros que comporta desde el punto de vista fisiológico, sobre todo en los sujetos masculinos (especialmente con el nuevo virus del terrible SIDA, sin olvidar las clásicas enfermedades venéreas, ahora en recrudescencia porque los hombres que se prostituyen no se someten a higiene vigilada como hacen las profesionales). Está causada astrológicamente por la conjunción de Venus y Saturno en oposición a Neptuno, o por la conjunción de Venus y Neptuno en oposición a Saturno, o por la conjunción de Saturno con el Sol, la Luna y uno de los Nudos lunares. La bisexualidad no entra al parecer en esta categoría. El homosexual suele ser inestable, indeciso, egoísta, avaro, intransigente, orgulloso, celoso aunque infiel, ingrato”.[2]

Tal es la opinión de un prominente masón, fallecido no hace mucho, en una obra escrita en la liberal Francia en 1985. El historial masónico de Robert Ambelain es impresionante[3] (a pesar de un innegable olor sulfuroso), así que su opinión es autorizada… y es la que hemos trascrito. Así pues, no hay duda. Es posible –es seguro- que la masonería será tolerante en relación con las afinidades sexuales de cada cual… pero, en absoluto ningún masón será impulsado por la Orden a realizar una campaña a favor de igualar los derechos de las parejas gays a los derechos de los matrimonios heterosexuales. Como siempre, hay un “pero”…

El pero es que todo esto afecta a las obediencias mayoritarias, pero, como siempre, existen masonerías irregulares y disidentes que enfatizan precisamente sobre los derechos de los homosexuales, en especial, porque cuentan entre sus filas con un porcentaje significativo de gays.

Hay incluso una obediencia que fue promovida mayoritariamente por homosexuales: la Co-Masonería vinculada a la Sociedad Teosófica y que ha constituido (con tensiones frecuentes) la rama anglosajona del Derecho Humano. De hecho ”Co-Masonería” indica plano de igualdad entre hombre y mujer. De lo que no se dice nada es de homosexualidad, pero la biografía de los fundadores es suficientemente significativa, como veremos.

En otras obediencias, ha habido innovaciones en los últimos años. En marzo de 2005 se produjo en una logia de París una de esos problemas inesperados que acompañan a la modernidad. Un miembro del taller había pasado por un tratamiento hormonal y el quirófano hizo aquello que la química no alcanzó a hacer: transformarlo de hombre a mujer. ¿Cómo debía actuar una logia que solamente admitía la iniciación masculina? En 2006 se anunciaba que la Gran Logia Femenina de Francia había celebrado una “Ceremonia Solemne de Reconocimiento Conyugal” de una pareja de lesbianas. Una de las cónyuges, una mujer de sesenta años, explicaba: "Hacemos esto porque este gesto tiene alcance político, para aproximarnos a la igualdad de los derechos, sin ninguna exclusiva" añadiendo: "No hay persecución o exclusión en la GLFF, pero no hay posición al respecto y nuestra idea busca que la pareja homosexual sea normalizada". Lo que indicaba que el episodio se trataba de una excepción.

En un artículo comentando este episodio[4], el autor se hacía el siguiente cálculo: “si el 5% de la humanidad es homosexual –dato dudoso- existirán 325 millones de  homosexuales y si se mantiene la proporción en el interior de la Orden sobre una base mundial de de 4 o 5 millones de Masones, el numero de homosexuales en ella debe estar entre 200.000 y 250.000… Siendo muy cuestionable todas estas cifras (la densidad de homosexuales de San Francisco no es la misma que la de Tombuctú…), lo cierto es que siempre han existido masones homosexuales (Oscar Wilde entre otros), pero también es cierto que nunca han hecho “pastoral” de su condición sexual.

La masonería francesa es la que más lejos ha llegado respecto a la integración de homosexuales llegando a constituir una asociación, Les Enfants de Cambacérès[5], integrada por homosexuales de ambos géneros que pertenecen a diferentes Grandes Logias. Así mismo existe también una asociación de Masones gays y lesbianas de diferentes Grandes Logias denominada "Fraternite Arc en Ciel"[6] (Fraternidad Arco Iris) creada en el mes de mayo de 2003. Podríamos seguir. En el mundo anglosajón existen movimientos similares.

En general, la tolerancia masónica hace que se contemple la homosexualidad como un signo de los tiempos. Ahora bien, no es frecuente –sino más bien todo lo contrario- que la masonería sea particularmente proclive a la homosexualidad. A fin de cuentas cumple sus funciones de männerbunde, sociedad de hombres, y no es ningún secreto donde terminan frecuentemente los congresos internacionales de altos grados y las juergas –no precisamente gays- que siguen a muchas tenidas. Nada de todo es criticable, e incluso recuerda que la masonería está formada por seres humanos con ganas de diversión y que experimentan como cualquier mortal impulsos y la acción de las hormonas. Raro sería lo contrario. Pero dentro de la masonería actual, ni existe un porcentaje de masones homosexuales en número superior al que pueda haber en la sociedad, ni la masonería como institución –al menos en lo que se refiere a las obediencias regulares- manifiesta, aparentemente, excesivo interés en la defensa de las distintas modalidades sexuales.

También aquí hemos puesto un especial énfasis en aludir a “obediencias regulares”. En cuanto a las irregulares hay de todo. El caso de la Co-Masonería anglosajona es significativo.

Hemos dicho que la Co-Masonería nació íntimamente vinculada a la teosofía. Desde el arranque de la Sociedad Teosófica siempre había existido un nexo conductor que llevaba de la Blavatsky y de su entorno a las obediencias masónicas irregulares. René Guénon lo reconoce: “Paralelamente a su obra religiosa –o más bien, seudorreligiosa-, que hemos expuesto, Mme. Besant realizó otra de carácter ent3ramente diverso: una obra masónica. Vimos ya que desde sus orígenes hubo en la Sociedad Teosófica muchos masones y también alrededor de la misma sociedad” Y, más adelante, añade: “se trataba de relaciones puramente individuales, que no atañían ni comprometían a ninguna organización masónica y jamás hubo otras entre la Sociedad Teosófica y la masonería “regular” o formal”[7].

Solamente unas líneas más adelante, Guénon realiza la precisión fundamental, a la vista de que los teósofos insisten en identificar su organización con la masonería: “es preciso hacer las distinciones necesarias y decir de qué masonería están hablando”. Luego, correctamente, identifica entre obediencias “regulares” e “irregulares”. Y son estas últimas con las que el teosofismo tiene relaciones estrechas incluso hoy. Guénon alude a “una de las figuras más curiosas de esta masonería “irregular”, el inglés John Yarker, fallecido en 1913; autor de numerosas obras sobre la historia y el simbolismo masónico; temas acerca de los que profesaba ideas muy particulares”. Yarker era miembro de la Societas Rosicruciana in Amnglia, había sido amigo de Manzini y Garibaldi y en ese ambiente conoció a la Blavatsky que lo nombró miembro de honor de la Sociedad Teosófica. A cambio –dice Guénon- Yarker le concedió el título de Princesa Coronada (el más elevado de los grados de adopción del Rito de Menphis-Misraïm del que Yarker era Gran Hierofante que afirmaba hacer recibido de Garibaldi.

De todas formas hay que reconocer que el trabajo masónico de la Blavatsky es irrelevante y palidece junto a su obra de promoción y lanzamiento de la Sociedad Teosófica. Cuando, ésta fue sustituida por Annie Besant, las cosas fueron mucho más allá. La Besant antes de incorporarse al teosofismo había militado durante mucho en el sufragismo del que llegó a ser un exponente importante. Así como la Blavatsky se había contentado con desempeñar un papel honorífico en la masonería, no iba a ocurrir lo mismo con Annie Besant. En tanto que antigua sufragista no consideraba que la condición de masón “adoptada” fuera la conviniera a la mujer dentro de las logias. Guénon rubrica: “precisaba una Masonería que admitiera a las mujeres en pie de absoluta igualdad con los hombres”[8].

