Blogia
INFOKRISIS, el blog de Ernest Milà

Un barrio se hunde y la clase política con el "nou estatut"

Un  barrio se hunde y la clase política con el "nou estatut" Redacción.- Desde el lunes pasado, el barrio barcelonés de El Carmelo vive en perpetua angustia. Castigado en los años 90 por los efectos de la especulación inmobiliaria de los años 70 que obligó a derribar parte de los bloques al estar “enfermos” de aluminosis, ahora ve como sus bloques se caen a causa de la corrupción de las autoridades del ayuntamiento y la generalitat: pero, eso sí, Catalunya tendrá nuevo “estatut”.

El tema del nuevo “estatut” está completamente ausente del debate popular en Catalunya. No le interesa absolutamente a nadie. La población es perfectamente consciente de que el nivel de autonomía de que disfruta es razonable y no hace falta complicarse mucho la cabeza. Intuye, además, que esta discusión falsa sobre el nuevo “estatut”, no es más que un intento de la clase política catalana de obtener más recursos económicos, esto es, de depredar un poco más el erario público. Así pues, la población, ni entra ni sale en esta discusión ficticia generada por los partidos nacionalistas.

Pero bastaría con que la población sintiera que toda esta historia de la generalitat sirve para algo más que para que unos cuantos napoleones de baratillo satisfagan sus intereses. Y no. El alcalde Clos, preocupado se preocupa más por los fastos del Forum 2004, por bailar la samba el día que no toca, por anunciar que ese era “el Forum de los pobres” (cuando al entrada costaba 50 euros) y poco más. Cuando se agrietó el primer edificio, se limitó a una fugaz visita al barrio, tranquilizando a los vecinos y diciendo que no ocurría nada y que el Ayuntamiento estaba con ellos y velaría por restablecer la normalidad de las viviendas. Al día siguiente, el primer bloque afectado era derribado. Asunto resuelto. Los vecinos fueron alojados en hoteles y se les prometió que sólo sería por unos días.

Al día siguiente otros tres bloques se vieron afectados… y dos de ellos están en estos momentos condenados a ser derribados. Entre 900 y 1000 personas se encuentran en estos momentos en la calle, con sus viviendas, sus recuerdos, sus enseres, todo, absolutamente todas sus posesiones personales, perdidas. Y no sabemos si en los próximos días, aumentará el número de afectados.

¿Qué ha ocurrido? El barrio de El Carmelo está mal comunicado, es un barrio de emigrantes que llegaron de Andalucia, Extremadura, Galicia, Castilla, en los años 60 y 70. Los especuladores les vendieron pisos mal construidos, con materiales defectuosos, viguetas pretensadas con el alma metálica deficiente que, en veinte años, deshizo el revestivimiento de hormigón y convirtió las jácenas en pura mantequilla. Cuando Barcelona estrenaba Olimpiada… el barrio de El Carmelo debía apuntalar una veintena de bloques y varios de ellos no pudieron evitar ser derribados. En el siglo XXI, solamente unos pocos autobuses urbanos llegaban hasta El Carmelo que seguía siendo un barrio de difícil comunicación. Era mucho más importante llevar el metro hasta la zona olímpica, la Diagonal Mar, etc.

Y ahora, precisamente, se intentaba paliar ese aislamiento del barrio. Así pues se aprobó una prolongación de la línea 5 del Metro. Los estudios geológicos fueron escasos. La topografía del subsuelo apenas se estudió y, para colmo, se adoptó el “método austríaco” para abrir el túnel. Esto, al menos, es lo que han repetido una y mil veces esta última semana los responsables de la generalitat y el ayuntamiento.

¿”Método austríaco”?... si, el método consiste, simplemente, en ir barrenando el subsuelo y luego penetrar con excavadoras para retirar los escombros, apuntalando el túnel así formado. Según Joaquín Nadal, responsable de Obras Públicas de la Generalitat, “es el método más barato”… ¿más barato?

Solamente a una mente criminal puede ocurrírsele barrenar justo por debajo de bloques de viviendas en zonas geológicamente no estudiadas en profundidad. No solamente existen terrorista de ETA, ni marroquíes o de Al Qaeda, también existen terroristas que actúan en el subsuelo. Entre estos figuran los que dieron la autorización para que se colocaran toneladas de explosivos bajo las viviendas de El Carmelo. Anteriormente, esa misma línea ya había generado problemas en tramos anteriores del trazado: casas agrietadas, molestias para los vecinos, sobresaltos y sensación de que algo no iba bien… ahora esa sensación se ha transformado en el desolador espectáculo de un barrio, castigado por el paro, asaltado por una inmigración ilegal creciente, con una de las tasas de delincuencia mayores de la ciudad, que, además ¡se hunde!

El alcalde Clos ha eludido cualquier responsabilidad, el conseller Nadal la ha atribuido al anterior gobierno de la generalitat. El “anterior gobierno” de la Generalitat “no sabe / no contesta”. La ley de la omertà mafiosa ha impedido que nadie hablara de responsabilidades penales, que existen. Todo se resuelve rellenando los túneles abiertos con hormigón y asunto resuelto. Toda esta clase política, todos juntos en unión, eso sí, defienden el “nuevo estatut”.

La Biblia tenía razón cuando decía aquello de que el número de necios es infinito.

© Ernesto Milà – infokrisis – infokrisis@yahoo.es

0 comentarios