Por eso, cuando ocurrió en Francia el episodio protagonizado por Maria Deraismés y Georges Martin, Annie Besant pidió su ingreso en esta obediencia. En efecto, a partir de ahí su carrera fue meteórica dentro alcanzando las más altas funciones: fue Venerable de Honor de la Logia de Londres, fundó en Adyar (India) la logia Rising Sun; fue vicepresidente del Supremo Consejo Universal Mixto y delegada nacional del mismo Consejo para Gran Bretaña. Utilizando ese cargo organizó la rama inglesa del Derecho Humano con el nombre de Co-Masonería, llegando a adquirir las logias implantadas en el mundo anglosajón y en sus dependencias coloniales una relativa autonomía en relación al resto de logias afiliadas al Supremo Consejo Universal Mixto. Annie Besant, reformó los estatutos afirmando que los adaptaba a la mentalidad anglosajona que, en realidad, alteró los rituales establecidos por el Derecho Humano y que, desde entonces ha sido considerada como fuente de tensiones en la obediencia. Los masones franceses originarios eran más bien ateos, republicanos, progresistas, librepensadores y orientados a la izquierda, mientras que el contingente dirigido por la Besant –la Co-Masonería- era seudoespiritualista y ocultista.

En el año 1913 la Co-Masonería Británica actuaba más o menos independientemente habiendo nombrado a un Gran Maestre, la propia Besant, asistida por Ursula Bright, su amiga íntima. El Gran Secretario era James I. Wodgwood, así mismo teósofo; el representante para las Indias Orientales era Francesca Arundale tía de otro prominente miembro de la Sociedad Teosófica. En 1909, la Besant había fundado la logia madre de esta obediencia en América, en la ciudad de Chicago y la vicepresidencia de la federación americana de la Co-Masonería, Alida de Leeuw era así mismo teósofa). Sin embargo, la teosofía francesa no consiguió ser hegemónica en relación a los herederos de Georges Martin.

Annie Besant se había cuidado de que las obsesiones ocultistas que la movían no emergieran inmediatamente en la Co-Masonería. Sabía que si lo hacía se enfrentaría a George Martin quien había escrito: “La Orden Masónica Mixta Internacional esl a primera potencia masónica mixta, filosófica, progresista y filantrópica, organizada y constituida en el mundo, que se eleva por encima de todas las preocupaciones de ideas filosóficas o religiosas que puedan profesar los que pieden llegar a ser miembros”. No había pues lugar para el ocultismo. Martín añadía: “La Orden quiere interesarse principalmente en los intereses vitales del ser humano sobre la tierra; quiere estudiar sobre todo en sus Templos los medios para relizar la Paz entre todos los pueblos y la justicia social, que permitirá a todos los humanos gozar durante su vida de la mayor suma posible de felicidad moral así como también de bienestar material”. Concluía: “No ateniéndose a ninguna revelación divina y afirmando bien alto que no es más que una emanación de la razón humana, esta institución fraternal no es dogmática ni racionalista”[9].

El punto común entre el Derecho Humano y la Co-Masonería, lo que facilitó que pudieran trabajar juntas en una misma estructura era, solamente, la iniciación de la mujer y la defensa de las logias mixtas. La Co-Masonería declaraba: “La Orden de la Co-Masonería Universal, fundada sobre la Libertad de Pensamiento, la Unidad, la Moral, la Caridad, la Justicia, la Tolerancia y la Fraternidad, está abierta a los hombres y a las mujeres, sin distinción de raza y religión”[10]. Era evidente que la Besant jugaba con dos barajas. En esas mismas fechas y en el curso de una misiva a W.T. Otead, había escrito: “Lo que queremos hacer ahora es embarcarnos en un período constructivo, durante el cual la Sociedad Teosófica se esforzará por hacer de sí el centro de la Religión del mundo, Religión de la que el Budismo, el Cristianismo, el Islamismo, y todas las demás sectas sean partes integrantes… Efectivamente, consideramos, y no sin sólido fundamento para nuestra creencia, que solamente nosotros representamos a la Iglesia Universal ecléctica y realmente católica, reconociendo como hermanos y como fieles a todos aquellos que, bajo cualquier forma de culto, buscan la verdad y la justicia”[11].

Lo que Annie Besant, sobre las huellas de la Blavatsky aspiraba era a construir una nueva religión mundial y la Co-Masonería debería ser una institución auxiliar. Dos de los principales exponentes de la Co-Masonería eran dos altos cargos de la teosofía sobre los que vale la pena que nos detengamos ligeramente: Charles Leadbeater y James I. Wedgwood.

Ambos eran dos almas gemelas. Homosexuales, extravagantes, aficionados a la magia, al ocultismo, y que “ejercían una influencia inexplicable en mujeres maduras”[12]. Wedgwood frecuentó durante un tiempo a la Iglesia Ortodoxa e incluso contempló ordenarse, pero finalmente ingresó en la Sociedad Teosófica de la que llegó a ser secretario de su sección inglesa en 1911. Como a Leadbeater, le gustaban los rituales, contra más floridos mejor. Y en este terreno la teosofía era más bien limitada. Así que tanto Leadbeater como Wedgwood crearon organizaciones satélites de la teosofía en las que dieron rienda suelta a su imaginación. El segundo había formado una obediencia rosacruciana, prólija en rituales que tuvo poco éxito, así que no dudó en afiliarse a la Co-Masonería en donde alcanzó a dirigir la rama inglesa. Sin embargo, las quejas se multiplicaron contra él. Acusado de sodomía, algunas logias teosóficas exigieron una investigación. La policía entró en juego y un detective privado constató que Wedgwood “había sido visto visitando no menos de dieciocho urinarios públicos en el término de dos horas”. Otro tanto le ocurrió a Charles Leadbeater, así mismo miembro de la Sociedad Teosófica y de la Co-Masonería (además de “obispo” de la Iglesia Católica Liberal, otro círculo en la órbita teosófica) que conoció idénticos problemas en su retiro australiano. El propio padre de Krisnhamurti protestó en varias ocasiones –y por vía judicial- contra los “afectos” que recibían sus dos hijos, Krishna y su hermano Nitya, del “obispo” Leadbeater. En cuanto a Wedgwood siguió llevando una vida de excesos hasta el final de sus días, hasta 1951 cuando falleció en el centro teosófico de Tekels Park, completamente loco.

Leadbeater había sido acusado de pederastía por primera vez en 1906. El hijo del secretario de la Sección Esotérica de la Teosofía en Chicago confesó que Leadbeater le había enseñado a masturbarse. A esta acusación se sumó otra en idéntica dirección. Luego estaba la vox populi, la rumorología interior de la Sociedad Teosófica y los detalles del comportamiento de Leadbeater que lo configuraban como una persona irresistiblemente atraída por menores de edad de su propio sexo. La atracción que sintió por Jiddu Krisnhamurti y por su hermano Nitya, seguramente entran en la misma dirección. A raíz de todo esto, Leadbeater presentó su dimisión de la Sociedad Teosófica a la que volvería en 1909, cuando Annie Besant asumió la dirección. Hubo más casos de denuncias por corrupción de menores y sodomía.

Annie Besant se negó a tomar medidas contra Leadbeater y contra Wedgwood y, siempre los consideró “poderosos iniciados”. Además, en determinados medios ocultistas la acusación de homosexualidad se justifica con una base “esotérica”. ¿Acaso no habían sido acusados los caballeros templarios de sodomía? ¿acaso uno de los rituales de su iniciación en el “capítulo secreto” del Temple no implica el dar un beso en la base de la columna vertebral? Esta polémica dura todavía hoy y es frecuente reencontrarla en medios ocultistas. En la Co-Masonería está todavía mucho más presente en la medida en que la propia Annie Besant declaró que su intención era que la masonería retornara a la “pureza originaria” (o, al menos, a lo que ella consideraba como tal) y eso implicaba, necesariamente, entroncar con la iniciación templaria. Para pederastas contumaces como Leadbeater y Wedgwood ahí estaba la excusa para justificar sus devaneos detrás de adolescentes: a fin de cuentas se trataba solamente de activar el “despertar de la kundalini”, la serpiente de energía que, albergada mientras está dormida en la base de la columna vertebral (cerca del ano, por ser más claros), es preciso despertar mediante el “aliento de vida” que el iniciador e hierofante de la ceremonia da al aspirante a la iniciación.

Así pues, los Weedgood y los Leadbeater facilitaron una justificación “mágica” para su homosexualidad. A esto se unía el carácter particularmente liberal y heterodoxo de la Co-Masonería cuya razón de ser era, precisamente, el tema de si la mujer tenía derecho o no a la iniciación. La Co-Masonería, en la línea con el Derecho Humano, afirmaban que sí… y, a partir de ahí, era también previsible que el paso siguiente consistiera en plantear si el “tercer y cuarto sexos” podían también tener derecho a la iniciación. Ya hemos visto que algunos no se limitaron a contestar afirmativamente, sino que crearon verdaderos círculos homosexuales dentro de la teosofía y de sus grupos periféricos. En cuanto a Annie Besant, la notoria sufragista, da la sensación de que se vio rebasada por sus ayudantes en el seno de la Co-Masonería. Peter Washington cuenta que deploraba los excesos sexuales de Leadbeater y de Weedgood, pero los ayudó hasta el final. Weedgoof, disfrazado con el uniforme de obispo de la Iglesia Católica Liberal pasó la frontera belga con el puño del báculo obispal lleno de cocaína, su otra afición[13]. El por qué de su silencio es algo inexplicable  que solamente ella podría iluminar. Lo cierto es que en las logias anglosajonas de la Co-Masonería la homosexualidad estuvo presente y justificada por razones “mágicas”, en una época en la que cuando las otras obediencias masónicas exigían como condiciones para la iniciación “ser hombre libre y de buenas costumbres”, daban por sentado que la homosexualidad no era una de esas buenas costumbres.

En la actualidad, la influencia de la Co-Masonería es muy pequeña, incluso en el medio anglosajón. No parece probable que esta obediencia irregular haya estado en condiciones de impulsar el formidable movimiento de apoyo a las reivindicaciones gays que se ha propagado por todo Occidente, a partir de los EEUU,  y del que el presidente de gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero es máximo valedor en nuestro país.

Nuestra excursión a lo largo de la masonería irregular nos ha servido para ponernos en la pista de determinadas organizaciones ocultistas, como la Sociedad Teosófica y algunos de sus círculos concéntricos, como la Co-Masonería, pero no nos ha permitido realizar ningún tránsito de lo global a lo particular de la situación que vive en la actualidad nuestro país con la ingeniería social del zapaterismo.

Para aproximarnos algo más al tema será necesario estudiar a otra organización de la misma familia creada por Alice Ann Bailey con el concurso de su marido, Foster Bailey, ambos, por cierto, miembros de la Co-Masonería anglosajona. Tal será el objetivo del próximo capítulo.



[1] Expuesto por Roberto Ambelain en El secreto de la masonería, Martínez Roca, Barcelona 1985, págs. 163 y sigs.

[2] Id., pág. 165.

[3] Robert Ambelain: nacido el 2 de septiembre de 1907, autor entre 1936 y 1985 de 42 obras. Su historial masónico se resume así: entra en masonería el 26 de marzo de 1939 en la logia “Jerusalem des Vallées Égiptiennes”, Rito de Menphis-Misraïm; recibido como Compañero y Maestro en 1941, clandestinamente en la Francia ocupada por los alemanes; estableció una logia clandestina en su propio domicilio; recibe todos los grados del Rito Escocés Antinuo y Aceptado: recibe todos los grados del Rito Escocés Rectificado; recibe todos los grados del Rito Antinuo y Primitivo de Menphis-Misraïm hasta el 95º; recibe todos los grados del Rito Sueco; Gran Maestre ad vital para Francia del Rito de Menphis-Misraïm, el de Gran Maestre Mundial Adjunto (1943-44) y el de Gran Maestre Mundial de dicho rito (1962). Así mismo participó en diversas organizaciones esotéricas occidentales como la Orden Kabalística de la Rosacruz, la Iglesia Gnóstica Apostólica y la Orden Martinista, en las que fue alto dignatario. A lo que se unen media docena de títulos honorarios y, finalmente, el título que más le honra de “compañero imaginero adoptado del Tour de France” concedido por la Unión Compagnonique des Devoirs Unis con el nombre compagnico de Parisien-la-Liberté. Falleció en 1997.

 

[5] En honor del masón homosexual Jean Jacques Regis de Cambacérès, (1753 – 1824), Duque de Parma, Archiduque del Imperio, segundo cónsul de la República francesa, después del 18 de brumario, de 1799, académico de Francia, uno de los autores principales del Código Civil Napoleónico. En su vida Masónica desempeñó la dignidad de Gran Maestro Adjunto del Gran Oriente de Francia desde 1806 hasta 1815, periodo en el cual se crearon 1.200 Logias bajo su influencia, y además fue miembro activo del Supremo Consejo del Rito Escocés Antiguo y Aceptado. La asociación tiene un sitio web: Los Hijos de Cambaceres" en su página web http://www.cambaceres.net/

[7] El Teosofismo, René Guenon, Editorial Obelisco, Barcelona 1987, pág. 245 y sigs.

[8] Ibidem, pág. 249.

[9] La Lumière Maçonique, noviembre-diciembre de 1912, pág.472 y 473.

[10] El Teosofismo, op. cit., pág. 253

[11] Citado por Guenon, op. cit., pág 254.

[12] Peter Washington, El Mandril de la Blavatsky, Ediciones Destino, Barcelona 1993, pág. 142.

[13] El Mandril… op. cit., pág. 257.

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La doctrina excéntrica (III de VI). Los frutos de la obsesión feminista (Parte B)

Infokrisis.- El feminismo ocupa en la ecuación personal de Rodríguez Zapatero un lugar excepcional. El por qué es así constituye uno de los grandes misterios que rodean al presidente del gobierno. Algunos hemos pensado que sus profesiones de fe feministas serían solamente una forma oportunista de ganar votos. No sería la única. Las declaraciones e iniciativas a favor de los homosexuales irían dentro de la misma lógica, intentando generar “reservas de votos”. De hecho era una práctica que los socialistas llevaban a cabo desde la campaña electoral de 1983 cuando garantizaron la despenalización del porro atrayendo, solamente por eso, varios cientos de miles de votos. Luego, en las elecciones siguientes aprendieron a jugar con los miedos de la tercera edad, garantizando que la oposición pretendía reducirles las pensiones y, ya con Zapatero en el poder, dada la escasa distancia que le separaba en aquel momento del PP, era lógico que “trabajara” a grupos sociales concretos –feministas y homosexuales- en vistas a aumentar la distancia.

¿Era sólo eso? Llegado a un punto abandonamos esa idea. Las grades obras de ingeniería social las abordó el zapaterismo en la primera parte de la legislatura 2004-8. Si, realmente, las reformas legislativas las hubiera realizado de cara a obtener réditos electorales, se habrían realizado en la segunda mitad de la legislatura y, preferentemente, pocos meses antes de las elecciones. Como se sabe, la memoria de los electores es corta y solo son capaces de recordar aquello que antecede inmediatamente a la convocatoria electoral. Así pues, no es por oportunismo por lo que Zapatero hizo aprobar la ley de violencia doméstica, la ley de igualdad o la ley del divorcio exprés. Pero, si no era por mero oportunismo, ¿por qué iba a ser? Es simple: por convencimiento. Le corría prisa, literalmente, abordar esas reformas por la sencilla razón de que la médula central de su proyecto (mucho más de reforma social que político) tendía a una “feminización” de la sociedad española aumentando los derechos de la mujer por encima, incluso, de la noción de igualdad, forzando situaciones de paridad, generando discriminaciones positivas y, finalmente, torpedeando el concepto de familia tradicional en la que, hombre y mujer ocupan roles diferenciados.

Dicho con otras palabras: la obsesión feminista de Zapatero no es ni una actitud electoral ni una pose destinada a ganar el favor de determinadas bolsas de electores; es, simplemente, una necesidad vivida y experimentada sinceramente por el presidente del gobierno, situada más allá de toda medida, mucho más allá de las necesidades de la mujer y de la sociedad española y que va muy por delante de las formas más extremas de progresismo manifestadas hasta entonces.

Esa obsesión está ausente –repetimos, ausente- de las distintas formas de socialismo y de socialdemocracia existentes en Europa. Es algo que atañe solamente al zapaterismo y que, por sí mismo, lo configura como un fenómeno radicalmente diferente de otras formas de izquierda europea. Ciertamente, algunas de las ideas de la “doctrina Zapatero” son muy parecidas a las de la extrema-izquierda, pero, así como en Francia este sector político ha demostrado cierto dinamismo (especialmente los grupos trotskystas y neotrotskystas), en España todas estas ideas llamadas “arco iris” han surgido por descomposición del Partido Comunista en el seno de Izquierda Unida. En efecto, caído el marxismo como método de análisis y como ideología política, la estructura del PCE quedó huérfana de ideología. La crisis se extendió al desdoblamiento electoral del PCE, IU que, poco a poco se fue deshaciendo de los temas clásicos de la izquierda comunista y asumiendo reivindicaciones de distintos “grupos sociales”: ecologistas, feministas, homosexuales, lesbianas, transexuales, okupas, etc… No fue tanto por convencimiento como por sustitución y por ocupación del espacio vacío dejado por el marxismo, por lo que toda esta temática –no muy diferente de la “doctrina Zapatero”- constituye los leit-motivs de IU.

Pero esta interpretación no vale para el socialismo español: la “tercera vía” de Blair, la socialdemocracia renovada por Schröder, la izquierda italiana o francesa, podían haber aportado ideas la zapaterismo en lugar de las obsesiones que ha manifestado. En el zapaterismo estas obsesiones no son, como en IU propias de la inanición electoral o de la quiebra del modelo ideológico, sino que emergen espontáneamente como fruto de una reflexión personal cuya naturaleza desconocemos.

Zapatero es algo completamente diferente de la izquierda europea. El hecho de que la izquierda europea esté hoy en crisis y en los bancos de la oposición, mientras que Zapatero sigue en el gobierno, no es decir mucho. Es imposible olvidar que la baraka de Zapatero le hizo ganar las elecciones de 2004 a causa de un atentado terrorista que costó 192 muertos y que en 2008 volvió a ganar amparado en una mentira (la inexistencia de crisis económica) y en un muerto (el exconcejal socialista asesinado por ETA que hizo olvidar dos años de errores de política antiterrorista y legitimó el volte face de Zapatero tras la ruptura de la tregua). Por algún motivo, Zapatero no ha gobernado por méritos propios… sino por las circunstancias en 2004 y en 2008 al tener la habilidad de negar lo que la mayoría de analistas veían que se echaba encima: una crisis económica de dimensiones nunca antes vistas.

Y también aquí vale la pena preguntarse si Zapatero negaba la existencia de una crisis porque estaba mal asesorado y tenía el convencimiento de que no existía, o si se trataba de negarla nuevamente por oportunismo electoral. Debemos reconocer que hasta 100 días después de las elecciones creíamos que, efectivamente, Zapatero nos había mentido a todos y que, conociendo las dimensiones y la envergadura de la crisis, la había negado brillantemente para evitar que el electorado le diera la espalda… Pero no era así: si se hubiera tratado de eso, al día siguiente de cerrarse las urnas, habría abordado medidas para la contención de la crisis. Y eso no se hizo. El gobierno permaneció como ensimismado y autista durante cuatro meses después de cerrarse las urnas, contribuyendo con su pasividad y tancredismo a agravar una situación ya de por sí gravísima. ¿Por qué se había llegado a esta situación? Al final de este capítulo daremos la explicación integrada en otra más amplia.

Lo que vamos a exponer a continuación es una hipótesis de trabajo para entender la naturaleza de las obsesiones doctrinales del zapaterismo. La conclusión a la que hemos llegado es terrible: a fin de cuentas, si Zapatero fuera un mero político oportunista cuyas actitudes y gesticulaciones están en función de los réditos electorales que puedan proveer, estaríamos ante un político al uso. Lo peor no es eso: que no son actitudes, que son creencias. Lo que se le puede reprochar a José María Aznar es que se dejara arrastrar a la foto de las Azores y a defender la existencia de las armas de destrucción y el papel desestabilizador de Saddam Husseim. No lo hizo por ningún motivo especial… salvo porque se lo creía. Y esto es lo más terrible: que dos presidentes del gobierno español, los dos últimos, han sido capaces de abordar importantes iniciativas simplemente porque “creían”, al margen de toda lógica, al margen de cualquier sentido común, al margen de los datos objetivos, que eran las actitudes “justas”. O por decirlo con más claridad: hemos estado y estamos gobernados por alucinados… alucinados, no “iluminados”, ni mucho menos “iluministas”. Díganme si no es terrible…

 

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En el siglo XVIII, emergieron grupos masónicos y ocultistas que, o bien atribuían una importancia extrema a la integración de la mujer en vida de las logias, o simplemente, fueron dirigidos por mujeres, o bien por homosexuales. En el primer caso encontramos a la masonería del Derecho Humano, una obediencia irregular y a la Co-Masonería que inicialmente fue su rama anglosajona constituida a partir de la Sociedad Teosófica. En el segundo caso encontramos, precisamente, a toda una constelación de grupos ocultistas de nuevo cuyo formados e inspirados por mujeres –dentro de lo que Julius Evola y René Guénon han llamado “espiritualidad telúrica”- o bien por homosexuales. Dentro de las primeras cabe citar a Helena Petrovna Blavatsky, Annie Besant, Alice Ann Bailey, y entre los segundos, especialmente, a Leadbeater y Wedgwood. Para el que no esté familiarizado con el ocultismo resumiremos el rol de cada uno:

- Helena Petrovna Blavatsky.- fundadora de la Sociedad Teosófica, inicialmente espiritista, afirmaba estar en contacto con entidades espirituales que eran los “guías del universo” y de los cuales recibía inspiración para escribir sus obras. Perteneció al carbonarismo italiano y fue miembro de adopción de la masonería del rito de Menphis-Misraïm.

- Annie Besant.- notoria sufragista, vinculada a la Sociedad Fabiana y que, bruscamente se orientó hacia la teosofía asumiendo su dirección tras el fallecimiento de la Blavatsky. Durante su mandato al frente de la Sociedad Teosófica se constituyeron distintas entidades satelizadas por ésta, una de ellas fue la Co-Masonería. Así mismo, Annie Besant fue miembro de la franc-masonería.

- Alice Ann Bailey.- inicialmente miembro de la Sociedad Teosófica de la que se separó más adelante sin enfrentarse a ella. Decía recibir mensajes de una de las “entidades que guían el mundo” que, por clariaudiencia, le inspiraba sus copiosas obras. Fundo Lucis Trust que está en el origen de otros tres grupos: Buena Voluntad Mundial, Triángulos y Servidores del Mundo.

- James Indgall Wedgood.- miembro de la Sociedad Teosófica y primer presidente de la Iglesia Católica Liberal vinculada a la teosofía, fue iniciado en la Co-Masonería por Leadbeater.Conainómano y homosexual.

- Charles Leadbeater.- miembro de la Sociedad Teosófica, homosexual y pederasta, descubrió a Krisnhamurti a quien la teosofía presentó como “el nuevo guía del mundo”. Decía estar en contacto con los “guías del universo” y recibir mensajes de ellos. Miembro de la Co-Masonería.

Es difícil en todos estos personajes saber el lugar que ocupan en su ecuación personal la charlatanería, la credulidad, el autoengaño y la fatuidad. Realmente, a poco que se entra en contacto con sus escritos resulta absolutamente imposible descifrar la madeja y saber exactamente de qué están hablando. Hace años, en el curso de un programa en Onda Rambla de Barcelona, un viejo teósofo me dijo: “Llevo cincuenta años estudiando la teosofía y todavía no sé qué es exactamente…”. Lo decía sin un atisbo de queja y sin sombra de duda sobre su fe: para él no saber lo que era la teosofía era un estímulo para seguir estudiándola. Esta psicología está presente en todos los miembros de a pie de la Sociedad Teosófica y de sus muchos hijos: solamente pueden entender los textos teosóficos aquellos que “alcanzar un cierto grado de desarrollo espiritual”… coartada que sirve para justificar cualquier absurdo.

A pesar de su excentricidad y de su absoluta falta de fundamentos, la Teosofía tuvo un éxito extraordinario en las últimas décadas del siglo XIX y hasta el inicio del primer tercio del siglo XX. Su declive se inició cuando Charles Leadbeater quedó sorprendido en una playa próxima a Adyar (sede de la Sociedad Teosófica en la India) cuando vio a un joven dotado de una “prodigiosa aura luminosa” (Leadbeater pasaba por saber “leer el aura”). Se trataba del hijo de un funcionario hundú de la sociedad que resulto ser Jiddu Krisnhamurti. Leadbeater afirmó que los “guías del universo” le habían comunicado el prodigioso destino del joven llamado a ser “guía de la humanidad”. A partir de ese momento, la Sociedad Teosófica, presidida por Annie Besant, se dedicó en cuerpo y alma a promover “el advenimiento del guía del mundo”. Sin embargo, en 1929, ante miles de seguidores llegados a Ommen (Holanda), Krisnhamurti renunció formalmente a ese papel, rechazó el ocultismo y disolvió la Orden de la Estrella de Oriente, creada por la teosofía par ampararlo.

El hecho de que Krisnhamuti siguiera luego su rol de gurú hasta su muerte en los años 80 sería irrelevante sino fuera porque se trató de uno de los más conspicuos representantes del movimiento que se conoce como New Age. De hecho, a pesar de que la Teosofía jamás se repuso de la defección de Krisnhamurti, Alice Ann Bailey y sus organizaciones terminaron por sustituir a la teosofía y sus orientaciones y escritos tienen un gran peso en ese movimiento polimorfo.

En cuanto a la Co-Masonería, está completamente ausente de la New Age, salvo por el hecho de que a través de la teosofía y de sus variantes, asumidas por determinadas feministas norteamericanas de los sesenta que luego evolucionaron hacia el pensamiento mágico, creando una especie de feminismo místico, conseguirían conferir a este movimiento una indudable patina de telurismo. Es relativamente frecuente que, al referirse a la New Age, muchos estudiosos lo califiquen de “espiritualidad femenina”. Por nuestra parte preferimos utilizar la palabra “telurismo” para referirnos a este rasgo de la New Age.

Así pues, en nuestra búsqueda de los modelos doctrinales de Zapatero, necesariamente, tenemos que realizar una excursión por el intrincado mundo de esas sectas y por las ideas que sostienen. A poco que emprendamos esta aventura intelectual advertiremos una preocupante similitud entre las “obsesiones” de la doctrina Zapatero y los temas centrales de estos grupos. ¿Bastarán tales similitudes para establecer una influencia directa de estos grupos sobre Zapatero? Todo dependerá del número de coincidencias; a partir de cierto número de ellas podremos sospechas de una influencia directa.

 

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1. El Derecho Humano y la obsesión feminista

Con la creación del Droit Humaine (Derecho Humano) aparece la primera organización de lo que se ha dado en llamar “masonería mixta”, es decir, aquella forma de masonería que admite a hombre y mujer en plano de igualdad. El problema se desencadenó cuando una logia del Gran Oriente de Francia quiso hacer valer el principio de autonomía de las logias expresado en la frase: “El masón libre, en la logia libre”, lo que interpretado de una manera radical implicaba el que cada logia “libre” y compuesta por masones “libres” podía adoptar cualquier iniciativa que considerase que podía contribuir a realizar los ideales de la masonería. A este principio se agarraron los miembros de la logia Les Libres Penseurs de la pequeña ciudad de Pecq, dirigidos por Georges Martin, cuando éste se empezó –y consiguió- iniciar con plenitud de derechos a un mujer, Maria Deraimés. La polémica terminó con la suspensión de la Logia que entró en disidencia y constituyó en torno suyo una nueva obediencia que ostentaría el nombre de Droit Humain. Hoy todavía, el Droit Humain sigue teniendo un lujoso templo en el número 5 de la rue Jules Breton de París y cuenta con delegaciones en los principales países europeos. En el mundo anglosajón, la irrupción fue distinta como veremos.

En 1880, doce logias disidentes de la Gran Logia Central de Francia, constituyeron la Gran Logia Simbólica que practicaba el Rito Escocés. Algunas de estas logias en su constitución aprobaron iniciar a mujeres, pero hasta dos años después no se habían enfrentado a la realidad de tener que iniciar a una mujer. Fue la logia “Les Libres Penseur” de Pecq la que primero tuvo la oportunidad de aceptar e iniciar a Marie Deraismes, una mujer notable. A partir de aquí, se produjo una crisis que terminó con la constitución del Droit Humain.

Todo ocurrió, aparentemente, por casualidad. Era una escritora feminista que gozaba de cierta fama, cuando fue invitada a pronunciar una conferencia en la reunión del Gran Oriente de Francia. El éxito de su intervención fue tremendo y volvió a ser invitada en otras ocasiones a dar conferencias sobre los más diversos temas. Desde 1869 era una consumada militante feminista que presidía la Asociación para los Derechos de las Mujeres. Al caer el Segundo Imperio funda la Sociedad para la Mejora de la Suerte de la Mujer y multiplica sus conferencias pidiendo el sufragio universal y participando en iniciativas anticlericales organizadas por el Gran Oriente de Francia.

Era cuestión de tiempo que alguna logia irregular le propusiera entrar y, todo el problema era, si se atrevería a mantenerla solamente como “masón de adopción” o sería iniciada de pleno derecho. En enero de 1882, la logia Les Libres penseurs de Pecq manifestaron su intención de iniciarla, pero la Gran Logia Simbólica lo prohibió en función de los “viejos usos”. Fue entonces cuando Jacques Martin, venerable maestre de la logia, hizo valer el principio del “masón libre en la logia logia libre”, rechazando el acuerdo. El 14 de enero de 1882, Marie Deraismés recibió la iniciación, pero, para evitar complicaciones a la logia “entró en letargo” inmediatamente. Sin embargo Georges Martin siguió siendo un fanático feminista partidario de la entrada de las mujeres en la masonería. También para Martin, el feminismo y los derechos de la mujer constituían una verdadera obsesión.

Martin era un hombre de acusada personalidad, vehemente y extremista que defendía sus principios enérgicamente y sin temor a las consecuencias que pudiera acarrear. Había sido iniciado en 1879 en la logia Unión y Beneficencia de la Gran Logia de Francia y de ahí pasó a la Gran Logia Simbólica de la que fue uno de los impulsores. Tras la iniciación de Marie Deraismés, a partir de 1890 dedicó todos sus esfuerzos a lograr que la masonería abriera las puertas a la mujer.

Ambos, Deraismés y Martin, constituyeron en 1893 una primera logia mixta cuyo nombre completo era Gran Logia Simbólica Escocesa “El Derecho Humano” que se convertiria en “logia madre” de la Orden Masónica Mixta Internacional “El Derecho Humano”. A partir de entonces y hasta 1916 trabajó solamente para implantar el Derecho Humano a nivel internacional.

Entre su iniciación en 1882 y 1893, Marie Deraismés no había permanecido inactiva. Seguía frecuentando organizaciones feministas y entre sus miembros recluta  dieciséis damas de extracción burguesa a las que iniciará en la masonería asistida por Martin. Se trató, en cualquier casi, de iniciaciones completamente irregulares: el 14 de marzo como “aprendices”; diez días después como “compañeras”; y una semana después, el 1º de abril, como “maestras”… Pasa a ser llamada “Venerable fundadora” y el 4 de abril elige a los oficiales de logia y procede a la redacción de la Constitución de la nueva obediencia: el Derecho Humano. La muerte prematura en 1894 interrumpirá su tarea que, sin embargo, será desarrollada por Georges Martin en los siguientes 20 años. Cuando éste muera, el Droit Humain está ya suficientemente asentado en toda Europa occidental.

Por primera vez aparece una obediencia masónica –irregular, pero vinculada a la masonería al fin y al cabo- cuya primera reivindicación es la igualdad del hombre y de la mujer, primero ante la iniciación masónica y luego en la sociedad. En la Constitución de la Orden Masónica Mixta Internacional “El Derecho Humano”, en su artículo primero se lee: “El Derecho Humano afirma la igualdad del Hombre y de la Mujer. Proclamando el Derecho Humano, la Orden quiere que abarque toda la tierra beneficiando, de forma igual, la justicia social, en una humanidad organizada en sociedades libres y fraternas”. En el artículo segundo se reconoce que la orden está comuesta por “franc-masones, hombres y mujeres fraternalmente unidos sin distinción de orden racial, étnico, filosófico o religioso, la Orden se impone para alcanzar este fin un método ritual y simbólico, gracias a la cual sus miembros edifican su Templo para la perfección y la gloria de la Humanidad”. El articulo siguiente insiste en el “respeto de la laicidad, de todas las creencias relativas a la eternidad o a la no eternidad de la vida espiritual, sus miembros buscan ante todo realizar sobre la tierra y para todos los humanos el máximo de desarrollo moral, intelectual y espiritual, condición inicial para alcanzar la felicidad de cada individuo”. El último punto es significativo. “El Derecho Humano no profesa ningún dogma”.

En España, tras la prohibición de la masonería durante el período franquista, apareció el Derecho Humano en Barcelona de la mano de algunos miembros del socialismo catalán. Habitualmente el nombre público que se suele dar como más representativo de esta obediencia es el del ex sendor catalán Rudolf Guerra, no vamos a ser nosotros quienes demos otros nombres a pesar de que en el marco de la Biblioteca Arús hemos podido conocer a miembros de todas las obediencias, incluida el Derecho Humano. Mantiene logia abierta en Barcelona y desde febrero de 1980 en Madrid (Libertad nº 1328) que tras un período de crisis se reactivaría en noviembre de 2007, cuando ya existía otra logia de esta obediencia en la capital. Existen otras logias en Oviedo (Progreso 1850), Obradoiro en Galicia, Caballeros de la Noche y Constancia en Zaragoza, Alba de Levante en Valencia, El Nivel en Alicante, Gran Trígono en Murcia, Igualdad Madrid y la Ferrer Guardia en Barcelona.

Así pues, ya hemos encontrado una masonería irregular, pero masonería al fin y al cabo, cuyos ideales si están más en sintonía con las obsesiones más llamativas del zapaterismo. No se trata solamente de que el Derecho Humano haya tenido su origen en una polémica feminista sino, como hemos visto, la cuestión central es que en su declaración de intenciones insiste:

- igualdad de la mujer

- igualdad de raza

- laicidad

- ausencia de dogmas

Es cierto que otras obediencias masónicas incluyen entre sus principios algunos de estos… pero nunca de manera tan radical, sino más bien templada (ya hemos visto que la igualdad racial es relativa en la masonería, especialmente en la americana, que mantiene logias separadas para negros y una masonería específica para judíos). Ni siquiera existe unanimidad en lo relativo a la laicidad. Y en cuanto a la ausencia de dogmas no es precisamente lo que acompaña a la masonería regular que está asentada sobre una dogmática que tiene poco que envidiar a la de la Iglesia. El Derecho Humano es algo aparte en el elenco de obediencias masónicas. Y lo sorprendente es que sus principios encajan perfectamente con la “doctrina Zapatero”.

Ahora bien… de la misma forma que no existe constancia de la afiliación de Zapatero a ninguna logia regular, no es menos cierto que tampoco existen datos que permitan vincular al presidente a una obediencia irregular. Pero sí es rigurosamente cierto que los principios de la Orden Mixta del Derecho Humano se adaptan como un guante a lo que hemos llamado “la doctrina Zapatero”.

Sin embargo, también pueden establecerse otras afinidades…

 

(c) Ernesto Milá - infokrisis - infokrisis@yahoo.es - http://infokrisis.blogiacom

 

 

La doctrina excéntrica (III de VI). La obsesión feminista de Zapatero y su origen (Parte A)

Infokrisis.- En noviembre de 2006, Zapatero presentó una proposición no de ley en el Congreso en la que pedía que las políticas de igualdad tuvieran también su reflejo en la acuñación de moneda… Hubiera valido más que en aquel momento, el gobierno hubiera reaccionado ante las subidas del euribor y ante el encarecimiento del petróleo o, incluso, en la construcción que ya por entonces ralentizaba su actividad. Sin embargo, la proposición de ley, no solamente incluía la petición en general, sino que descendía al terreno de lo concreto, proponiendo que la primera imagen que se acuñara de una mujer fuera la de Clara Campoamor[1]. Hay que decir, que Clara Campoamor, además de ser defensora del voto femenina durante la II República, pertenecía también a la Logia “Reivindicación” de Madrid, dependiente del Gran Oriente de España: Maria Salmerón, Mercedes Hidalgo, Isabel Martínez, Consuelo Vergés, Esmeralda Castells, Rosalia Goy, Rosario Amat y Encarnación Chamizo.

A decir verdad, es falso que no hayan aparecido en las acuñaciones de moneda figuras femeninas. Desde la diosa Venus hasta los billetes de 100 pesetas del período franquista que incluidas representaciones de Julio Romero de Torres. Así que, precedentes no faltaban. Pero Zapatero consideraba que las imágenes de mujeres acuñadas en las monedas han tenido únicamente un carácter alegórico. Por eso consideran que “ha llegado la hora de que los euros recojan figuras femeninas reales”. Así pues, se trata de "reconocer la aportación de las mujeres a los cambios sociales y políticos y quebrar la organización social basada en un concepto patriarcal que excluye a las mujeres".

La noticia pasó desapercibida incluso para los medios antimasónicos españoles y ni Jiménez Losantos, ni Ricardo de la Cierva, ni César Vidal, se preocuparon de ella. Y no es raro: de hecho, se trataba de una noticia completamente instrascendente. Intrascendente, pero significativa.

En efecto, el hecho de que, desde el siglo XIX ya circularan monedas y billetes con imágenes femeninas (la de Isabel II, mujer “real”, sin ir más lejos) convierte a esta iniciativa en excéntrica. De lo que se trataba era que se acuñara a una mujer “real”, caracterizada por su lucha feminista y, además miembro de la masonería, la que figurara en las monedas de euro. Y, además, había prisa. Sería sólo una estupidez, sino fuera una obsesión.

El zapaterismo ha hecho de la igualdad de los sexos una obsesión… justamente cuando los sexos ya están igualados cultural, social y jurídicamente. Esta obsesión, no es nueva, está presente ya desde el siglo XIX con las sufragistas, la novedad estriba en que nunca como ahora era tan inútil –a la vista de que la mujer tiene esa igualdad- y nunca como ahora gobierno alguno ha enfatizado tanto el tema.

Pues bien, a pesar de que Clara Campeamos fuera feminista y miembro de la masonería y a pesar de que muchas prominentes sufragistas pertenecieran a movimientos reivindicativos desde el siglo XIX hasta nuestros días, vinculados a grupos ocultistas o a la masonería, podemos afirmar que para el sector mayoritario de la masonería, el feminismo nunca ha estado ni entre sus preocupaciones, ni mucho menos entre sus obsesiones. Ni ayer, ni hoy.

Todavía hoy la masonería se resiste a admitir a mujer en las logias y si lo hace es casi siempre con condiciones. Clara Campoamor no fue miembro de la masonería de pleno derecho, sino “masón de adopción”, miembro, pues de “logias de adopción”, es decir, logias formadas por mujeres bajo la tutela de varones. Las primeras logias de adopción aparecieron en Francia en 1774. El 11 de marzo de 1775 “levantó columnas” la Logia Candor, inscrita en el Gran Oriente de Francia cuyo cuadro de “grandes maestras” incluye a las mujeres socialmente más relevantes de su tiempo, incluyendo a la duquesa de Boubon y a la emperatriz Josefina.

La masonería no solamente no es particularmente feminista sino que, para colmo, las obediencias mayoritarias no permiten la iniciación de la mujer. ¿Por qué? Por tradición. En la medida en que la masonería deriva por alteraciones diversas de las antiguas hermandades de constructores, y al estar los oficios ejercidos solamente por “hombres libres y de buenas costumbres”, las mujeres quedaban excluidas. Pero no completamente. En las sociedades tradicionales existía una completa división de funciones y a la mujer le tocaba el mantenimiento del hogar y la educación de los hijos. En la antigua masonería de los oficios en Francia (el “compagnnonage”), los aspirantes a maestros debían realizar el “tour de France”, es decir, viajar de una ciudad a otra en donde su hermandad tenía asentado un gremio, para conocer el mundo y aprender los secretos y las técnicas del oficio utilizadas en cada región. Cuando un “compagnnon” llegaba a otra ciudad, la encargada de alojarlo y presentarle a los maestros del gremio, era una mujer, a la que, por tradición se le llamaba “la Madre”.

Debía tratarse de una mujer casada, de buenas costumbres, cuya familia perteneciera desde generaciones a la hermandad; conocedora de los ritos de la asociación, ostentaba en la muñeca izquierda un brazalete distintivo de su rango y función. Aun hoy esta tradición no se ha perdido y el brazalete hecho de hierro forjado del que cuelgan doce medallas de oro con los emblemas de los doce oficios, se transmite de "Madre" a "Madre". Estas "Madres" tratan a los "compañeros" como a sus propios hijos, les enseñan educación y buenas costumbres, si al partir dejan alguna deuda, procuran pagarla, si tienen alguna necesidad verá de cubrirla. La "Madre" fue –y es aún, y lo podemos afirmar con conocimiento de causa-, sin duda, la institución más querida entre los "compañeros".

En la actualidad, algunas logias masónicas regulares han conservado esta figura como encargada de recoger los donativos y las limosnas al terminar las tenidas y, posteriormente, administrarlas. También en este caso debe tratarse de una mujer respetada por todos y que sea la esposa de algún miembro de la orden.

Pero, insistimos, la masonería regular nunca ha sido ni feminista, ni ha concedido un valor particular a las reivindicaciones feministas. Solamente en las últimas décadas del siglo XX, fue cediendo lentamente y sin mucho interés. Desde finales de los años 80, la Gran Logia de España permitía la presencia de mujeres en logias de adaptación que ni siquiera dependían de esta obediencia, sino de la Gran Logia Femenina de Francia constituida en 1952. A partir de esta logia, la masonería femenina se fue extendiendo por Europa e Iberoamérica. En la actualidad está constituida por 11.000 miembros y 360 logias en todo el mundo[2]. Fue a través de esta logia como la masonería femenina entró en España y pudo constituir la Gran Logia Femenina de España, el 4 de junio de 2005, que inicia su andadura con un total de 72 miembros activos de Barcelona, Gerona, Madrid, Asturias, Baleares, Valencia, Canarias, Murcia, Alicante, Huesca y Lérida. Entre 1984 y 2005, solamente en Catalunya fueron iniciadas unas 300 mujeres. Pero hay algo a matizar. La Gran Logia Femenina está vinculada a la Gran Logia de España y no todas las masonas están vinculadas a esta obediencia. Existen también la Gran Logia Simbólica y el Derecho Humano, de carácter mixto, si bien es cierto que se trata de obediencias minoritaria la primera y muy minoritaria la segunda. Asuncion Tejerina alcanzó el rango de Gran Maestra de la Logia Simbólica.

La GLFE da la sensación de haber encontrado dificultades en su expansión (en el momento de escribir estas líneas, la web de la logia hace 18 meses que no incluye renovacines), sin embargo se han podido abrir logias femeninas en Barcelona (Tipheret nº 7, Estrella del Norte nº 5 en Gijón, Manantial nº 4 en Madrid, Luz Primera nº 1 de Barcelona, Yetzirah de Montserrat nº 2, Asiyah del Canigó nº 3 de Gerona)

Sin embargo, la influencia de la GLFE es mínima y no puede deducirse de ella a la vista de su realidad organizativa, que tenga peso específico suficiente como para poder sugerir al gobierno la adaptación de iniciativa alguna. Por otra parte, a pesar de estar vinculada a la Gran Logia de España, no parece suscitar excesivos entusiasmos en esta obediencia que, al menos en lo psicológico, sigue vinculada a los viejos usos de la francmasonería y a la tradición de los oficios que excluía la iniciación femenina. A pesar de que la GLE haya hecho suyo –como no podía ser de otra manera- el viejo eslogan de “libertad, igualdad, fraternidad”, dista mucho de haber emprendido una “cruzada” por los derechos de la mujer, por la discriminación positiva y por favorecer la aparición de una legislación extremadamente proteccionista con respecto a la mujer.

La obsesión feminista del gobierno tiene otro origen.

Un feminismo más allá de toda medida

El hecho de que José Luis Rodríguez Zapatero sea más feminista que las feministas, que, frecuentemente desborde a las más radicales, no con declaraciones sino con leyes que, más que beneficiar los derechos de la mujer, lo que hacen es dinamitar las bases sobre las que se ha constituido la sociedad occidental desde el mundo clásico hasta nuestros días (igual dignidad de hombre y de mujer y diferenciación de roles entre el hombre y la mujer, conviviendo en el seno de una pareja mixta sobre la que se la sociedad asegura su pervivencia mediante la procreación).

Hay algo en Zapatero que está fuera de toda medida cuando alude a las reivindicaciones feministas, algo mucho más llamativo en este momento, en la medida en que la transformación social de los últimos 40 años ha implicado una igualdad efectiva entre hombre y mujer. Pero, para Zapatero, se diría que éste es uno de los grandes problemas de la España del siglo XX. Ni siquiera esta obsesión está tan acusada en el ánimo del socialismo. Es cierto que existe en el socialismo un deseo de igualdad, pero no una obsesión por la igualdad a toda costa.

Examinado desde el punto de vista puramente técnico, poco importa si al frente de los ministerios están hombres o están mujeres, de lo que se trata es de que sean dirigidos por gestores eficaces y con las ideas claras. Es evidente, en este sentido, que la inmensa mayoría de ministras de cuota nombradas por Zapatero se han revelado como un fiasco absoluto: no solamente desconocían el campo de gobierno que se les había asignado, sino que ni siquiera, estando a su frente, demostraron saber elegir a sus asesores y adoptar iniciativas correctas. En algunos casos, se ha tratado de verdaderos esperpentos que preferimos ni recordar, en otros de mujeres sin experiencia en gestión colocadas al frente de departamentos sobre los que lo ignoraban absolutamente todo. No es que las critiquemos por ser mujeres, es que las criticamos por que su gestión ha sido nula o negativa. Si Zapatero las ha colocado ahí es por que eran mujeres y respondían a la cuota que se había comprometido a introducir. Hay ministras cuya presencia en el gobierno resulta evidente que deriva de esta exigencia de cuota, mucho más que de la capacidad de gestión, que resulta absolutamente lacerante que áreas importantes de un país estén dirigidas por nulidades absolutas que lo ignoran todo sobre los departamentos que dirigen.

La Ley de Igualdad constituye un monumento, paradójicamente, a la desigualdad. Jurídicamente resulta absolutamente inaceptable que un crimen merezca una consideración diferente si lo ha cometido un hombre sobre una mujer o si ha ocurrido a la inversa. Es, igualmente, evidente que la Ley de Igualdad, no protege especialmente ni a los ancianos ni a los niños, que, en cualquier caso son más vulnerables que la mujer a la hora de los malos tratos. A poco que examinemos los argumentos de los defensores de la Ley de Igualdad, resulta sobrecogedor comprobar que son de una superficialidad tal que si esta ley ha podido afirmarse es porque ni la oposición dio la talla en su momento, ni los medios de comunicación se atrevieron a realizar las objeciones más elementales y razonables que se desprendían de su articulado.

Por otra parte, es falso que la violencia doméstica haya aumentado en España. Si ha aumentado en los últimos 12 años se ha debido solamente a que han entrado en nuestro país seis millones de inmigrantes de los cuales buena parte proceden de marcos geográficos y antropológicos que sí discriminan a la mujer (el mundo árabe y el mundo andino, en concreto). Si restamos la media del 40% de violencia doméstica que es protagonizada por inmigrantes, se ve perfectamente que los niveles de violencia contra la mujer están en España dentro de límites “normales”. Y son normales en la medida en que el fenómeno es imposible reducirlo a cero, porque toda sociedad tiene un porcentaje inevitable de psicópatas, alcohólicos, toxicómanos y agresivos que ni atienden a normas legislativas, ni a imperativos culturales. Y, sin embargo, la Ley de Violencia Doméstica no ha dicho absolutamente nada sobre la inmigración… en la medida en que la inmigración es otra de las obsesiones de Zapatero.

A todo esto hay que añadir bastante más. En la ideología del zapaterismo, la mujer es considerada como un ser en sí mismo, lo cual no es malo, el problema es que solamente es considerada así. No hay otro punto de vista más integrador, ni siquiera holísitco. En este sentido, la normativa legal aprobada por el zapaterismo ha tendido a favorecer la independencia de la mujer por encima del concepto de una mujer integrada en un matrimonio con fines de procreación. A fin de cuentas, es innegable que toda especie precisa asegurar la procreación y no solo esto: se trata, además, de tender a generar el marco más adecuado para la educación de los hijos. Mientras no se demuestre lo contrario –y no se ha demostrado- la familia es el marco que permite realizar esta tarea con más facilidad. Y cuando hablamos de familia nos referimos a un núcleo compuesto por padre y madre, hombre y mujer.

Las medidas adoptadas por el zapaterismo en la primera mitad de la legislatura 2004-8 fueron ilustrativos sobre sus intenciones: ley de matrimonios homosexuales y ley del divorcio express. La primera ley equiparaba los matrimonios heterosexuales con los homosexuales, desconociendo, contra la lógica más elemental, que tienen características completamente diferentes en la medida en el que uno permite la procreación y el otro no. Cuando se iguala de esta manera, lo que se está haciendo objetivamente es degradar. Porque si el matrimonio heterosexual sigue siendo el marco más adecuado para la procreación y la educación de los hijos, equipararlo a una pareja incapaz de ejercer la procreación y que no ofrece el marco más adecuado para la educación ni para su pervivencia de la especie, es, ni más ni menos, que degradar a uno y falsear el otro. Lo que se discute no es la legitimidad de las parejas homosexuales, lo que se discute es que se trata de matrimonios en plano de igualdad con las parejas heterosexuales.

En cuanto a la ley del divorcio espress debe de ser considerada como otro atentado a la familia. Facilitar hasta el divorcio hasta el punto de reducirlo a la presentación de una mera gestión administrativa es desconocer la realidad de la sociedad actual. Es frecuente que las parejas, especialmente jóvenes, discutan. La anterior ley del divorcio sabía algo más de la vida. Sabía que, muy frecuentemente, el efecto de una discusión desaparece con el paso de los días y la reconciliación está a la vuelta de la esquina. Sin embargo, la ley del divorcio exprés aprobada por Zapatero tiende a hacer cualquier discusión la piedra angular definitiva para una ruptura imposibilitando dar a la pareja un tiempo para que mediten y, eventualmente, rectifiquen y sentando las bases para que la primera discusión suponga una ruptura definitiva.

Por otra parte, es rigurosamente cierto que el gobierno no ha adoptado absolutamente ninguna medida para facilitar la procreación y la formación de parejas jóvenes. Es más, cuando ha adoptado una medida electoral como la concesión de 2.5000 euros por nuevo nacimiento (cantidad ridícula y que hubiera podido ser sustituida por una exención fiscal o por medidas… de discriminación positiva), se cuidó mucho al anunciarlo de añadir la coletilla de que esta cantidad era para quienes “pudieran aportar papeles”… es decir, la medida iba dirigida especialmente a inmigrantes que, en el momento actual tienen una tasa de reproducción muy superior a la de la población autóctona. En realidad, España es hoy uno de los países europeos con una tasa de natalidad más alta… gracias a la inmigración, la otra obsesión de ZP.

El gobierno, nada ha hecho para aprobar presupuestos de investigación que establezcan los motivos por los que la fertilidad de los varones se ha reducido a la mitad en apenas 20 años. No le ha preocupado en absoluto que los casos de esterilidad vayan aumentando y que una parte muy considerable de los nacimientos se deba a métodos de procreación artificiales. Estos temas que son fundamentales en cuanto que tiene que ver con la subsistencia de la especie no han merecido del gobierno ni una sola referencia, de ese mismo gobierno que votaba en bloque los derechos del simio o desterraba el 0 de las calificaciones escolares. Para el zapaterismo no hay problema: basta con una política de adopciones y con una política de natalidad que prime a la inmigración. Llama la atención que mientras las adopciones en orfanatos españoles sigue siendo una tarea sino imposible, sí dificilísima, el gobierno facilite las adopciones en los países más remotos: especialmente en Asia, África y América Latina. Dato a retener.

Cuando el gobierno ha impuesto incluso cuotas a la presencia femenina en los consejos de administración de las grandes empresas. Ha impuesto la igualdad en las listas electorales, a la fuerza, y sin consultar a la sociedad, e ignorando los malos resultados que ha dado para el propio partido socialista el sometimiento a la “cuota” (y dejando aparte lo humillante que es para las mujeres que ocupan un puesto de responsabilidad la sospecha de que están allí por cuota y no por sus capacidades). Ha negado subvención a colegios que no practican la coeducación, a pesar de que los estudios más recientes, indican que la coeducación es negativa para el aprendizaje tanto de niños como de niñas…

Sería imposible dar más datos sobre lo que, sin temor al exceso, puede ser calificada como la “obsesión feminista” de Zapatero. Esa obsesión no es la primera vez que emerge en la historia. De hecho, hunde sus raíces en el siglo XIX y tiene mucho que ver con cierta masonería irregular y con determinadas sociedades ocultistas.



[1] Europa Press, Madrid, 20 Noviembre 2006

[2] Los datos sobre la GLFM han sido extraídos de la web de la propia logia http://www.glff.org y de http://es.wikipedia.org/wiki/Gran_Logia_Femenina_de_Francia

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